Entretenida comedia, que tiene algún que otro punto pero con la que yo personalmente no me reí mucho. Lo mejor son las interpretaciones: Cámara, Benjamín Vicuña, y el divertidísimo registro cómico de una de mis favoritas, Lola Dueñas. Para pasar el rato no está mal.
Críticas: 2
Parnaso
3
Pues en su momento me gustó más que esta vez que me ha parecido excesivamente aburrida y tremendamente tontorrona. En esta comedia romántica llena de enredo y toque de cocina, que por cierto, pensaba que salían más los fogones como protagonistas, aparece como el mayor Javier Cámara que nunca me ha satisfecho como actor y en consecuencia como comediante. Su tono, sus gestos... no me cunden, me cansan, porque parece que sobreactúa. También guarda un pelín de drama, su mujer muere y ha de hacerse cargo de sus hijos que tenía olvidados, después su metre se lía con su novio enredándose la cosa sin ninguna gracia. Lo único salvable es el breve papel de Alexandra Ximenez.
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