Una auténtica delicia de corto basado en el universo de Star Wars y cuya acción se sitúa entre los episodios 3 y 4.
El argumento es sencillo: Mara Jade es una integrante de la Alianza Rebelde que ha sido tomada prisionera por los imperiales y enviada a las minas de Kessel, donde el gobernador local la somete a duras torturas. Por otra parte, Boba Fett, contratado por Jabba el Hutt, se encuentra también en Kessel en esos momentos, negociando sobre la entrada de un cargamento de especias, que tripulan por supuesto Han Solo y Chewie. Para liberar a Mara, un grupo de rebeldes se infiltra en la base militar de Kessel, aunque las cosas no se desarrollan como uno cabría esperar.
La verdad es que el corto es un auténtico lujazo, ya que a pesar de que tiene un ínfimo presupuesto, tiene todo lo que un fan de Star Wars querría que un corto tuviera, y para más inri su estilo cinematográfico es muy similar al de los Episodios IV-VI. De hecho, hay muchos guiños a estos episodios, como cuando uno de los imperiales le toca la barbilla a una camarera (igual que Boba Fett en el palacio de Jabba), la frase que le suelta Vader al villano de turno tras asfixiarlo (Disculpa aceptada...), o el momento en el que un rebelde destroza las comunicaciones usando su bláster (como Han Solo en el Episodio IV).
Es cierto que el corto tiene unos efectos especiales un tanto flojos o que los personajes alienígenas tienen caretas de plasticote duro que cantan a la legua, pero aun así tiene mucho mérito haber logrado tanto con tan poco, sobre todo porque este corto no es actual, sino del año 1999. Visto desde la actualidad, esos efectos especiales son bastante dignos.
Y además, el corto está hecho por y para fans. Aparecen Mara Jade y Kyle Katarn del Universo Expandido, tenemos a Boba Fett ayudando a los protagonistas, vemos el Halcón Milenario e incluso llegamos a escuchar la voz de Han Solo y los gruñidos de Chewbacca en una miniescena, aparecen Darth Vader y el Emperador, e incluso tienen el detalle de incluir a un Zev Senesca muy similar al actor del Episodio V, aunque algo más joven, claro.
En general, un gran corto. No es perfecto, pero es todo lo que un fan de Star Wars podría esperar.
Raúl Rubio Peñas
10
Una auténtica delicia de corto basado en el universo de Star Wars y cuya acción se sitúa entre los episodios 3 y 4.
El argumento es sencillo: Mara Jade es una integrante de la Alianza Rebelde que ha sido tomada prisionera por los imperiales y enviada a las minas de Kessel, donde el gobernador local la somete a duras torturas. Por otra parte, Boba Fett, contratado por Jabba el Hutt, se encuentra también en Kessel en esos momentos, negociando sobre la entrada de un cargamento de especias, que tripulan por supuesto Han Solo y Chewie. Para liberar a Mara, un grupo de rebeldes se infiltra en la base militar de Kessel, aunque las cosas no se desarrollan como uno cabría esperar.
La verdad es que el corto es un auténtico lujazo, ya que a pesar de que tiene un ínfimo presupuesto, tiene todo lo que un fan de Star Wars querría que un corto tuviera, y para más inri su estilo cinematográfico es muy similar al de los Episodios IV-VI. De hecho, hay muchos guiños a estos episodios, como cuando uno de los imperiales le toca la barbilla a una camarera (igual que Boba Fett en el palacio de Jabba), la frase que le suelta Vader al villano de turno tras asfixiarlo (Disculpa aceptada...), o el momento en el que un rebelde destroza las comunicaciones usando su bláster (como Han Solo en el Episodio IV).
Es cierto que el corto tiene unos efectos especiales un tanto flojos o que los personajes alienígenas tienen caretas de plasticote duro que cantan a la legua, pero aun así tiene mucho mérito haber logrado tanto con tan poco, sobre todo porque este corto no es actual, sino del año 1999. Visto desde la actualidad, esos efectos especiales son bastante dignos.
Y además, el corto está hecho por y para fans. Aparecen Mara Jade y Kyle Katarn del Universo Expandido, tenemos a Boba Fett ayudando a los protagonistas, vemos el Halcón Milenario e incluso llegamos a escuchar la voz de Han Solo y los gruñidos de Chewbacca en una miniescena, aparecen Darth Vader y el Emperador, e incluso tienen el detalle de incluir a un Zev Senesca muy similar al actor del Episodio V, aunque algo más joven, claro.
En general, un gran corto. No es perfecto, pero es todo lo que un fan de Star Wars podría esperar.
Merece la pena.
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