B.O.B. se trata de un divertido videojuego en el que manejaremos al robot del mismo nombre. Este se estrella en un planeta y deberemos recorrerlo hasta encontrarnos con otro coche con el que volver a casa.
Tras leer esto nos haremos una idea incorrecta de por donde van los tiros del juego. El juego en si es puro cachondeo, y el personaje al que manejamos no parece que se tome muy en serio su situación.
El juego simplemente trata de que tendremos que pasarnos los distintos escenarios, y cada cuatro escenarios se nos concederá un password, permitiendonos volver a donde nos encontrábamos otro día. Dichos niveles suelen repetir los escenarios en cuanto a forma y textura se refiere, aunque claramente tienen una distribución distinta, así como dificultad. Dichos tipos de escenarios se pueden distinguir en el mapa, ya que los lugares o edificios donde vamos a parar tienen un estilo arquitectonico diferente. A partir de este estilo podremos deducir con que tipo de niveles nos vamos a encontrar.
Dentros de estos tendremos que manejar a B.O.B y derrotar a los enemigos con la ayuda de una serie de armas y artilugios que nos serán de muy ayuda. Las armas son todas muy buenas y ofrecen una gran variedad al juego, así como los artilugios, que podremos utilizar para llegar a lugares más altos o protegernos de las caídas más difíciles como si de un Lemming fueramos (si, con paraguas). Estos artilugios hay que usarlos sabiamente, puesto que tenemos un tiempo limitado para llegar al final del nivel y en el caso de no tener cierto artilugio para llegar a cierto nivel, tendremos que buscarlo por los escenarios y esto posiblemente puede llevarnos a la muerte, puesto que dichos artilugios no se regeneran.
Cada cierto número de niveles nos enfrentaremos contra un jefazo, en el que deberemos equiparnos con las armas adecuadas y tener suficiente cantidad de campos de fuerza para evitar que nos hagan mucho daño. Dichos niveles son para mi los mejores, puesto que los enfrentamientos contra los jefes son muy divertidos.
Otro tipo de nivel será en el que deberemos subirnos a una coche y tendremos que llegar antes de que se acabe el tiempo al final del nivel, tratando de no recibir muchos daños para evitar que este explote.
Como he dicho anteriormente el juego es puro cachondeo, y no solo por las frases que dice el personaje al principio de cada nivel o tras morir, sino por la forma de trollearnos de los creadores. Cuando logras conseguir el coche con el que supuestamente tendríamos que llegar a la cita, nos encontraremos como el personaje soltando frases filosóficas o gilipollescas haciendose el puto chulo, cuando de repente el coche cae en otro planeta que deberemos superar haciendo que nos llevemos las manos a la cara.
La segunda y, por suerte, última vez que nos ocurre esto, parece que este hecha apostas para que nos caguemos con el puto robot de mierda, viendonos obligados a superar el tercer planeta y el más difícil.
El hecho por el que le pongo el 7 y no un 8 deriva de esto. Si no teníamos suficiente con que los escenarios acababan volviéndose monotonos y repetitivos en el primer planeta, vamos a tener que pasarnos dos planetas más con dos o tres escenarios distintos que se repiten una y otra vez cambiando del uno al otro para que al jugador no le parezca tan coñazo como debería ser. Si hubiese mayor variedad de escenarios es muy posible que este juego siguiera siendo recordado a día de hoy, y su carismático personaje con el que cualquier adolescente pueda sentirse identificado no hubiese sido olvidado, pero lamentablemente no es así, y al final puede llegar a parecer que nos han hecho jugar al mismo juego tres veces seguidas.
Por último tengo que destacar su música, muy buena, y que nos mete de lleno en el juego.
Por lo demás, B.O.B. se trata de un juego que merece la pena volverlo a probar, y cuyo buen final, llegará a compensar todos los esfuerzos que hayamos puesto a la hora de acabarlo. Lo más seguro es que tras acabarlos no nos vuelvan a entrar ganas de jugarlo durante un largo tiempo, pero cuando volvamos a ponerle la mano encima volveremos a recordar lo divertido que era pese a sus fallos. Se trata de un juego que reúne diversión, velocidad, gran cantidad de armas, acción, buena mecánica, sonido y gráficos, y un personaje muy carismático, una gran razón para probarlo.
