¨Brutal: Paws of Fury¨ se trata de un curioso juego de peleas protagonizado por furrys, o animales antropomórficos, quizás siendo el único protagonizado completamente por estos.
Claramente la idea de los creadores a la hora de tomar esta decisión no era atraer a la gente que le van este tipo de cosas, sino para representar a través de los animales los distintos tipos de personas o luchadores. Si prestamos atención a la pantalla de selección de personajes, en la parte de abajo hay una especie de texto que se desplaza lateralmente que nos explica a que tipo de persona pertenece dicho animal, mostrándonos su forma de ver la vida. De hecho, si nos paramos a leer este texto en cada uno de los personajes, no tardaremos a encontrarnos con el animal con el que nos parecemos (en mi caso es la rata). Ahora, pese a que ese texto empieze con la pregunta, ¨¿Quien juega a...?¨, no siginifica que ese personaje sea precisamente al que mejor sepamos manejar. A la derecha de la imagen del personaje es donde se nos indica quien es y la razón de por la que esta metido en el torneo.
Nada más empezar, aparecerá una pantalla donde se nos mostrará el mapa de la isla y nos vendrá en el cuento del lugar y personaje contra el que luchamos. Claramente esto esta puesto de forma predeterminada para todos los personajes, por lo que siempre seguiremos el mismo nombre. Nada más empezar a combatir, nos encontraremos con el principal problema del juego: La falta de combos. Más que falta, es que los combos son completamente inexistentes. Pese a que los jugadores que empiecen con los juegos de lucha esto no les supone ningún problema, los más experimentados se verán con la dificultad de adaptarse a este modo de juego. Para postre, la dificultad más pequeña del juego ya esta puesta como predeterminada, pero el caso es que la dificultad no se ve marcada por el cinturón que representa la dificultad, puesto que cada dos batallas conseguiremos uno nuevo, sino por el personaje contra el que nos toca combatir. La rata por ejemplo, abusa mucho de los movimientos de recuperación y del bloqueo, mientras que la llama que tenemos como jefe abusa completamente de los ataques especiales, aunque por suerte las de ella son los más fáciles de esquivar.
Pese a que el juego carece de combos, si que presenta ataques especiales, los cuales, el juego tiene la amabilidad de enseñarnos el como se hace cuando los desbloqueemos. Por lo general, los combates siempre tiran a atacar al momento oportuno dandole al botón correcto.
Otra cosa a destacar, son los escenarios. Hay muchos, y todos son bastante originales. También presenta unos finales bastante buenos para cada personaje, que se adaptan completamente a la personalidad de este. En realidad, la gracia del juego se encuentra en que aquí no hay malos. Simplemente una panda de luchadores que se reúnen para ver quien es el mejor. Dichos personajes están bien diseñados y son bastante memorables, en especial la zorra (en el sentido literal de la palabra; si, los creadores eran unos cachondos), la cual nada más verla sabremos que en algún lugar de internet estará sufriendo algún tipo de vejación por parte de los amantes de los furrys. Todos los personajes, especialmente la zorra, serán recordados por los jugadores por su personalidad, cuyos movimientos y burlas son un espejo de ella.
El juego también cuenta con una estupenda banda sonora, y algunos efectos de sonido bastante buenos, pero las voces de daño de los personajes les ha quedado fatal, más que nada porque es la misma voz para todos los personajes. En un principio no nos percataremos de esto, pero al manejar o luchar contra la zorra, lo veremos más claro.
El juego también cuenta con ciertas animaciones de los personajes bastante graciosas, especialmente cuando estos están mareados.
Quitando todo esto, el juego puede considerarse un pequeño clásico en los sistemas donde ha aparecido, pero tras acabar de jugarlo con todos los personajes, solo puedo decir que es un juego muy entretenido y desafiante, pero que quitando los buenos recuerdos que este nos pueda dar, no hay mucho por lo que valga la pena jugar a este juego, y aún más teniendo en cuenta que posee una pobre plantilla de movimientos carentes de combos.
