El juego sigue una línea estándar. En primer lugar tendremos que soportar los saludos de todos nuestro amigos, aproximadamente siete, que nos irán contando sus líos amorosos, problemas de la noche anterior, y todo tipo de situaciones que les suceden a las niñas de 11 años. Después de esto, en una determinada situación, tendremos que ir eligiendo opciones, por lo general al azar, hasta conseguir + llegar al final de la noche y combatir contra algún maléfico enemigo, siempre controlado por la maléfica maga enemigo de Sakura tanto en el anime como en el juego.
Para vencer a los susodichos tendremos varias posibilidades. Bien podremos herirles con nuestra magia, o esquivarles para que se den solos. Siempre lo veremos desde la primera persona, desde nuestros ojos o de los de cualquier amigo. Pero no siempre tendremos que combatir contra temerosos ositos de peluche o bicicletas mortíferas, tampoco contra remolinos de agua que desean nuestra defunción. También tendremos que salvar a nuestros amigos, evitándoles caídas dolorosas, despertándoles para llegar a clase y que no se duerman (¡!) y un sinfín de situaciones, habitualmente absurdas, pero divertidas.
Sinopsis:
El juego sigue una línea estándar. En primer lugar tendremos que soportar los saludos de todos nuestro amigos, aproximadamente siete, que nos irán contando sus líos amorosos, problemas de la noche anterior, y todo tipo de situaciones que les suceden a las niñas de 11 años. Después de esto, en una determinada situación, tendremos que ir eligiendo opciones, por lo general al azar, hasta conseguir + llegar al final de la noche y combatir contra algún maléfico enemigo, siempre controlado por la maléfica maga enemigo de Sakura tanto en el anime como en el juego.
Para vencer a los susodichos tendremos varias posibilidades. Bien podremos herirles con nuestra magia, o esquivarles para que se den solos. Siempre lo veremos desde la primera persona, desde nuestros ojos o de los de cualquier amigo. Pero no siempre tendremos que combatir contra temerosos ositos de peluche o bicicletas mortíferas, tampoco contra remolinos de agua que desean nuestra defunción. También tendremos que salvar a nuestros amigos, evitándoles caídas dolorosas, despertándoles para llegar a clase y que no se duerman (¡!) y un sinfín de situaciones, habitualmente absurdas, pero divertidas.