Puro cine negro,la tenia pendiente de hace muchisimo tiempo y me ha parecido una de las mejores películas de atracos que he visto,de las que ya no se hacen.Una trama que engancha con esos flashbacks,actores carismáticos y esa fotografía perfecta en blanco y negro.
Lastima de esos últimos 20 minutos de desenlace en los que hay un par de situaciones que desentonan con lo que estaba viendo hasta el momento (sobretodo ese final) y hacen que le baje un poco la nota porque esto iba para 10.
Buena película de Stanley Kubrick aunque no es de sus mejores films pero teniendo un presupuesto tan acotado es fantástica. Parece mas moderna por como está contada, es similar a otras películas de atracos y robos como puede ser ¨Ocean´s Eleven¨ por como se cuenta. Este film innovó en ese sentido. Las últimas escenas son un poco lentas, al final se hace medio densa y te dispersas un poco pero de todas formas se deja ver. Me gustó, no es de las mejores de Kubrick pero está buena de todas formas.
ATRACO PERFECTO
Otra peli de Kubrick que si me ha cundido,sin ser una obra maestra porque tiene errores y unas cosas que tiene menos credibilidad que un niño conduciendo en el Dakkar...los diálogos son rápidos y fluidos,los actores,psa,poco profundos,el guión,la historia un tanto imverosimil,nadie se opone a lo que pide el prota,el final de esos que te dejan con la boca abierta,aunque sabes que ese final es una de las posibilidades que tenias en mente.La música y la voz en off muy feas.
Momentazo,cuando le va una vieja al poli pidiendo auxilio y este pasa de su rollo,demostrando su poco oficio
Entretiene bastante,y no es una obra maestra ni de coña vamos.
Esta vez sí: a la tercera va a la vencida. Aquí tenemos la película que inicia el ¨cánon Kubrick¨, que seguiría hasta ¨Eyes Wide Shut¨. De nuevo con un escaso presupuesto, el cineasta y su amigo y colaborador James B. Harris lograron juntar un muy competente equipo que bajo su dirección dio una obra maestra del cine negro.
Un grupo de personas de perfil bien distinto van a preparar un atraco que va a dar la campanada, liderados por el frío y astuto criminal Johnny Clay, que acaba de salir de Alcatraz: a grandes rasgos, matarán a un prestigioso caballo de carreras y a partir de aquí, aprovechando la confusión, robarán la recaudación de la pista en un plan elaborado al dedillo: crearán el caos dentro de un orden.
Los miembros de la banda son Sterling Hayden, que funciona muy bien como Johnny Clay: es un líder taciturno y con gran autocontrol. Uno desea que le salga bien el atraco; Jay C. Flippen es el ¨productor¨ del grupo, paciente, simpático, paternalista y quizá homosexual Ted De Corsia como un rudo agente de policía corrupto que debe dinero a un mafioso de baja estofa; Elisha Cook Jr. como un contable amargado de la pista de carrera que quiere demostrar a su bella pero horrible mujer - Mary Windsor, muy buena actuación la suya - su valía sin saber que ella lo está manipulando y que está dentro del plan junto a su amante (con el que ella muestra el mismo carácter apocado de su marido. Lo interpreta Vince edwards, futura estrella televisiva por el papel protagonista de la serie médica ¨Ben Casey¨); Mike O¨Really como un pobre señor maduro, barman de la pista, que tiene a su adorable esposa enferma y que solo tiene a su anciana madre para ayudarlo; Timothy Carey, un tipo con una cara de loco que asusta, como como un indeseable y algo nerviosillo asesino a sueldo que siente adoración por dos cosas: las armas de fuego y los animalicos (pero no dudará en cargarse al jaco) , y el afamado wrestler georgiano Kola Kwariani (Nick the Wrestler, que como mánager tras su retiro trabajó con Vince McMahon Sr., que fundaría la WWE) como, precisamente, un veterano wrestler de carácter pacífico que dedica su tiempo a jugar al ajedrez - Kairani era un notable ajedrecista en la vida real - , pero que al ser lo que llaman un ¨heel¨ o un ¨rudo¨ (un luchador malote) en el ring, sabe interpretar bien el personaje de tipejo buscón para montar una comedia. Colleen Gray recibe el segundo crédito, pero a penas sale. A título de curiosidad, tiene un pequeño papel - no es extraño que lo llamen Tiny en la peli - Joe Turkel, amiguete de Kubrick con aspecto de comadreja que apareció también en un papel mayor en ¨Senderos de gloria¨ y fue, claro está, el terrorífico barman del Overlook en ¨El resplandor¨ (y, no olvidemos, el Dr. Tyrell, Padre de los replicantes, en Blade Runner).