Jack el Destripador
7
B.O.B. se trata de un divertido videojuego en el que manejaremos al robot del mismo nombre. Este se estrella en un planeta y deberemos recorrerlo hasta encontrarnos con otro coche con el que volver a casa.
Tras leer esto nos haremos una idea incorrecta de por donde van los tiros del juego. El juego en si es puro cachondeo, y el personaje al que manejamos no parece que se tome muy en serio su situación.
El juego simplemente trata de que tendremos que pasarnos los distintos escenarios, y cada cuatro escenarios se nos concederá un password, permitiendonos volver a donde nos encontrábamos otro día. Dichos niveles suelen repetir los escenarios en cuanto a forma y textura se refiere, aunque claramente tienen una distribución distinta, así como dificultad. Dichos tipos de escenarios se pueden distinguir en el mapa, ya que los lugares o edificios donde vamos a parar tienen un estilo arquitectonico diferente. A partir de este estilo podremos deducir con que tipo de niveles nos vamos a encontrar.
Dentros de estos tendremos que manejar a B.O.B y derrotar a los enemigos con la ayuda de una serie de armas y artilugios que nos serán de muy ayuda. Las armas son todas muy buenas y ofrecen una gran variedad al juego, así como los artilugios, que podremos utilizar para llegar a lugares más altos o protegernos de las caídas más difíciles como si de un Lemming fueramos (si, con paraguas). Estos artilugios hay que usarlos sabiamente, puesto que tenemos un tiempo limitado para llegar al final del nivel y en el caso de no tener cierto artilugio para llegar a cierto nivel, tendremos que buscarlo por los escenarios y esto posiblemente puede llevarnos a la muerte, puesto que dichos artilugios no se regeneran.
Cada cierto número de niveles nos enfrentaremos contra un jefazo, en el que deberemos equiparnos con las armas adecuadas y tener suficiente cantidad de campos de fuerza para evitar que nos hagan mucho daño. Dichos niveles son para mi los mejores, puesto que los enfrentamientos contra los jefes son muy divertidos.
Otro tipo de nivel será en el que deberemos subirnos a una coche y tendremos que llegar antes de que se acabe el tiempo al final del nivel, tratando de no recibir muchos daños para evitar que este explote.
Como he dicho anteriormente el juego es puro cachondeo, y no solo por las frases que dice el personaje al principio de cada nivel o tras morir, sino por la forma de trollearnos de los creadores. Cuando logras conseguir el coche con el que supuestamente tendríamos que llegar a la cita, nos encontraremos como el personaje soltando frases filosóficas o gilipollescas haciendose el puto chulo, cuando de repente el coche cae en otro planeta que deberemos superar haciendo que nos llevemos las manos a la cara.
La segunda y, por suerte, última vez que nos ocurre esto, parece que este hecha apostas para que nos caguemos con el puto robot de mierda, viendonos obligados a superar el tercer planeta y el más difícil.
El hecho por el que le pongo el 7 y no un 8 deriva de esto. Si no teníamos suficiente con que los escenarios acababan volviéndose monotonos y repetitivos en el primer planeta, vamos a tener que pasarnos dos planetas más con dos o tres escenarios distintos que se repiten una y otra vez cambiando del uno al otro para que al jugador no le parezca tan coñazo como debería ser. Si hubiese mayor variedad de escenarios es muy posible que este juego siguiera siendo recordado a día de hoy, y su carismático personaje con el que cualquier adolescente pueda sentirse identificado no hubiese sido olvidado, pero lamentablemente no es así, y al final puede llegar a parecer que nos han hecho jugar al mismo juego tres veces seguidas.
Por último tengo que destacar su música, muy buena, y que nos mete de lleno en el juego.
Por lo demás, B.O.B. se trata de un juego que merece la pena volverlo a probar, y cuyo buen final, llegará a compensar todos los esfuerzos que hayamos puesto a la hora de acabarlo. Lo más seguro es que tras acabarlos no nos vuelvan a entrar ganas de jugarlo durante un largo tiempo, pero cuando volvamos a ponerle la mano encima volveremos a recordar lo divertido que era pese a sus fallos. Se trata de un juego que reúne diversión, velocidad, gran cantidad de armas, acción, buena mecánica, sonido y gráficos, y un personaje muy carismático, una gran razón para probarlo.
Recomendable.
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