“Nefertiti” es un Peplum italiano que desarrolla un drama amoroso y una sub trama de enfrentamientos religiosos, todo enmarcado en el Egipto faraónico, con un guión tipo pulp y unas medianas actuaciones tan típicas del género.
En el reparto tenemos a Jeanne Crain, quien posee una interesante filmografía hollywoodense, haciendo el papel de la mítica reina de Egipto y a nada más y nada menos que al señor Vincent Price en el rol del malvado sumo sacerdote que intenta quedarse con el trono explotando las rencillas religiosas entre los egipcios y su legitimo Faraón. Price nos regala una escena antológica cuando le confiesa a Nefertiti: “Yo soy tu Padre”, 20 años antes de la mítica confesión del “Imperio Contraataca”.
Jeanne Crain no está especialmente brillante en su papel, mucho mejor y más carismática me parece la secundaria Liana Orfei, que pone todo de si en cada escena en la que aparece. Cuando el film se decanta por el drama romántico se pone aburridona, mucha más fuerza coge en la media hora final, el mejor momento de la película, cuando explota el clímax del conflicto religioso entre monoteístas y politeístas.
Un Peplum de temática egipcia, con poca fidelidad histórica como todos, pero que se me hizo en líneas generales pasable y que cuenta con el gancho de poder ver a Vincent Price.
Miguel Arkangel
6
“Nefertiti” es un Peplum italiano que desarrolla un drama amoroso y una sub trama de enfrentamientos religiosos, todo enmarcado en el Egipto faraónico, con un guión tipo pulp y unas medianas actuaciones tan típicas del género.
En el reparto tenemos a Jeanne Crain, quien posee una interesante filmografía hollywoodense, haciendo el papel de la mítica reina de Egipto y a nada más y nada menos que al señor Vincent Price en el rol del malvado sumo sacerdote que intenta quedarse con el trono explotando las rencillas religiosas entre los egipcios y su legitimo Faraón. Price nos regala una escena antológica cuando le confiesa a Nefertiti: “Yo soy tu Padre”, 20 años antes de la mítica confesión del “Imperio Contraataca”.
Jeanne Crain no está especialmente brillante en su papel, mucho mejor y más carismática me parece la secundaria Liana Orfei, que pone todo de si en cada escena en la que aparece. Cuando el film se decanta por el drama romántico se pone aburridona, mucha más fuerza coge en la media hora final, el mejor momento de la película, cuando explota el clímax del conflicto religioso entre monoteístas y politeístas.
Un Peplum de temática egipcia, con poca fidelidad histórica como todos, pero que se me hizo en líneas generales pasable y que cuenta con el gancho de poder ver a Vincent Price.
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