Virtua Fighter se trata de la primera entrega de una de las sagas pilares de lucha, a la vez de un juego que creo escuela al ser el primer juego de lucha 3D.
Es posible que el plantel de personajes no sea muy extenso (creo que un total de 8), pero esto se compensa fácilmente con la originalidad de estos y su gran variedad de golpes.
También es posible que el paso del tiempo haya hecho mella en el, además de que juegos de su misma época y también en 3D como Battle Arena Toshinden tengan mejores gráficos, pero el hecho de ser el primer juego de lucha 3D y las risas que nos hacen pegar los personajes con el careto que ponen tras ganar un combate también lo compensa.
Pero aunque ofrezca un jefe final digno (Dural), una buena música (especialmente la de los creditos finales) y pese a lo divertido que resulta ser jugarlo y aun más en compañía, el juego se estanca ahí. Solo hay un modo desbloqueable (el modo ranking) que básicamente es lo mismo, y si lo comparamos con otros juegos del mismo estilo, encontraremos de mejores y más brutales. Aunque también hay que tener en cuenta que es un juego hecho más que nada para maquinas recreativas.
Aun así hay que tener una cosa clara: Vitua Fighter siempre sera la reina de los juegos de lucha de las maquinas recreativas y, siempre estará ahí, en los salones recreativos, vayas donde vayas, sea la secuela que sea.
Jack el Destripador
8
Virtua Fighter se trata de la primera entrega de una de las sagas pilares de lucha, a la vez de un juego que creo escuela al ser el primer juego de lucha 3D.
Es posible que el plantel de personajes no sea muy extenso (creo que un total de 8), pero esto se compensa fácilmente con la originalidad de estos y su gran variedad de golpes.
También es posible que el paso del tiempo haya hecho mella en el, además de que juegos de su misma época y también en 3D como Battle Arena Toshinden tengan mejores gráficos, pero el hecho de ser el primer juego de lucha 3D y las risas que nos hacen pegar los personajes con el careto que ponen tras ganar un combate también lo compensa.
Pero aunque ofrezca un jefe final digno (Dural), una buena música (especialmente la de los creditos finales) y pese a lo divertido que resulta ser jugarlo y aun más en compañía, el juego se estanca ahí. Solo hay un modo desbloqueable (el modo ranking) que básicamente es lo mismo, y si lo comparamos con otros juegos del mismo estilo, encontraremos de mejores y más brutales. Aunque también hay que tener en cuenta que es un juego hecho más que nada para maquinas recreativas.
Aun así hay que tener una cosa clara: Vitua Fighter siempre sera la reina de los juegos de lucha de las maquinas recreativas y, siempre estará ahí, en los salones recreativos, vayas donde vayas, sea la secuela que sea.
Un 8.
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