Arnold declara en su autobiografía que cuando montaron la película doblaron la voz de otro actor sobre la suya porque su acento austriaco era tan fuerte que nadie le habría entendido.
También dice que lo mejor de ¨Hércules en Nueva York¨ fue que no se estrenó, ni siquiera en Estados Unidos, hasta que pasaron muchos años de su rodaje debido a que la compañía productora quebró y la película se quedó en una estantería antes de que pudieran estrenarla.
Arnold dice en su autobiografía que el motivo de que él esté acreditado en la película como ¨Arnold Strong¨ se debió a que uno de los productores le preguntó si se podía anunciar de esa forma porque nadie podría pronunciar Schwarzenegger, al serle un nombre absurdo, y que le parecería gracioso ver en el póster ¨Arnold Strong¨ y ¨Arnold Stang¨.
Arnold dice en su autobiografía que recuerda haber soltado una carcajada en medio de la filmación de una escena con Ernest Graves, que interpreta a Zeus, porque el veterano actor impostó una imponente voz de Dios para uno de sus parlamentos, y era una voz muy diferente a la del hombre que él había conocido en el remolque de maquillaje.
Arnold dice que le pareció muy gracioso que Graves se metiera en su papel, pero en ese momento aprendió una lección que le hizo ver el cine como un oficio serio: Nadie debe reírse en el plató y los actores deben ayudar a sus compañeros/as de reparto para creerse realmente lo que dicen y así pueda servir de apoyo.
Estas y otras lecciones, como permanecer caracterizado y poner todo el empeño en ayudar a sacar lo mejor del actor que está siendo filmado aunque no esté ante la cámara y tenga al camarógrafo detrás de la oreja, fueron muy importantes para él, a pesar de que inicialmente no tenía ni idea de los métodos de actuación.
Dicha importancia interpretativa tuvo sus frutos el penúltimo día de rodaje, ya que Arnold dice que pudo sentirlo y entendió finalmente en que consistía la actuación al filmar una escena en la que Hércules y Pretzie se despiden, ya que él vivió esa despedida en su propia carne.
Arnold dice que en ese momento se le acercó el director (Arthur Allan Seidelman) y le dijo:
- ¨Se me puso la carne de gallina cuando hiciste eso¨.
- Si, fue algo extraño -le dije-. Realmente sentí esa escena.
-¨Vas a ser bueno. Creo que harás carrera en el cine porque a medida que este proyecto avanzaba tú empezaste a captar cómo se debe hacer¨.
Schwarzenegger declara en su autobiografía que siempre había pensado que no aparecería en una película hasta tener unos treinta años, pero que no se imaginaba estar con veintidós, en América, protagonizando a Hércules y le parecía un sueño hecho realidad (ya que sus idolos culturistas de la infancia como Reg Park o Steve Reeves habían interpretado también a Hércules en el cine).
Pero Arnold admite en dicha autobiografía que, a pesar de estar feliz, aún no estaba listo como actor porque aún no había aprendido nada sobre actuación y, de haber tenido algo de experiencia, habría sido mucho mejor.
Para compensar dicho problema, los productores le consiguieron a Arnold un profesor de actuación y un profesor de conversación, pero dos semanas con ellos no le solucionaron sus carencias en inglés y experiencia. Arnold admite que no dio la talla y que no tenía ni idea de lo que este tipo de actuación debía implicar y tampoco podía entender todas las frases del guión.
Arnold dice en su autobiografía que la idea de situar a Hércules en la Nueva York del tiempo actual no era mala. Y la película, de hecho, era muy divertida.
También tuvo una experiencia intimidante en el rodaje al tener como compañero de reparto a Arnold Stang, el cómico que interpreta a Pretzie, debido a qué él era muy pequeño y Schwarzenegger era muy grande.
Arnold también dice en su autobiografía que Joe Weider llamó a los productores de la película y les dijo que en Viena que:
- ¨Yo había sido un actor shakespeariano y que debían olvidarse de Dennis y contratarme a mí (Arnold Schwarzenegger)¨.
Arnold declara en el libro que no hay actores shakespearianos porque eso existe, aunque Joe les dijo a los productores que él era su manager y nos les permitió hablar con él (Arnold).
También a Joe le preocupó que él no hablara bien el inglés, por lo que evitaba que conociera a los productores diciéndoles que aún no estaba en ese momento, lo que ponía a Arnold bastante nervioso. Finalmente consiguió visitarles y Joe le comentó que no hablara mucho con la seguridad de conseguir el papel, y Arnold lo consiguió tras la reunión.
Arnold Schwarzenegger dice en su autobiografía ¨Desafío Total: Mi Increíble Historia¨ que el papel de Hércules se lo habían ofrecido inicialmente a Dennis Tinerino, un culturista que había ganado el título de Mr Universo amateur en 1968.
Pero Joe Weider (fundador de muchas revistas de culturismo como Muscle & Fitness o Men’s Fitness) no quiso que hiciera la película porque Dennis trabajaba para las otras federaciones de culturismo.
Cuando Hercules y Pretzie viajan en el carruaje, se ve una sala de cine que muestra la película Easy Rider (1969).
Arnold Schwarzenegger ha dicho más de una vez que lamenta profundamente aparecer en esta película.
Para ayudar a Arnold a obtener el papel, su agente dijo que tenía años de experiencia en el ¨escenario¨, lo que implicaba teatro, pero Schwarzenegger solo había aparecido en los escenarios de culturismo.
Arnold Schwarzenegger decidió intervenir en esta película debido a los consejos de su buen amigo el también culturista Reg Park, quien había interpretado a Hércules en tres películas italianas.
La pelicula tubo tan malas criticas que Schwarzenegger se replanteo su carrera como actor.
Curiosidades: 14
Ryosaeba
Pese a que la película terminó siendo mediocre, Arnold dice en su autobiografía que haber interpretado a Hércules había sobrepasado con mucho cualquiera de sus sueños, además de que le pagaron mil dólares semanales.
Pero dice que lo mejor de todo fue que envió fotografías a sus padres tras dicha experiencia y les escribió con los sueños cumplidos que les había hecho: venir a América, ganar el Mr Universo y estar en el cine.
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