La idea original de Hitchcock para los créditos iniciales era mostrarlos escritos en una pizarra con montones de fórmulas matemáticas.
El clímax se rodó en el set de ¨El fantasma de la ópera¨ de Lon Chaney, que fue remozado a fondo (creo que desde 1942 no lo habían arreglado) con nuevos colores basados en los de la auténtica Ópera de París y un patio de butacas nuevo para acomodar a 500 personas.
El brutal asesinato de Gromek fue cuidadosamente dirigido por Hitchcock bajo una idea: que matar a un hombre es muy difícil, al contrario de lo que mostraba la saga Bond y sus clones.
Originalmente Hitchcock quería añadir un detalle al final (personalmente, me encanta): Armstrong tiraba la fórmula a la basura, asqueado por lo que había tenido que vivir.
Todo el mundo - menos su esposa Alma - se negó en redondo a rodar esta secuencia.
Aunque no la quería en la película, Hitchcock, al contrario que con Paul Newman, se portó siempre con deferencia y educación con Julie Andrews.
Andrews, por su parte, mantiene que la película nunca la convenció, hizo el papel con el ¨piloto automático¨, obedeciendo a pies juntillas lo que le indicaba el viejo director y luciendo glamourosa, con la única motivación de decir que había trabajado con Hitch.
Hitchcock quería trabajar con intérpretes de su confianza: primero le preguntó a Cary Grant, pero se negó porque se consideraba viejo para el papel; Anthony Perkins fue rechazado por Universal.
Para la actriz principal, eligió a Eva Marie Saint, pero a sus 42 años la consideraban mayor para el papel. Después consideró a Tippi Hedren y se interesó por Samantha Eggar, pero fueron rachazadas por el estudio, que quería a Julie Andrews sí o sí.
Universal quería a Henry Mancini para que hiciera una banda sonora jazz, pero Hitchcock se mantuvo firme en que quería seguir contando con Bernard Hermann. Incluso le envió un cablegrama con indicaciones de cómo debía hacer la banda sonora, parece que cediendo a las presiones de Universal.
Cuando la interpretó ante Hitchcock con orquesta y todo, se vio que era una banda sonora al más puro estilo de la que había venido haciendo durante esos años. Hitch montó en cólera. Consideró que Hermann le había fallado y traicionado, se fue de la sala y le retiró la palabra. Jamás volvieron a trabajar juntos.
Resulta curioso leer esto si tenemos en cuenta que Hermann demostró ser un jazzman muy capaz en su trabajo póstumo: la banda sonora de Taxi Driver.
Las aportaciones de Keith Waterhouse y Willis Hall fueron lo suficientemente importantes como para que Hitchcock quisiera acreditarlos como guionistas junto a Robin Moore, pero el autor norteamericano se negó a compartir crédito.
A Hitchcock le gustaba tan poco esta película que rehusó aparecer en el tráiler como hacía habitualmente.
Hitchcock y Newman se llevaron mal, especialmente porque Newman, actor del Método, hacía demasiadas preguntas sobre su personaje, sus ideas y sus motivos (¨tus motivos son el dinero¨ le llegó a espetar Hitch). Fue un choque entre la vieja y la nueva escuela.
De las varias escenas cortadas, destacaba especialmente una donde el actor Wolfgang Kileling interpretaba al preocupado hermano gemelo de Gromek, asesinado en una escena anterior, que tenía un cordial encuentro con Armstrong donde le enseñaba una foto de sus tres sobrinos.
Esa escena debía profundizar en los remordimientos de Armstrong y mostrar que ¨el otro bando¨ tenía también seres queridos, pero Universal quiso hacer hincapié en el maniqueismo para que el público no simpatizara con el bando de los alemanes del Este.
Dicha escena contenía incluso un sustete 100% made in Hitch.
Por problemas de metraje, Hitchcock tuvo que cortar íntegramente una escena y aligerar otra que en principio era bastante más compleja.
Cortina rasgada está vagamente inspirada en la historia de la desaparición de dos diplomáticos británicos, Burgess y MacLean, que pasaron a la URSS.
Cortina Rasgada fue el largometraje número cincuenta en la filmografía de Alfred Hitchcock. No fueron unas gratas bodas de oro, ya que su acogida fue discreta!!
Aunque Hitchcock no estaba satisfecho con la elección de Julie Andrews (la consideraba sólo una cantante), la Universal se la impuso por motivos comerciales (por el gancho de Sonrisas y Lágrimas).
Curiosidades: 17
bigladiesman
Para documentarse y para grabar imágenes y sonidos para dar ambiente (recordemos que no le gustaba filmar en exteriores), Hitchcock viajó a todas las ciudades donde se desarrolla la acción: Copenhagen, Estocolmo, Berlín Este y Leipzig. Se rumorea que incluso las visitó en el orden que se ve en la peli, yendo dos veces a Berlín.
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