Un carterista intenta robar a Charlot introduciendo su mano en el bolsillo de éste. Lo encuentra vacío, pero mientras, Charlot ha sacado del bolsillo del ladrón primero un cigarrillo y después una cerilla. Enciende el cigarrillo, da las gracias al ladrón y se despide. Posteriormente ve a un francés con su amada, y después a una niñera con su enamorado. Charlot, después de recibir una lección del + francés decide probar suerte con la niñera. Tras robar 6 o 7 salchichas en un puesto, galantea con la niñera, que se enfada y llama a su galán. Mientras, el ladrón ha robado al fracés el monedero. El delincuente ve los bocadillos de Charlot e intenta robarlos mientras éste recupera el portamonedas. Tras venderlo y volver a comprarlo al novio de la niñera se lo da al ladrón, se lo roba y se lo entrega a la niñera. Se encuentra con el francés intentando suicidarse y le da una patada y lo tira al agua, todos se ponen a perseguirlo acabando él también en el agua.
Sinopsis:
Un carterista intenta robar a Charlot introduciendo su mano en el bolsillo de éste. Lo encuentra vacío, pero mientras, Charlot ha sacado del bolsillo del ladrón primero un cigarrillo y después una cerilla. Enciende el cigarrillo, da las gracias al ladrón y se despide. Posteriormente ve a un francés con su amada, y después a una niñera con su enamorado. Charlot, después de recibir una lección del + francés decide probar suerte con la niñera. Tras robar 6 o 7 salchichas en un puesto, galantea con la niñera, que se enfada y llama a su galán. Mientras, el ladrón ha robado al fracés el monedero. El delincuente ve los bocadillos de Charlot e intenta robarlos mientras éste recupera el portamonedas. Tras venderlo y volver a comprarlo al novio de la niñera se lo da al ladrón, se lo roba y se lo entrega a la niñera. Se encuentra con el francés intentando suicidarse y le da una patada y lo tira al agua, todos se ponen a perseguirlo acabando él también en el agua.
Buen corto del genial Charlie Chaplin, un icono del humor de aquella época, no le hacía falta hablar para provocar las risas del espectador, como es este caso. Vaya líos en los que se mete siempre este hombre, jeje.... (seguir leyendo)
tallero
Buen corto del genial Charlie Chaplin, un icono del humor de aquella época, no le hacía falta hablar para provocar las risas del espectador, como es este caso. Vaya líos en los que se mete siempre este hombre, jeje.... (seguir leyendo)