Jack el Destripador
7
¨Brutal: Paws of Fury¨ se trata de un curioso juego de peleas protagonizado por furrys, o animales antropomórficos, quizás siendo el único protagonizado completamente por estos.
Claramente la idea de los creadores a la hora de tomar esta decisión no era atraer a la gente que le van este tipo de cosas, sino para representar a través de los animales los distintos tipos de personas o luchadores. Si prestamos atención a la pantalla de selección de personajes, en la parte de abajo hay una especie de texto que se desplaza lateralmente que nos explica a que tipo de persona pertenece dicho animal, mostrándonos su forma de ver la vida. De hecho, si nos paramos a leer este texto en cada uno de los personajes, no tardaremos a encontrarnos con el animal con el que nos parecemos (en mi caso es la rata). Ahora, pese a que ese texto empieze con la pregunta, ¨¿Quien juega a...?¨, no siginifica que ese personaje sea precisamente al que mejor sepamos manejar. A la derecha de la imagen del personaje es donde se nos indica quien es y la razón de por la que esta metido en el torneo.
Nada más empezar, aparecerá una pantalla donde se nos mostrará el mapa de la isla y nos vendrá en el cuento del lugar y personaje contra el que luchamos. Claramente esto esta puesto de forma predeterminada para todos los personajes, por lo que siempre seguiremos el mismo nombre. Nada más empezar a combatir, nos encontraremos con el principal problema del juego: La falta de combos. Más que falta, es que los combos son completamente inexistentes. Pese a que los jugadores que empiecen con los juegos de lucha esto no les supone ningún problema, los más experimentados se verán con la dificultad de adaptarse a este modo de juego. Para postre, la dificultad más pequeña del juego ya esta puesta como predeterminada, pero el caso es que la dificultad no se ve marcada por el cinturón que representa la dificultad, puesto que cada dos batallas conseguiremos uno nuevo, sino por el personaje contra el que nos toca combatir. La rata por ejemplo, abusa mucho de los movimientos de recuperación y del bloqueo, mientras que la llama que tenemos como jefe abusa completamente de los ataques especiales, aunque por suerte las de ella son los más fáciles de esquivar.
Pese a que el juego carece de combos, si que presenta ataques especiales, los cuales, el juego tiene la amabilidad de enseñarnos el como se hace cuando los desbloqueemos. Por lo general, los combates siempre tiran a atacar al momento oportuno dandole al botón correcto.
Otra cosa a destacar, son los escenarios. Hay muchos, y todos son bastante originales. También presenta unos finales bastante buenos para cada personaje, que se adaptan completamente a la personalidad de este. En realidad, la gracia del juego se encuentra en que aquí no hay malos. Simplemente una panda de luchadores que se reúnen para ver quien es el mejor. Dichos personajes están bien diseñados y son bastante memorables, en especial la zorra (en el sentido literal de la palabra; si, los creadores eran unos cachondos), la cual nada más verla sabremos que en algún lugar de internet estará sufriendo algún tipo de vejación por parte de los amantes de los furrys. Todos los personajes, especialmente la zorra, serán recordados por los jugadores por su personalidad, cuyos movimientos y burlas son un espejo de ella.
El juego también cuenta con una estupenda banda sonora, y algunos efectos de sonido bastante buenos, pero las voces de daño de los personajes les ha quedado fatal, más que nada porque es la misma voz para todos los personajes. En un principio no nos percataremos de esto, pero al manejar o luchar contra la zorra, lo veremos más claro.
El juego también cuenta con ciertas animaciones de los personajes bastante graciosas, especialmente cuando estos están mareados.
Quitando todo esto, el juego puede considerarse un pequeño clásico en los sistemas donde ha aparecido, pero tras acabar de jugarlo con todos los personajes, solo puedo decir que es un juego muy entretenido y desafiante, pero que quitando los buenos recuerdos que este nos pueda dar, no hay mucho por lo que valga la pena jugar a este juego, y aún más teniendo en cuenta que posee una pobre plantilla de movimientos carentes de combos.
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