Ficha Lo Spettro

6.98 - Total: 17

  • No la has puntuado
  • No has insertado crítica
  • No has insertado curiosidades
  • No has insertado ningun error


Críticas de Lo Spettro (6)




DE NIRO

  • 19 Jul 2023

7


Terror gótico italiano del bueno, tiene el suspenso justo y escenas gore bien logradas, el desarrollo es un tantos lento pero el final sinceramente no lo imaginaba, un millonario postrado en silla de ruedas y su mujer muy bella por cierto, tiene un fogoso amorío con el médico que atiende a su esposo, una historia de traición y venganza, con giros en la trama y actuaciones sobresalientes, eso es lo que más destaco.



Me gusta (0) Reportar

TANO

  • 23 Oct 2022

8


Un thriller de terror gótico con elementos sobrenaturales que -hay que suponer- es secuela de ¨El horrible secreto del doctor Hichcock¨ (magnífica peli), en donde tenemos a un matrimonio y el amante de ella, que deciden cargarse al marido... y sufren las consecuencias.
La película tiene una gran ambientación clásica, en una de esas mansiones grandes y oscuras que tanto gustan, y matiene un halo de misterio durante toda la duración que consigue que la disfrutes, y mucho.



Me gusta (0) Reportar

mahotsukai

  • 1 Apr 2020

8



Interesante y entretenido film de Horror Gótico Italiano, a cargo de Riccardo Freda (“I Vampiri”, 1957)

Una bella y joven mujer y su amante se deshacen del marido de ella, el paralítico Dr. Hichcock, para quedarse con su herencia. Sin embargo, pronto una serie de apariciones y situaciones extrañas relacionadas al difunto, comenzarán a suceder poniendo en duda todo cuanto creen.

Tras alejarse un tanto del cine de terror y concentrarse en películas de péplum y aventuras como “I Giganti della Tessaglia” (1961), “Samson alla corte del Gran Khan” (1961) y “Maciste all’inferno” (1961), el padre del Gótico Italiano Riccardo Freda había vuelto a incursionar en el thriller con elementos sobrenaturales de terror con la destacable “L’orribile segreto del Dr. Hichcock” (1962), luego de 6 años del estreno de la seminal “I Vampiri” (1956), considerada la primera película de Horror Gótico Italiano de la historia. En ella abordaba una temática controversial para su época, la necrofilia, incorporando elementos de ciencia ficción y horror, que luego replicaría desde una perspectiva más bien fantasmal en “Lo Spettro” (1963), película considerada una de las más representativas del Horror Gótico Italiano y que daría cuenta de la gran habilidad y experticia que Freda para contar historias malditas de almas eternamente atormentadas.

Basándose libremente en el legendario film galo “Les Diaboliques” (1955) de Henri-Georges Clouzot, el guión desarrollado por el propio Freda y Oreste Biancoli, uno de los guionistas del inmortal clásico neorrealista “Ladri di Biciclette” (1948) de Vittorio de Sica, replantea la historia de la pareja de amantes que decide deshacerse del esposo millonario de ella para disfrutar de sus riquezas y su amor, abordándolo en una ambientación tan ambigua y retorcida como claustrofóbica que mantendrá al espectador pendiente de si el relato es una historia de fantasmas sobrenatural o un thriller psicológico. Un ejercicio cinematográfico que perfectamente podría haber dirigido el mítico director británico Alfred Hitchcock, de hecho, su imperenne clásico “Psycho” (1960) evidentemente aborda esta ambigüedad sobre un personaje dominante en apariencia muerto, que sin embargo sigue ejerciendo un influjo prácticamente diabólico.

Ambientada en un viejo y siniestro caserón escocés en 1910, pudiendo efectivamente remitirse a una época incluso anterior, en “Lo Spettro” (1963) Riccardo Fred demuestra un claro dominio de lo que es el estilo gótico narrativo y visual, con una escena inaugural especialmente claustrofóbica y muy pesada en términos sensitivos, en donde podemos ver una ceremonia espiritista encabezada por el paralítico Dr. Hichcock, personaje evidentemente noble, amargo y cruel, obsesionado con la muerte y profundamente celoso de la amistad de su joven y bella esposa y su galante médico de cabecera. Hichcock representa al científico loco (o mad doctor) que ya ha abandonado la fijación por la ciencia al no serle ésta de utilidad para su propio bien y sus intereses, para centrarse en una seudociencia, la parasicología y derechamente el espiritismo para encontrar respuestas a sus tormentos terrenales. Por su parte, su esposa infiel y su amante el elemento fascinante de lo indebido y prohibido, cuya pasión terminará por gatillar la tragedia y el crimen.

