Vaya película, la trama es confusa, el desarrollo es atolondrado y eso a pesar de tener un guión que fue acusado de ser un plagio descarado del libro “Amos de Títeres” del gran escritor de ciencia ficción Robert Anson Heinlein, cuyos libros recomiendo totalmente, solo recordemos que es el autor de relatos de la talla de “Starship Troopers”, “Estrella Doble” o “Stranger in Strange Land” por solo citar algunas de las más conocidas e influyentes piezas de su extraordinaria obra.
Pero volviendo a la película, debo reconocer que no solo la trama es deficiente, también lo son el montaje, la dirección y los “defectos” especiales, por no hablar de las actuaciones, pero…sí, la película es entrañable señores, tiene su encanto dentro de sus limitaciones y yo disfrute viéndola, hasta me causaron gracia alguna escenas, es impagable ver a Leonard Nimoy en ese papel tan estrambótico, así como ver a esas “sanguijuelas” pegadas al cuello o a la espalda de sus víctimas, controlando sus cerebros y convirtiéndolos en sus sumisos títeres, me recordó a los gelatinosos seres que se pegan a la cabeza de los personajes y los vuelven más idiotas en la serie “Futurama”.
Terminas de ver este film y te preguntas cómo con una idea tan buena pudieron desaprovechar la ocasión de rodar una buena obra, además que como todo sucede en “Riverdale” uno no sabe en qué momento aparecen Archie y Torombolo, o por lo menos las inolvidables Betty y Verónica. La culpa sin duda es de Corman y de Vesota, pero al buen tío Roger le perdonamos todo.
En una pequeña ciudad llamada Riverdale tienen un misterioso problema, y encima a Archie Andrews le faltaban aún muchos años para ponerse a resolver expedientes X (de hecho aún estaba a 10 años de formar su célebre grupo musical. Ser un eterno adolescente da para mucho. Menos para follarse a las macizas Betty y Verónica, claro. Es un buen americano).
Así que se las tienen que apañar con Ed Nelson (que además es coproductor de la peli), algunos años antes de largarse a Peyton Place a triunfar. El reparto también cuenta con un jovencísimo Leonard Nimoy en un papel secundario. El resto son intérpretes virtualmente desconocidos aquí. El productor ejecutivo fue un Roger Corman no acreditado. Vaya año nos dio a sus fans, ese 1958. ¿Por qué nos hiciste esto, Tío Roger?
El argumento de la película es este: hay unos bichos que se apoderan de la mente humana, y consideran que conquistarán el mundo haciendo que la gente, poseída o no, aguante lámparas, suba y baje por andamios bastante precarios y se arrastre por tubos.
Artística y técnicamente, la película es abominable: una sucesión de contante elipsis (todo pasa demasiado rápido) y malas actuaciones en combinación con risibles FX, un pésimo montaje (cortes repentinos que hacen que detectemos cambios en la iluminación y los escenarios), fotografía horrenda (los cambios en la iluminación ya mentados, movimientos de cámara extraños y repentinos, planos torcidos por el gusto de sentirse como un Claude Renoir) y ciertos diseños de lo más pop (se nota que nos acercábamos a los swingin’ sixties).
Lo grande aquí es que siendo tan mala, estando tan mal hecha y pésimamente interpretada, tiene un valor enorme como comedia involuntaria. De veras, me ha parecido muy entretenida. Soy tan friki que me ha hecho gracia ver a la gente subirse por los andamiajes, meterse por los tubos como si estuvieran en el Chiqui Park y dispararse en los cojones (y eso solo son pequeñas muestras). Todo ello en la mítica ciudad de los cómics y los dibujos de Archie.
La suspendería pero me he divertido demasiado. La aprobaría, pero sé perfectamente que esta basura no da ni para un cero.
Así que como hago siempre en estos casos, me abstengo de puntuar y la recomiendo a los más frikis del lugar: véase a ser posible acompañados y con cervezas y aperitivos a punto. Procurad verla con algún Trekkie para que vea que Nimoy tuvo un pasado, también.
Lo peor de esta película es el título. Uno espera encontrarse una película de zombies devoradores de cerebros pero se topa con una cutre versión de los ladrones de cuerpos.
Una película con una historia de lo más interesante, pero que no engancha bien debido a su dirección, supongo. Hay muchas películas del estilo de esos tiempos que estan bastante mejor curradas, esta es muy cutre, con efectos especiales malos y escenas en las que es difícil ver algo con tanto humo. Me gustaría que hicieran un remake en condiciones de esta película, porque la idea es muy buena.
Críticas: 6
JavierYanguas
2
Lo mejor de la película es el póster y el argumento, respecto al póster, es algo extraño todo, porque aparece una señora que parece un vampiro, que jamás aparecerá en todo el metraje (Muy habitual esta práctica, por cierto).
Lo primero que me ha llamado la atención ha sido la duración de la película, sesenta minutos escasos, entre créditos y demás, 55 minutos, yo pensé:
¨Joder, por muy mala que sea, en una hora es imposible que me aburra¨
Pues nada, mentira, me aburrí, no mucho, porque he visto cientos de películas peores, pero me ha aburrido bastante.
¨Las Sanguijuelas humanas¨ tiene buena pinta, pero acabas llevándote una decepción de mucho, mucho cuidado, una verdadera pena, esperas ver una bizarrada de ciencia ficción al más puro estilo Ed Wood, (Que aunque parezca que no, las películas del tipo este tienen sus admiradores, mirad a Tim Burton, que hasta le homenajeó en un film, que por cierto, estoy deseando ver) y sin embargo, nos encontramos con una mala película, no una cutrez (Que también), pero me ha decepcionado ciertamente, me esperaba otra cosa de ¨Las Sanguijuelas humanas¨ pero es que la historia no tiene ni pies ni cabeza.
La película cuenta una historia mil veces vista, los típicos seres que habitan el cerebro, tipo ¨La invasión de los ultracuerpos¨, estas historias de marcianos estuvieron muy de moda en la época en la que ¨Las Sanguijuelas humanas¨ se estrenó, la pena, es que habiendo producciones de más calidad, la que nos ocupa ahora se queda muy por debajo.
Lo peor no son los efectos especiales, eso es comprensible pues los medios de los que disponían, eran más bien precarios, el problema son las actuaciones, que son de penoso para arriba.
Un marciano se mete en el cuerpo de tu padre, y la policía le abate a tiros, bien ¡El hijo ni se inmuta! ¡Que se joda! y se va a cazar marcianos ¡Hay que tener cuajo! Bien, pues las situaciones son de este tipo durante todo el rato.
Así que nada, si queréis verla, echadle un ojo, no os vais a morir, pero a mi, no me ha gustado demasiado.
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