Tomik tiene 19, vive con una dulce viejita en un pequeño departamento, y todos los días a las 20:30 se dedica a espiar a su vecina de quien esta enamorado. Si bien comienza un poco lenta, y al principio cuesta agarrarle el ritmo, a poco andar comienza a mantener la tensión, siendo su mejor carta el hecho de que es impredecible hasta la última escena. Es un retrato de la soledad, una película que sorprende y entretiene. Más para gente que gusta del cien francés que del gringo.

Basada en el experimento Tercera Ola, La Ola nos lleva a explorar el impacto de la educación y de los estímulos a temprana edad. Al igual que otros experimentos como el de Milgram o de la Cárcel de Stanford, éstos nos muestran una dimensión del hombre que quizás todos conocemos pero no queremos reconocer. Todos somos parte de la Ola sin saberlo, no nos damos cuenta porque ésta no es tan explícita como en la película. La Ola nos invita a no ser Other brick in the wall como se desprenderá del musical The Wall de Pik Floyd, haciéndonos ver que la Ola está en todos lados y aún no te das cuenta. La película no habla de una conspiración social histórica, sino que simplemente nos muestra como las ideas y una persona a la que se le tiene algo de respeto basta para mirar las cosas a su manera. Un profesor basta para convencer a más de 40 adolescentes de cambiar radicalmente sus ideas sin que éstos puedan darse cuenta de ello. Recomendable 100%

Por lo que leí respecto a la película, pensé que se trataría de una buena película de acción, prometía. Tremenda decepción, unas cuantas balas, patadas y malos chistes. Me quedé dormido, no sé ni cómo termina y la verdad es que no me interesa. No salva ni como película cómica, lo peor que he visto.

Gran película!! Tres Reyes está ambientada a fines de la Guerra del Golfo, pero no es una película de acción; tiene grandes diálogos, grandes actores y por supuesto una gran dirección. Es muy entretenida, cómica y tiene el humor de doble sentido propio del director.

Buenos los efectos especiales, mostrar la rudeza de un huracán, pero no creo que esta película merezca haber estado en el cine, sino que en una película de día sábado en el cable. El drama no llega, porque uno está pendiente de tanta agua y de los efectos mencionados. Entonces siento que la película se ahoga completamente, junto a todos.

Muy buena película. Muestra todas las facetas de un grupo de rock. La música, para los que nos gusta el rock, es buenísima. La actuación de Jennifer Aniston cumple con el papel, el de polola incondicional que en un momento determinado se da cuenta que no puede seguir con un estilo de vida que le es impuesto. Muy recomendable. Para los que les gustó Almost Famous, ésta es lejos más entretenida.

Es una película que no recomiendo, lenta y predecible, me aburrí mucho cuando la vi ya que me habían comentado que era buena pero sólo esperaba que terminara.

Es buenísima, simplemente un clásico instantáneo que se encumbra entre las mejores películas de Scorsese. De partida, Los Infiltrados entrega entretención continua desde la primera escena hasta la última, la historia no contiene tiempos muertos y el desarrollo de la misma es logrado con magistral ritmo que hace imposible aburrirse. Derrocha espíritu urbano, callejero, con personajes violentos, pero por sobre todo humanos, cada uno con fuertes motivaciones y deseos; así, la compasión y repulsión que provocan en el espectador es intensa y a la vez agobiante. Lo que en manos de otro director y actores habría resultado burdo, en Los Infiltrados es creíble. La violencia, que recorre toda la película, parece siempre excesiva y no conducente, como producto de animales salvajes, salvo en la escena final, allí la violencia es el supremo acto de justicia, y es que no puede ser de otro modo, puesto que los personajes que habitan ese mundo nunca tienen asegurado su futuro, pueden desaparecer en cualquier instante y por lo mismo, sólo cuando no queda más camino que recorrer, la violencia se muestra útil, justa y necesaria. El castigo, en Los Infiltrados, tiene como justificación simplemente habitar en ese mundo y los esfuerzos por evitarlo son siempre infructíferos. La fotografía y música merecen comentario aparte: hay que verla y escucharla para apreciarlos. En definitiva, es imperdible, placentera y humana en cada escena.

Típica película americana donde el héroe (americano, por supuesto) casi que puede con toda la CNI, FBI y Fuerzas militares...todo junto. La idea era muy buena como para convertirse en una película de acción y espionaje pero termina siendo la misma situación donde el bueno le gana a los malos. Mucho bombazo, sangre, armas, etc...la mina que de verdad no era necesaria...en fin, mucho de lo mismo.

Sin duda We Own The Night es uno de los estrenos más importantes en la cinematografía del 2008. Con un elenco que lleva desde la hermosísima Eva Méndez, el ganador del Oscar Robert Duvall y las excelentes actuaciones de Phoenix y Mark Wahlberg. Incluso llegaría a decir que es una película tan buena como Los infiltrados donde sentimientos muy fuertes se encuentran plasmados en una cinta. 2 hermanos, 2 mundos diferentes sin duda la actuación de Phoenix es una de las mejores de su carrera, en cada película que he visto de él cada vez está mejor, Wahlberg sólido también como el hermano de la contraparte. Una música sensacional con unas excelentes escenas, We Own The night es de esas películas, que te para los pelos y emociona. una puesta de escena exelente. el resultante de la combinación de actores es simplemente GENIAL!, atrévete a descubrir el oscuro, violento, emocionante y triste mundo de los DUENOS DE LA NOCHE.