Una de las cuestiones que el guión mejor trabaja es un correctísimo sentido de construcción de ambigüedades narrativas. Tras una media hora esencialmente explicativa sobre las relaciones establecidas entre Hichcock, su esposa Margaret y su amante el Dr. Livingstone y pasar a la concretación del crimen, el guión va evolucionando progresivamente de un drama matrimonial a un relato fantasmal y, finalmente, a un thriller psicológico, que gracias al ritmo controlado que Freda le otorga y su claustrofóbica y recargada ambientación, se convierte en una experiencia realmente entretenida y retorcida. Y aunque algunos crítican que las vueltas de tuerca en el argumento y sus sucesivos intentos por racionalizar la historia en el clímax desvirtúa un tanto su espíritu de película gótica, “Lo Spettro” (1963) termina por alzarse como una película coherente y sólida, sin ser una obra maestra, lo que es un gran acierto tratandose de un film de terror.

Otro elemento que puede parecer secundario, y derechamente lo es, pero resulta pertinente y eficiente para sumar esfuerzos en su naturaleza de historia gótica, son los personajes secundarios como la ama de llaves y el reverendo. En el caso de la primera, una mujer de desagradable y ambigua apariencia, intenciones perversas y lealtades cuestionables, que jugará un papel fundamental en los intereses de Hichcock, no sólo mientras estaba vivo al servirle de médium para sus sesiones espiritistas, sino también en su posterior plan para vengarse de la pareja de infieles que acabaron con su vida. Por su parte, Freda realiza una crítica solapada a la Iglesia en la figura del reverendo, personaje acartonado e hipócrita que no escatima en esfuerzos para acceder a la fortuna de Hichcock, logrando incluso que el paralítico médico cambie su testamento a última hora para donarle 2/3 partes de su fortuna, en desmedro de su esposa Margaret. Si bien el film nunca abraza una veta narrativa religiosa, resulta interesante la insistente actitud del religioso de recriminarle al médico su obsesión mórbida por la muerte y el espiritismo.

Por otra parte, he de destacar la forma en que el futuro director de “L’iguana dalla lingua di fuoco” (1971) logra crear y proyectar efectivamente ese asfixiante y recargado ambiente que ya he mencionado. Si bien no contó con el maestro Mario Bava, quien ya se había independizado y convertido en cineasta tras el éxito de “La Maschera del Demonio” (1960), la fotografía de Raffaele Masciocchi (“L’orribile segreto del Dr. Hichcock”, 1962) regala varios momentos visuales dignos de destacarse, como el trabajo de claroscuro para las escenas en que aparece el fantasma de Hichcock, las ceremonias de espiritismo y las visitas clandestinas de los amantes a la cripta de los Hichcock, secuencias claramente inspiradas en el Expresionismo Alemán y que convierten al viejo caserón en un personaje ominoso y asfixiante más, una suerte de ataúd de cemento que ahoga y paulatinamente arrebata la cordura a cada uno de los personajes de la historia.

De la misma forma, la presencia de sangre de un fuerte color rojo, inteligentemente usada para generar una sensación horrorosa de estar a la merced de la muerte, en lugar de recurrir al asesinato como forma explícita de derramamiento de sangre, es un ejemplo decidor del suspenso de la vieja escuela de Freda. Hay un par de escenas muy fuertes desde un punto de vista simbólico, como aquella en la que Margaret está a punto de ceder a la tentación de degollar a su marido mientras le afeitaba, aquella en la que Livingstone niega el antídoto de Hichcock luego de inyectarlo y el mismísimo clímax, secuencias recargadas con un vistoso color azul invasivo, ruidos de vientos y chirridos de puertas que alimentan el miedo ancestral del hombre por el silencio interrumpido violentamente, y escenarios sobrecargados de cuadros, muebles y espejos que cubren completamente las paredes, en una evidente sensación de amenaza latente y constante.

“Lo Spettro” (1963) contó con un reducido pero efectivo reparto encabezado por el tridente Elio Jotta, la hermosa Barbara Steele y Peter Baldwin. Jotta (La Pietra di Luna”, 1972) interpreta a un Hichcock agrio, resentido y vengativo que no dudará en planear en perjudicar a su esposa y amante incluso tras su muerte. Una hipnotizante Steele, por su parte, encarna a la bella, pero ambiciosa e infiel esposa de Hichcock que parece bastante más decidida en terminar con el triángulo amoroso que su amante. La Steele, que a esa altura ya se había consolidado como la gran diva del gótico mundial (“La Maschera del Demonio”; 1960; “Pit and the Pendulum”, 1961; “L’orribile segreto del Dr. Hichcock”, 1962). El Dr. Livingstone, por otra parte, fue personificado por el estadounidense Peter Baldwin, que más adelante se convertiría en productor de TV ganando un Emmy por la serie “The Wonder Years” en 1988. Finalmente, destacar a Harriet White Medin (“The Terminator”, 1984), quien encarna a Catherine, la siniestra ama de llaves de la mansión Hichcock.

