[NOTICIA: 2024] - En 2018, The Hollywood Reporter anunció que Plan B Entertainment y New Regency se habían unido para producir esta adaptación que sería dirigida y escrita por Rick Famuyiwa ("Dope").
El proyecto que adapta el cómic del mismo título obra de Charles Burns fue anunciado en el año 2005 y, originalmente, se pensó en el director Alexandre Aja ("Alta Tensión"). Posteriormente, en el + 2008 se anunciaba que los guionistas Roger Avary y Neil Gaiman abandonaban el proyecto, sin llegar a confirmarse si su guión había sido rechazado. En el año 2009, hubo noticias de que el escritor D.W. Harper estaba colaborando con David Fincher para sacar adelante este filme de Paramount Pictures y MTV Films.
A mediados de los años 70, una epidemia que sólo afectaba a los adolescentes se cernió sobre los suburbios de Seattle. La llamaron la plaga de los quinceañeros y se manifestaba a través de síntomas de lo más impredecible. Para algunos no fue demasiado dramático: apenas unos bultos, tal vez un sarpullido. Otros, en cambio, se convirtieron en monstruos. Y no eran sólo síntomas pasajeros. Una vez contraías la infección, quedabas convertido en aquello para siempre.
Sinopsis:
[NOTICIA: 2024] - En 2018, The Hollywood Reporter anunció que Plan B Entertainment y New Regency se habían unido para producir esta adaptación que sería dirigida y escrita por Rick Famuyiwa ("Dope").
El proyecto que adapta el cómic del mismo título obra de Charles Burns fue anunciado en el año 2005 y, originalmente, se pensó en el director Alexandre Aja ("Alta Tensión"). Posteriormente, en el + 2008 se anunciaba que los guionistas Roger Avary y Neil Gaiman abandonaban el proyecto, sin llegar a confirmarse si su guión había sido rechazado. En el año 2009, hubo noticias de que el escritor D.W. Harper estaba colaborando con David Fincher para sacar adelante este filme de Paramount Pictures y MTV Films.
A mediados de los años 70, una epidemia que sólo afectaba a los adolescentes se cernió sobre los suburbios de Seattle. La llamaron la plaga de los quinceañeros y se manifestaba a través de síntomas de lo más impredecible. Para algunos no fue demasiado dramático: apenas unos bultos, tal vez un sarpullido. Otros, en cambio, se convirtieron en monstruos. Y no eran sólo síntomas pasajeros. Una vez contraías la infección, quedabas convertido en aquello para siempre.