El guion es del mismo Kubrick, con diálogos pulidos por el indómito y cínico escritor noir Jim Thompson (su ¨1280 almas¨ es una obra maestra de la literatura criminal: sádica, cínica y muy divertida) Empieza a labrarse la fama de gran adaptador de Kubrick, haciendo de la poco conocida novela original de Lionel White un relato no lineal que fascinaría e inspiraría a Quentin Tarantino en los inicios de su carrera. La narración no hace más que desorientar más al espectador, dando un punto de vista totalmente subjetivo y poco fiable de la acción. Es intrigante, irónico (la mano de Jim Thompson, sin duda) y no le falta humor (la escena de Kairani liándola es para partirse de risa).
En el aspecto técnico, Kubrick se rodea de luminarias de la serie B: Lucien Ballard, que tras una espléndida carrera en los grandes estudios se refugió en la serie B y la televisión para resurgir con fuerza en los 60, se encarga de la fotografía; Jack Rabin y Louis LeWitt aportan algunos efectos fotográficos. Dicho esto, es una película sobria, sin grandes alardes técnicos.
Interesantísima película noir, con un tratamiento innovador, personajes muy bien definidos, diálogos frescos y algo de humor. Kubrick dejó aquí su tarjeta de presentación, y la etapa gloriosa de su carrera dio inicio.
Tras sus dos primeras películas ¨Fear and desire¨ y ¨El beso del asesino¨ que fueron básicamente de aprendizaje, Kubrick realizó “The Killing” (“Atraco perfecto”) con 28 años demostrando por qué es uno de los más grandes directores de cine de todos los tiempos. La película que pasó prácticamente desapercibida en su día (a excepción de un artículo de la revista Time y una nominación de los premios Bafta). El film sin llegar a ser una obra maestra ni mucho menos es magnífica y cuenta con muchas cosas en su favor.
Las interpretaciones son muchas de ellas soberbias, como el protagonista Sterling Hayden, y también dos secundarios de lujo como la sensual y extraordinaria Marie Windsor y el impagable y uno de los mejores secundarios de todos los tiempos Elisha Cook. La fotografía es maravillosa, precisamente la gran especialidad de Kubrick, ya que él era fotógrafo. Y luego los diálogos de Jim Thompson son mordaces, secos y brillantes.
De todas formas como decía antes esta cinta ha sido reconocida por convertirse Stanley Kubrick en un monstruo del cine pero años después y rescatada del olvido, lo que ha hecho que por parte de algunos esté sobredimensionada.
La adaptación de la novela de Lionel White no fue fácil para Kubrick que no encontraba la forma adecuada y tuvo que cambiar el montaje varias veces. .
Lo que es curioso es que el titulo en español “Atraco perfecto” y el inglés “The Killing” (La matanza) no correspondan con lo que es la cinta en si, quizás algo del destino o de los perdedores hubiera estado más acertado.
La película aún así es notabilísima pero irregular, propia de un hombre joven en plena formación, pero se nota que es un arbusto que será árbol pero que aún no lo es. Gran película de género aunque no al nivel de ¨La jungla de asfalto¨ que ha tenido la suerte de que su director se convirtiera con el tiempo en uno de los grandes porque sino esta película hubiera caído en el olvido desgraciadamente como le ha pasado a ¨La fuerza del destino¨ de Abraham Polonsky por ejemplo.
¨Atraco perfecto¨ pertenece a esas cintas que nunca se las ha juzgado cinematográficamente con objetividad, ni cuando se estrenó, que sufrió un ninguneo escandalosa tratándose de una estupenda película ni con posterioridad cuando se la revisitó por muchos y descubrió por otros atraídos por la marca Kubrick.
Es evidente que junto con ¨El beso del Asesino¨, ¨Atraco Perfecto¨ resulta un film menor en la exigua filmografia de Kubrick si bien su tercera aventura tras la cámara le refiere la experiencia y notoriedad necesaria para dar a luz a su primera obra maestra: ¨Senderos de Gloria¨.
Volviendo a la cinta que nos ocupa, ¨Atraco Perfecto¨ o ¨The Killing¨ en su lengua materna es una cinta mucho más dinámica que su predecesora y por ende más interesante y entretenida. Basada en la novela de Lionel White, algo que sería recurrente en sus obras, las adaptaciones, Kubrick nos narra el atraco a un hipódromo.