Francesco De Masi (“Un angelo per Satana”, 1966; “Lo squartatore di New York”, 1982) regala una efectiva e interesante partitura de corte sinfónico clásico, con abundantes movimientos de suspenso y misterio a base de flautas traversas y clarinetes, como “Melanconia autunnale”. Sin embargo, se acreditó el score con un alias, “Frank Wallace”, que según la revista italiana Bianco e Nero y el boletín Monthly Film era el seudónimo de Franco Mannino (Morte a Venezia”, 1971).

“Lo Spettro” (1963) fue estrenada en Italia el 30 de marzo de 1963, donde fue distribuida por Dino de Laurentiis y recaudó un total de ₤ 175 millones de liras en su estreno. Más tarde fue lanzada en el Reino Unido en febrero de 1964 y en los Estados Unidos en febrero de 1965, donde Freda firmó bajo el seudónimo de “Robert Hampton”.

En resumen, una entretenida y muy disfrutable función de horror gótico a la italiana del periodo más clásico, que tiene en su lograda ambientación, interesantes, aunque estereotipados personajes y un notable dominio de ritmo y manejo de giros narrativos de su director, su mejor plusvalía.



Me gusta (0) Reportar

Gilles De Rais

  • 24 Dec 2017

8


A mí este tipo de pelis de terror gótico me encantan. También he de decir que esperaba más de ella, aunque de todas formas me ha encantado (de ahí mi nota). La trama nos situa en Escocia, en el año 1910 (aunque puede parecer que estuviera ambientada algo más atrás en el tiempo) en una inhóspita mansión alejada del resto del mundo. La historia puede que en aquellos tiempos impresionara lo suyo, hoy en día quedaría totalmente obsoleta. Pero es que solo por deleitarse con esa atmósfera lúgubre y ambientación, ya por esto solo vale la pena verla. (Esa cripta con ese ataúd, y encima de el una calavera. La enorme y tétrica mansión...). Una joya para mis ojos. Y no quiero confundir a nadie; la historia es cojonuda para su época, nada más. Lo que a mí me pierde es la ambientación que tienen estas pelis. Y ésta desde luego no es la excepción. Por ponerle algún ¨pero¨, solo diría que es muy lenta en muchos momentos. Pero la verdad es que a mí eso, en este tipo de pelis, casi que me da igual. Excelente...



Me gusta (0) Reportar

bigladiesman

  • 27 Nov 2016

8


Otra película de Riccardo Freda con el nombre de Hichcock, pero que no tiene nada que ver con su necrofíla peli de 1962. No, esta es una de fantasmas vengadores, que es uno de mis subgéneros favoritos de terror: es una gozada ver sufrir lentamente a los malosos hasta que acaban hechos puré.

Barbara Steele es Margaret, la cantamañanas que ha provocado todo el lío haciendo matar a su marido, el Dr. Hichcock (Elio Jotta). Pena que el hombre era aficionado al espiritismo y ha encontrado una manera de vengarse desde la otra vida… Steele es una gran scream queen y representa muy bien el remordimiento de su malvado personaje. Su amante y cómplice, el traidor Dr. Livingstone, está interpretado por Peter Baldwin, secundario americano que tendría una excelente carrera como director en la tele (ganó un Emmy por un episodio de “Aquellos maravillosos años”).

El propio Freda y Oreste Biancoli, todo un clásico de la serie B de la época, firman el guion, en realidad una adaptación no autorizada de “Las diabólicas” de Boileau-Narcejac. Por lo tanto es una historia manida pero muy bien llevada por Freda, que le da ritmo, intriga, algo de violencia y algún giro inesperado, sin ningún gran bache argumental como el que estropeó “El horrible secreto del doctor Hichcock”, película que de hecho encuentro aún más entretenida que esta.

No es una película que destaque especialmente a nivel técnico. Es competente y la música del misterioso “Franck Wallace” acompaña bien.

Un notable entretenimiento de Freda que gustará a los fans del terror gótico y el misterio, quizá no sea tan entretenida ni truculenta como su falsa predecesora, pero está mucho mejor acabada.



Me gusta (0) Reportar

ragman

  • 25 May 2014

6


interesante pelicula con barbara stele a la cabeza, admito que no esperaba mucho de esta pelicula pero el desarrollo estuvo muy bien,, lamentablemente el final no me termino de cerrar pero dentro de todo no es una mala propuesta si te gustan los filmes sesentero de misterio.



Me gusta (0) Reportar

Críticas: 6


Escribir crítica

Tendencia de puntuaciones

0
0%
1
0%
2
0%
3
0%
4
0%
5
5%
6
17%
7
41%
8
35%
9
0%
10
0%