Una historia fascinante, mágica, llena de colores y olores que se traspasan a través de sus cautivantes personajes. Juliette Binoche realiza una gran actuación, al igual que Johnny Depp. Esta película además, trata temas muy profundos sobre la discriminación, sobre creencias y percepciones diferentes sobre la vida.

Original, visualmente cautivante, unas actuaciones bien logradas, una música que se queda grabada en la mente junto con la historia de aquel hombre que tratando de reencontrar a sus antepasados descubre la forma de construir un futuro lejos del tormento que lo ha mantenido encerrado. Sin duda un filme increíble.
Habla de soledad, búsqueda de identidad, las tribulaciones ineludibles de la vida, pero con un tono de misterio y magia entrañables. Pero por sobre todo, habla de descubrimientos y la posibilidad de superar los problemas y sobrevivir. El entorno nevado ayuda a la atmósfera narrativa. Ojo con la hija y su capacidad perceptiva también con la bella mirada de Julianne Moore. La vida es corta, no se la pierdan.

Esta película tiene la calidez de Lasse Hallström, tiene la calidez de Atando Cabos. Tiene el espíritu de los sin espíritu. De esas almas que vagan, rechazados, poco amados, y que llegan a estos pueblos donde nadie los conoce y donde por fin pueden brillar. Eso le pasa a Jean, que interpretada tibiamente por Jennifer López pudo ser mejor. Jean llega a este pueblo, perseguida por un ex novio violento. No llega sola sino que con su hija, que también es una perdida más, una niña sin padre y con madre a medias. Ambas se encuentran con un áspero suegro y abuelo, que está aún golpeado por la muerte de su hijo, pero que también sabrá abrir su corazón a estas dos mujeres nuevas en su vida. Hallström lo logra de nuevo y con muy poco: una abandonada granja en Wyoming, dos ancianos y dos mujeres. No necesitamos más. La dupla Robert Redford - Morgan Freeman es genial y sacan más de una carcajada en este dramón entrañable.

En un primer semestre 2010 anémico en cuanto a buenos estrenos, el drama romántico pasa serios aprietos. Y aquí el hábil artesano sueco L. Hallstrom acostumbrado a hacernos llorar sobriamente (Gilbert Grape, Atando cabos, Las reglas de la vida), tropieza con un film juvenil plano y estéril basado en un melodrama del exterminable N. Sparks, mercenario escritor de bestsellers como Noches de Tormenta o la amada Diarios de una pasión (símil a lo que John Grisham es al derecho)que incurre insistentemente en el giro trágico, los desencuentros familiares (más encima falta por estrenarse La última canción) y que en este caso da un golpe bajo, de forma similar como hace poco pasó con Recuerdame, diciéndonos que el atentado de las Torres gemelas interrumpió el amor de una generación joven norteamericana. La emotividad buscada nunca aparece, pese al uso cliché de una bella fotografía y secuencias esperables de la pareja en atardeceres y playas matizadas por canciones maniqueas. Y ni las actuaciones correctas de R. Jenkins o la preciosa A. Seyfried (aprovechando rápido cuanto papel le ofecen, luego la veremos en Chloe y Cartas a Julieta)rescatan al infumable C. Tatum y un tercio final francamente estúpido, ridículo, alargadamente aburrido.

La mejor película de Hallstrom desde My Life as a Dog, con una brillante actuación de Michael Caine. Si a uno le gusta John Irving, gozará con esta excelente y profunda historia que pone en debate el tema del aborto. También gozará con El mundo según Garp. (El escritor hace un cameo en Las reglas de la vida: es el jefe de la estación de trenes. Todo un espaldarazo para Hallstrom).

Película entretenida, un poco gringa (ganan los buenos, un negro logra surgir frente a los blancos, etc.). Bien hecha y basada en una historia real. Como siempre, sólido Robert de Niro. Recomendable.

En un NY amarillentamente sucio se desarrolla esta saga familiar sobre traición y corrupción que parece vista por primera vez, porque gracias a un ritmo intimista, James Gray -que si le debiese a alguien sería más a Coppola que a Scorsese- logra involucrarnos en la desolación de los personajes: un Mark Wahlberg que estábamos esperando hace rato, una Charlize Theron que demuestra que no necesita kilos extra ni dentadura postiza para hacernos temblar, y todo un elenco de esos que quitan el aliento.

A mí me llegó harto, ya que tiene una historia que te hace meterte dentro de la película y experimentar con sensaciones y sentimientos fuertes. Muy buena.
Nos muestra el verdadero sentido de la vida, que todo puede cambiar en un minuto, que la vida es tan simple y tan poco valorada.

