Ficha Adiboo y el Secreto de Paziral


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Críticas de Adiboo y el Secreto de Paziral (1)




Jack el Destripador

  • 1 Feb 2015

6


Una cosa a tener en cuenta a la hora de jugar a ¨Adiboo y el Secreto de Paziral¨ es el hecho de que Adiboo es el protagonista de una saga de videojuegos y libros educativos, lo que deja bien claro que la dificultad en este juego va a ser completamente inexistente y que vamos a tener que meternos en la piel de un niño de entre 3 y 5 años para entender todas las paridas que conforman el juego.

Cuando iniciemos y le damos a nueva partida nos encontraremos, para nuestra sorpresa, que el juego nos da a elegir entre dos dificultades, fácil y difícil. ¿Difícil? ¿Que significado tendrá la palabra difícil en un juego dirigido a preescolares?. Para entender esto claramente deberemos jugar a las dos dificultades.

Empecé por la dificultad fácil, y para mi sorpresa, descubrí que el personaje a controlar era el mono y no Adiboo. El primer nivel vendría a ser el tutorial, y controlando al mono deberemos seguir a Adiboo que nos ayudará a manejarnos por el juego al ritmo de una música bastante relajante y agradable. En el segundo nivel controlaremos una avioneta y deberemos llegar a la meta mientras tratamos de recoger todos los objetos que podemos. A partir del nivel 3 ya veremos por donde van los tiros en cuanto a estilo de juego.

Resulta ser que todos los niveles en este juego (que los hay de dos tipos) son la misma mierda. Los del tipo plataformas de desplazamiento lateral consisten en correr todo el rato disparando a los pocos robots que hay (que no nos harán nada) y recogiendo todos los bonus, y los del tipo persecución que se ven en tercera persona consisten en recoger todos los bonus en pantalla y llegar a la meta. Lo único que tiene en común ambos tipos de niveles es que deberemos seguir a Adiboo, el cual no se calla ni bajo el agua y en todo momento nos dará un consejo que, seguramente, ya nos lo dio muchas veces anteriormente. Llegará un punto en que pensaremos que Adiboo nos esta tratando como unos putos retrasados. Algunos niveles terminan con un jefazo final, donde un personaje secundario tratará de distraer al jefazo mientras que nosotros debemos golpearle lanzándole algo, aunque más que distraer al jefazo, el secundarión se vuelve un auténtico estorbo que no nos deja ver una mierda. Hay pocos niveles, y muy cortos, por lo que el juego se puede acabar perfectamente en una hora.

Entonces... ¿Que sentido tiene este juego? ¿Es una burla hacía el espectador? No... Se trata de un juego educativo, al igual que muchos otros juegos de Adiboo, solo que... esta vez... se trata de un juego educativo donde los niños aprenderán como jugar juegos de plataformas. Vamos a decir que se trata de una simulación de realidad virtual que tiene lugar en un mundo de plataformas. Los niños experimentan con los controles... saltan... se caen por los agujeros... disparan enemigos... buscan pasajes secretos... y todo sin el menos peligro. Si caen en un agujero el mono que les sirve de avatar se teletransportará al punto de control, representado por un bicho o algo que resulte gracioso para el niño, mientras que Adiboo con su agradable y, a la vez, molesta voz dará ánimos para que de más de si y no se vuelva a caer, y los robots enemigos solo sirven para el tiro al blanco, puesto que no tienen ni medidas defensivas ni ofensivas. Los niveles de persecución lo mismo, con Adiboo indicándole al niño de en que momentos puede probar a acelerar sin peligro alguno.

Los bonus no sirven de mucho, solo activarán un modo cronometrado para dicho nivel para que el niño trate de terminar el nivel lo antes posible. El juego también contiene cinemáticas, todas ellas hechas por ordenador y resultan ser lo mejor del juego, puesto que están bastante curradas.

¿La dificultad difícil? Bueno... Adiboo al que en la dificultad fácil no pararemos de seguir en todos los niveles y que no parará de animarnos y darnos consejos con la ayuda de un Walkie Talkie que recogemos en el primer nivel, no estará ahí para apoyar emocionalmente al niño y hacer la puñeta a alguien con un buen sentido de la razón y la responsabilidad. Puede que al principio del nivel este ahí, pero no tardará en teletransportarse de forma misteriosa al final del nivel.

La pregunta es... ¿vale la pena hacer que el niño aprenda a jugar plataformas con este juego? No. Para ello le das un Mario o un Sonic y será cuestión de minutos para que se adapte al juego y sus controles sin que un niñato del tres al cuarto le diga cada dos por tres lo que debe hacer y lo que no, además de que mola más decir que tu primer plataformas fue un Sonic o un Mario o un Rayman o cualquier videojuego que no sea este, que decir que tu primer plataformas fue un juego de mierda llamado Adiboo. El hecho de que no haya penalización y que todo sea alegre y carente de problemas y dificultades dudo que ayude al niño a estar preparado para un plataformas en plan serio.

Pese a esto, el juego no es para suspenderlo. Es tan corto que no da tiempo para encontrarle errores, y durante el tiempo que lo juegas pasas un buen rato, por lo que el 6 se lo merece.



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