Robert Iscove es un director que no ha proliferado mucho en el cine y, a mi parecer, esto es una total injusticia.
Creó una especie de “trilogía” en su carrera, conformada por “Alguien como tú”, “Chicos y chicas” y “From Justin to Kelly”.
Esta última fue un estrepitoso fracaso en taquilla y provocó el fin de la carrera (cinematográfica) del director.
A “Chicos y chicas” no la he visto pero espero poder hacerlo en breve.
Sobre “Alguien como tú”, lo único que puedo decir es que me parece un film BRILLANTE, y no estoy exagerando.

Está bien que no puede compararse con las grandes obras de la historia del cine, como “Psicosis” o “El padrino”, pero en SU subgénero (la comedia adolescente) esta película es una de las mejores.

Se estrenó el mismo año que “American Pie”, aunque esta última está más orientada a un público masculino, ofreciendo un catálogo de vulgaridades, lenguaje soez y humor escatológico. Igualmente, es genial.

Pero “Alguien como tú” es diferente. Es la típica película que invitarías a ver a tu novia o a la chica con la que quieres salir.
Sorprendentemente, resultó ser un exitazo en taquilla, recaudando más de 100 millones de dólares internacionalmente.

Algo que siempre me gusta destacar de las películas son las interpretaciones. No es que este film tenga las mejores actuaciones de la historia, pero el elenco cumple de sobra.
Paul Walker siempre me ha caído mal pero acá está muy bien en su papel, igual que Matthew Lillard quien me parece insoportable, pero aprueba.
También tenemos algunas apariciones de Anna Paquin después de haber conseguido el Oscar por “El piano”.
Pero, sin dudas, el centro de atención es el trío protagonista.

Gracias a esta película, me enamoré de Jodi Lyn O’Keefe (ya la había visto en “Halloween H20”, aunque en un papel bastante inferior). Esta mujer es increíblemente hermosa y sexy y borda su papel de mala. Imposible no preferirla sobre la misma protagonista. Es una verdadera pena que su carrera sea tan mediocre porque la chica tiene talento y (sobre todo) muchísima belleza, y esos son dos términos que no siempre van de la mano.
Rachael Leigh Cook me parece fea con lentes, sin lentes, en absoluto debió haber sido la heroína. Vale que no actúa mal, pero su papel es taaan soso y ella no tiene belleza exterior, ni siquiera después del cambio.
El galán de la función es Freddie Prinze Jr., un actor que me gusta mucho y el único al que permitiría que me diera por el culo (que conste que estoy cien por ciento seguro de mi heterosexualidad).
En esta película, enamora, logra que justifiquemos cualquier acto que comete. Es comestible este muchacho.
Muchos dicen que es un pésimo actor, pero (si bien no es Al Pacino) yo no creo que sea así. Sus registros son casi siempre los mismos, sin embargo es simpático y cae bien, y eso logra que, al menos yo, lo salve de la mediocridad. En estos últimos tiempos, Freddie está bastante desaparecido, desafortunadamente.

En cuanto a la gran escena de la película, creo que todo el mundo concuerda en que es el baile.
No recuerdo haber disfrutado tanto un momento musical como lo hice en esta película. Es sencillamente espectacular. La calidad de los bailarines, la coreografía, la canción, y… Jodi Lyn, en ese vestido tan sexy :3

Como curiosidad, la película fue parodiada (entre muchas otras) en la divertidísima “No es otra tonta película americana”, película que vi antes que “Alguien como tú” y que, como suele suceder, es inferior a la “original” aunque muchísimo más graciosa, por supuesto.

También debo destacar que el guión no abusa de momentos sentimentaloides que puedan abrumar el conjunto.
Por ejemplo, “Diario de una pasión” me parece detestable justamente por la cantidad de azúcar que tiene.
“Alguien como tú” está muy lejos de ello. De hecho, los protagonistas no tienen sexo ni una sola vez y el primer beso llega en la última escena. Eso suma muchísimos puntos en mi escala personal.

Redondeando… Pequeña gran sorpresa la que me llevé con este film. Muy disfrutable y muy entretenido. Logró que no mirara el minutero ni una sola vez. Como leí en una crítica de otra página: “No todo en la vida es cortarse las venas con Lars Von Trier”. ¡CUÁNTA RAZÓN!

Una excelente película para pasar el rato y estar feliz sin atormentar nuestra mente. ¡Aprendamos a valorar las películas por su género!
No la califiquen con un 5 solo porque no es comparable a las películas de Hitchcock o de Mankiewicz.
Comparémosla con cualquiera de los Farrelly o de Dennis Dugan, y la película gana enteros.

Un 10 redondo.

LO MEJOR: absolutamente todo, empezando por Jodi Lyn O’Keefe. En segundo lugar, el guión, que no es solo para fanáticos de la sensiblería, también fue escrito para la gente a la que, como a mí, le provoca náuseas mucha moralina.

LO PEOR: que no sea valorada como se merece, solo por ser una “estúpida comedia más” y no ser la “Vértigo” de los años ‘90.

LA ESCENA: el baile de graduación.

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