Especie de remake del antiguo filme The Italian Job, en el cual tenemos a Marky Mark haciéndolas de ladrón manos de seda y una Charlize (para verla todo el rato) de experta en cajas fuertes. De consumo ultra rápido, entretiene y lo logra pero no es un salto cuántico en creatividad y expresión artística.
Al menos es honesta y va al grano, sin pretensiones de camuflarla como una peli de carácter. Bien por eso. Demás está decir que le hacen un homenaje a la original al presentar un Mini clásico manejado por Doña Charlize, y después varios modelos modernos de la marca, autito más taquilla que ese no hay, un sacapuntas con estilo. Y las persecuciones de un helicóptero y motos contra estos modelitos es digna de verse.

Excelente película, me llenó mucho ya que es impresionante ver el abuso contra las mujeres, era intolerable. Eso nos hace abrir los ojos y darnos cuenta que el machismo era demasiado fuerte en esa época.

Es una de esas películas donde quieres matar al director de casting, porque se fija sólo en que los actores sean consagrados, en vez de buscarlos por su talento o habilidades necesarias para el rol. Una pésima elección en este caso con Richard Gere, el hombre no es hábil para la danza y al hacer este papel con la Jennifer López queda más demostrada su inutilidad para el tema. La historia deja mucho que desear: una copia bastante parecida -sino calcada- de la versión japonesa que deja al descubierto que la imaginación se está acabando en Hollywood y están recurriendo cada vez m+ás al cine japonés.

Esta película, de entrada, no debiera llamarse La Conspiración en español, pues el título desvía demasiado el verdadero significado del título original: el valle de Eliah (lugar geográfico donde se desarrolla la historia de David y Goliat). Para empezar: la actuación de Tommy Lee Jones está impecable, una interpretación profunda para un personaje triste y complejo, que debe vivir la desesperación, el dolor y la decepción. Todo esto debido a la desaparición de su hijo y sobre todo a la estructura psicotizante del ejército cuando sus jóvenes son enviados a pelear una guerra sin sentido, la de Iraq.
Los personajes secundarios aportan y sustentan al protagónico, como el caso de Charlize Theron y Susan Sarandon. El guión está bien elaborado, y siendo una película anti-bélica y de protesta social jamás cae en el panfleto ni en señalar con el dedo a culpables políticos con nombre y apellido. Porque se entiende que es la guerra misma, y en especial todos los conflictos posteriores al holocausto de la segunda guerra, la que corrompe el alma y el comportamiento humanos, creando un absurdo violento y sin un ápice de humor.
La recomiendo para entender o tratar de entender algunas cosas actuales de las sociedades humanas, tristemente definidas por la escalada de la violencia y la falta de sentido. Atención con las metáforas y los símbolos, que atraviesan con sutileza toda la narración.

Es, si no la mejor película de Oliver Stone, una de sus más impresionantes obras maestras y una de las más grandes películas de su década en los USA. Basándose en el Informe Garrison (fiscal al que interpreta un genial Kevin Costner, acompañado de un elenco de verdadero ensueño), realiza el cineasta un monumental thriller judicial con escenas puramente documentales e imágenes de archivo en el que saca a la luz sin concesiones los sombríos resultados de los muchísimos años de trabajo de muchas de las personas implicadas en el caso y de él mismo para intentar realizar un fresco lo más completo posible sobre todo lo que rodeó al asesinato del presidente Kennedy, uno de los más misteriosos de todo el siglo pasado. La maraña de datos está distribuida de una forma limpia y precisa, ordenada con precisión milimétrica y cimentada para su exposición en un soberbio montaje y en un pulso narrativo inimitable que consiguen que tres horas de complejo metraje se pasen en un vuelo. La vida de Garrison, como las de su familia o sus colaboradores, se convierte en un infierno: hay fuerzas que luchan para que no consiga descubrir la verdad. Hay en los USA todo un mundo de oscuridad y miedo, todo un engranaje de corrupción que permite que casos como este se queden en las sombras para siempre.

Sí, es otra película sobre cómo una familia sobrelleva el duelo de perder a un miembro, pero no, no es un dramón autoayuda a lo Hallmark, ni mucho menos. Filmada con algo parecido a la timidez, Field deja que este par de actorazos llenen la pantalla con su angustiosa (y vana) búsqueda de una solución a la muerte de su hijo. Pero a diferencia de la mejor película de Moretti (La Habitación del Hijo), esta no es la historia de una travesía sanadora, sino mas bien un lento desfile hacia una venganza amarga.
Sin destellos visuales ni otras maromas de tipo efectista, este filme está hecho como si filmáramos la vida real de corrido. Episodios, claro está. Y es muy-muy natural y todo parece tan increíblemente real... la foto y las actuaciones son tremendamente naturalistas, realistas al extremo (y eso, créanme, es bueno). Actuaciones que de hecho llevan a lo desgarrador. Es un terrible drama de algo que podría pasarle a cualquier persona de una u otra forma, y la manera en que está resuelto no deja de ser menos real. Así, así es que este mundo funciona y realmente tiene muy buenos alcances dramáticos. Un buen drama, una buena película. Vale la pena verla.

obra maestra, me dejo sin palabras la actuacion de Cate Blanchett, es una de las mejores peliculas que he tenido la buena suerte de ver.