Fatídico intento de levantar una saga que siempre se ha caracterizado por sus superventas con acción a raudales, misteriosos enigmas, argumento entretenido y, especialmente, una forma muy adulta de tratar una historia. En este caso se retrocede hasta el nivel de los juegos de DS como Phantom Hourglass, con unos gráficos de pena y toda su frescura inexistente.
Se parece más a un juego de los Teletubbies para un crío de 5 años e incluso menos. La banda sonora es patética, el desarrollo se termina haciendo cansino y el misterio brilla por su ausencia. Quizás sólo se salva algún que otro acertijo dífícil y el malo malísimo del Heraldo, porque los demás villanos son de risa, destacando al perrito faldero del Heraldo. No sabía que ahora se llevaba lo del travestismo en los videojuegos... de pena.
En resumen, hará las delicias de un niño pequeño, pero por favor, no lo provéis si os van las historias coherentes, adultas y con sentido, porque Skyward Sword no tiene nada de esto. La peor entrega de Zelda en todos los tiempos. Decepcionante.

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