Sinopsis:
En octubre de 1889, la fórmula para un nuevo y extraordinariamente potente explosivo desapareció del Ministerio de Defensa. El hermano de Sherlock, Mycroft, un excéntrico pero influyente funcionario del gobierno, lanzó una investigación secreta oficial sobre el robo, pero su intento se vio frustrado. Justo antes de pedir ayuda a Sherlock para llevar a cabo una investigación independiente sobre el + robo, Mycroft resultó gravemente herido en una explosión que destruyó el Club Diógenes. Sherlock, creyendo que su hermano había sido víctima de una fuga de gas al azar, se retiró desconsolado al 221B de Baker St. Dr. Watson, con un poco de suerte y mucho esfuerzo, logró reanimar a su amigo planteándole una pregunta fundamental: "¿Qué pasaría si la explosión que lesionó a Mycroft no había sido un accidente?" La respuesta a esta pregunta lleva a Holmes a través de un largo y retorcido camino de descubrimiento. Sherlock, por primera vez en su carrera, reconoció que su motivación era algo más que un deseo de justicia. Con la ferocidad de una sola mente persiguió, engatusó, cuestionó, y se enfrentó a los sospechosos desde la petulante Mayfair a la lamentable y peligrosa East End. Poco a poco, a través de la observación y la deducción, desmanteló una empresa criminal enorme iniciada por un adversario magistral. Para penetrar en esta conspiración peligrosa y frustrar su intención resolvió varios crímenes capitales. Holmes aplicó su coraje habitual, la perspicacia y la inteligencia a estas tareas de enormes proporciones. Al hacerlo, se anuló un incidente internacional potencialmente volátil, defendió la seguridad nacional, protegió el honor de la familia real, exoneró al inocente y entregó castigo duro y rápido a los culpables. La resolución impactante y sorprendente del caso obligó a Watson a sellar su historia durante 100 años. Así es como El Caso de la Rosa Tatuada se convirtió en uno de los archivos perdidos de Sherlock Holmes.
"Los Archivos Secretos de Sherlock Holmes: El Caso de la Rosa Tatuada" es una aventura gráfica de 1996, desarrollada por Mythos Software como segunda y última entrega de su saga sobre Sherlock Holmes. A diferencia de El Caso del Escalpelo Mellado, en esta entrega se utilizó la filmación de actores reales para llevar a cabo la animación de los personajes.