Ella no está sola, señor. - Tu no cuentas, enano.
- Está bien, entonces dime ¿Exactamente cuándo podré salir con niños? - Cuando muera... más 3 días, solo para estar seguro.
Bueno, eso explica mucho acerca de Sid.
- No puedes controlar mi vida. - Sólo quiero protegerte, eso es lo que hace un padre. - Pues, desearía que no fueras mi padre.
No importa cuánto me lleve, las encontraré.
Aunque las cosas se vean mal, hay un arcoiris a la vuelta de la esquina.
Gracias por volver. - De que hablas, jamás abandono a mis amigos.
Si no sobrevivo, búsquenme una esposa y díganle que la amo...
Si habla de la imaginaria o tal vez difunta mascota que está buscando... No, no la he visto.
Capitán Tripa, ¿en serio? También yo estoy algo panzón, pero no me pondría ese nombre.
Oye, no estoy gordo, estoy pachoncito...
¿Dos perezosos, un Mamut y un Tigre? Son como el inicio de un mal chiste.
No me llames Gatita. - Está bien, no lo haré... Gatita.
Sabes, tienes una forma de decir gracias que parece que estás diciendo muérete.
Sé lo difícil que es eso... Alejarte de todo lo que conoces.
Chicos, el apapacho no es necesario. Y sí, yo también los quiero.
Ese Mamut se llevó mi barco, mi botín, y ahora la lealtad de mi tripulación. Lo voy a destruir, y todo lo que ama.
- Yo lo empujaré por la borda, ustedes digan que fue un accidente.
¿Y el beso, por qué? - Porque los cruceros son románticos.
Tal vez la vieja demente no esté tan loca. No, sí está loca.
Te dije que tu padre jamás nos abandonaría. - Jamás.
Una vez alguien me dijo que pase lo que pase, jamás abandonas a un amigo.
Nuestro hogar ya no existe, ¿A dónde iremos?
¿Cuando tomas agua por tu trompa te sabe cómo a mocos ?
Cuanto más arrugada la pasa, más dulce es la la fruta