La historia en sí no es nada espectacular o explosiva, y aunque está bien desarrollada, resulta un tanto descafeinada, quizás porque resulte una cinta muy al uso, muy convencional.
Sin giros o sorpresas que impresionen al espectador el guión acaba por volverse meramente transitorio.
Eso no quiere decir que sea algo malo, simplemente que sustituye la ambición y el riesgo en su planteamiento para describir una historia más minimalista.
Lo que sí es cierto, es que Kubrick recurre a ciertos elementos que (por lo menos a mi) no terminan de convencer.
En primer lugar, la voz en ¨off¨, que no sucedería nada anormal si no fuese porque tiene que ser la narración más rápida que haya esuchado en mi vida, al menos en V.O., da la sensación de que el narrador está dopado verbalmente, llegando a resultar en algunos momentos un tanto irritante.
En segundo lugar, la cronología de la historia, alterna entre los momentos pasados y presentes de muchos personajes distintos y de nuevo, no tendría por que ser algo malo, pero en esta ocasión, se evidencia a un Kubrick más torpe, más inexperto, que no termina de manejar el tempo adecuado y acaba creando un halo de confusion y la sensación de que el desarrollo no encaja como debiese, que falta engrasar la maquinaria.
Y por último: la reiteración.
La reiteración de determinadas escenas o momentos que llegamos a presenciar en hasta más de dos ocasiones, sirviendo estas para situar al espectador en el momento y tiempo de la acción, pero sinceramente, la pelicula no tiene esa complejidad como para precisar un recurso tan espeso y sobrecargado como ese, a bien que hubiesen tenido el no incluirlo.
Si bien estos detalles pormenores que Kubrick tuvo que manosear y consumir para poder llegar a lo que fué restan solidez a la cinta, dentro de ella se aprecia claramente el talento del novél neoyorquino (evidente en aquel momento para Douglas) y que le serviría para hablar de tú a tú con los grandes estudios.
Entretenida y conseguida propuesta para disfrutar de ella, imprescindible para comprender el desarrollo de uno de los genios del séptimo arte.
Genial película de intriga y suspense, de lo mejor de Kubrick. Guión muy coherente, duración ideal y una atmósfera de tensión perfecta. Lo único que me chirría un poco son los actores, alguno está demasiado sobreactuado. Cinco hombres con vidas normales deciden unirse, por diferentes motivaciones, para tratar de cambiar sus miserables existencias con un golpe que creen maestro. Lo mejor viene al final, con una explicación magistral en flashback sobre el atraco y qué ocurre con cada uno de los integrantes de la banda (es obvio que el cine de Tarantino bebe mucho de aqui). Casi redonda.
Interesante peli de Kubrick,con tipica historia de robo planeado,empieza muy pesada y se hace pesada a ratos,pero resulta muy agradable de ver,sobretodo si eres aficionado a este tipo de cine.No esta mal,pero podria haber estado mejor.
Críticas: 9
Mad Warrior
8
Mucho antes de que llegaran obras maestras de abultados presupuestos e inmensas dimensiones como ¨2.001¨, ¨La Naranja Mecánica¨ o ¨La Chaqueta Metálica¨, el sr. Kubrick ya apuntaba maneras para ser considerado un cineasta de calidad.
Y ello quedó demostrado en su segundo largometraje, una pequeña joya del cine de criminales cuyo valor y número de fans aún sigue aumentando.
El ex-convicto y criminal profesional Johnny Clay no aprendió de sus cinco años en prisión y ha preparado un plan perfecto para desvalijar la caja fuerte donde se guarda todo el dinero de las apuestas de un hipódromo, el cual alcanza la jugosa cantidad de 2 millones de dólares. Para ello ha reunido a un grupo de seis hombres: Mike OReally y George Peatty, un barman y un cajero del lugar donde se cometerá el golpe; Randy Kennan, un policía corrupto; Nikki Arane, un experto tirador; Maurice Oboukhoff, un forzudo que armará un escándalo para tener ocupados a los guardias del hipódromo, y Marvin Unger, que proporcionará el dinero para pagar a estos dos últimos.
