Esta muy buena película, sostenida en dos tremendas actuaciones (de Kingsley y Connelly) nos deja atónitos: atónitos ante la falta de comunicación en que vivimos, cuánto desconfiamos el uno del otro, qué mezquinos nos hemos vuelto, y cuán solos estamos. Creo que, según una historia narrada en la película, todos somos aves heridas, algunos más que otros, pero casi todos solos a fin de cuentas, y cada uno con su propia y muchas veces triste historia a cuestas.
Qué importante resulta entonces el escuchar, el prestar atención a lo que otros sienten o han vivido...para que las cosas no tomen el rumbo que pueden tomar cuando nos alejamos de nuestra humanidad. Un guión aparentemente simple, pero lleno de pequeños grandes detalles dramáticos. Un gran elenco. Es una película íntima, donde las emociones de los personajes tiñen hasta los colores del paisaje. Muy buena.
thirstyforblood
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Esta muy buena película, sostenida en dos tremendas actuaciones (de Kingsley y Connelly) nos deja atónitos: atónitos ante la falta de comunicación en que vivimos, cuánto desconfiamos el uno del otro, qué mezquinos nos hemos vuelto, y cuán solos estamos. Creo que, según una historia narrada en la película, todos somos aves heridas, algunos más que otros, pero casi todos solos a fin de cuentas, y cada uno con su propia y muchas veces triste historia a cuestas.
Qué importante resulta entonces el escuchar, el prestar atención a lo que otros sienten o han vivido...para que las cosas no tomen el rumbo que pueden tomar cuando nos alejamos de nuestra humanidad. Un guión aparentemente simple, pero lleno de pequeños grandes detalles dramáticos. Un gran elenco. Es una película íntima, donde las emociones de los personajes tiñen hasta los colores del paisaje. Muy buena.
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