Entretenido corto de 7 minutos, rodado en b/n con muchos guiños a las historias de terror clásicas. Una muy buena ambientación de un caserón de nueva inglaterra aunque con toques españoles de los 50 :) es lo que hay.

La historia tiene mucho humor negro y un final muy adecuado. Divierte y no defrauda.

Cortometraje con una historia simple, pero con un ambiente lúgubre que te mantiene en tensión.

El desenlace es como digo muy simple, como todo el metraje, pero uno ya sabe de estas cosas cuando se pone a ver un cortometraje.

EN RESUMEN, MEDIA HORA INQUIETANTE Y POCO MAS QUE DECIR.

Muy divertida y con muy buenos puntos, no me gustó mucho la caracterización del viejo, franquista y cabrón, pero supongo que en España es el único cliché al que se puede recurrir.

La calidad de los muñecos, hecho en stop-motion, no es que sea excelente, pero lo compensa con los detalles de la casa y de la vida de ellos y la parte final sangrienta, por supuesto, que fué divina.

Una cutrez estilo stop-motion hecha de plastilina y con pocos medios, por no decir ninguno. No tiene historia, no tiene gags, no tiene más que 3 tontos minutos de un muñequito de plasti montado sobre la tapa de una olla que hace de platillo volante. UNA NADA.

No me gustó. No tiene nada que ver con la original. Además de que quitando un par de buenos instantes, el resto es demasiado infantil, muy bobo.

Conozco esta historia desde niño, tengo libros, animaciones y un bonito e infantil miedo de esa historia, que ha empañado un poco el ver este corto.