Este juego fue creado en colaboración con una asociación italiana y es parte de un proyecto para que las escuelas enseñen a los niños la importancia del respeto a los animales. En esta aventura el jugador controla a Orazio, un gato grande y amable que, con la ayuda de sus amigos, debe encontrar una manera de detener a una malvada corporación multinacional que quiere derribar el criadero para construir una autopista. En el transcurso de una noche Orazio deberá valerse de todo tipo de trucos para encontrar una solución al problema. La interfaz es del clásico ¨estilo Sierra¨, con el inventario emergente en el centro de la pantalla y la barra de iconos con la interacción básica: hablar, interactuar y mirar en la parte superior.