SINOPSIS: César es el portero de un edificio de apartamentos y no cambiaría este trabajo por ningún otro, ya que le permite conocer a fondo los movimientos, los hábitos más íntimos, los puntos débiles y los secretos de todos los inquilinos. Si quisiera, podría incluso controlar sus vidas, influir en ellas como si fuera Dios, abrir sus heridas y hurgar en ellas. Y todo sin levantar ninguna sospecha. César guarda un secreto muy peculiar: le gusta hacer daño, mover las piezas necesarias para producir dolor a su alrededor. La nueva vecina del 5°B no deja de sonreír; entra y sale cada día radiante y feliz, llena de luz. Pronto se convertirá en el nuevo objetivo del juego de César. Se trata de un reto personal, de una obsesión.