Johnny tiene el atraco concienzudamente estudiado, con el deseo de emplear el dinero para casarse con la dulce Fay y retirarse...pero los problemas empiezan a aparecer cuando George, un tipo patético y cobarde, le habla del asunto a la zorra de su mujer, Sherry, quien para colmo le engaña con un muchacho joven. La idea de Sherry será hacerse con el dinero que robarán los compañeros de su marido sirviéndose de su amante, pero falta que el plan de Johnny salga a pedir de boca.
Tercer film de Stanley Kubrick tras esa interesante muestra de cine negro llamada ¨El Beso del Asesino¨, cuya realización fue posible gracias al apoyo del joven productor James B. Harris, quien vio en el inteligente Kubrick una garantía para triunfar en los cines; tras hacerse socios y crear la Harris-Kubrick Pictures Corporation, el productor adquirió los derechos de ¨Clean Break¨, escrita por Lionel White, un especialista de la novela negra que años después vería su obra ¨Pierrot, el Loco¨ adaptada al cine por Godard.
Harris ofrecía el proyecto a United Artist en eso que Kubrick solicitaba la ayuda del autor ¨pulp¨ de estilo más salvaje y tétrico que haya existido, Jim Thompson (sus libros han sido llevados con éxito a la gran pantalla, destacando ¨1.280 Almas¨ y las primeras versiones de ¨La Huida¨ y ¨El Asesino está en Mí¨), para colaborar en el guión. La condición de los de United Artist para financiar la película era que una estrella encabezase el reparto; de este modo, Kubrick escogió a un solvente actor ya experto en cine negro y que daba el perfil adecuado, Sterling Hayden, cuyo trabajo en ¨La Jungla de Asfalto¨ le impresionó (aunque no se hallaba entre los artistas más conocidos).
La historia de un robo concebido como un golpe maestro por un criminal profesional que acaba muy mal con el curioso detalle de una estructura desordenada y de estar narrada por esa voz ¨en off¨ que convierte la película en una especie de falso documental; así son las más importantes claves de esta muestra de cine clásico de ladrones que alberga todos los elementos del ¨noir¨ que podamos imaginar: el patético charlatán (George), el calculador criminal que quiere vivir de forma honrada (Johnny) o la furcia caprichosa (Sherry). De hecho, el triángulo que se forma entre esta última, su amante Val y George es un clásico del negro.
Kubrick y Thompson siguen la novela de White de cerca y crean un mecanismo de precisión milimétrica que se desarrolla de forma amena, violenta y trepidante, apreciándose las influencias de Huston, Hitchcock, Siodmak, Welles y el alemán Max Ophuls en el director; la más importante vino de este último y el arquetipo de maestro de ceremonias encarnado por Johnny Clay lo demuestra. El criminal que ha preparado un gran golpe es el espíritu gracias al cual encajan todas las piezas del complejo plan, que no son otras que los demás personajes; los factores exteriores serán los que le derroten, como si el propio cosmos rechazara sus pretensiones de omnisciencia, aunque su derrota se deba también a sus propias debilidades.
El aspecto más interesante de la narración sigue siendo la voz ¨en off¨, la cual llega a resultar demasiado obsesiva al permitirse una precisión insignificante sobre el tiempo, como si en realidad enunciara los pensamientos de Johnny en tercera persona; sin embargo, esta voz comete un lapsus importante cuando revela lo que hizo el protagonista a las 7 de la mañana, olvidando una escena que sucede después de que Johnny se levante y antes de que vaya al aeropuerto: un añadido por Kubrick en el que Marvin le hace a Johnny una declaración de amor torpemente disfrazada.
El director sorprende con sus movimientos de cámara (atención al genial plano subjetivo de George), su uso de la iluminación y del tiempo mientras los actores ofrecen unas notables interpretaciones, destacando la del gran Hayden; curiosamente, éste ya aparecía junto a Ted DeCorsia y Timothy Carey en otra joya del cine negro dirigida por André DeToth, ¨Ciudad en Tinieblas¨. No les van muy a la zaga Elisha Cook Jr., Kola Kwariani, el personaje más interesante, y esa Mary Windsor que resulta tan atractiva como irritante.
Violenta, cínica, muy entretenida y con un final que es una perfecta muestra del sentido del humor negro de Kubrick.
No fue un éxito de taquilla en su momento, pero poco a poco se le ha ido reconociendo su valor dentro del género, además de haberse convertido en una de las más influyentes obras del cine de atracos. Peckinpah, Tarantino, Sidney Lumet, Guy Ritchie, el español Enrique Urbizu o el japonés Takashi Ishii dan buena cuenta de ello.
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