Un segundo tratamiento de guion, a cargo del prolífico Richard Schreyer, iba a tratar de un científico que vuelve invisible a su ayudante mutilado. Éste comete un asesinato y el científico es juzgado por éste.
Otro fue escrito por Preston Sturges e iba a tratar, de nuevo, de un científico de origen ruso que vuelve invisible a su ayudante psicópata y ambos se van a la URSS a vengar el asesinato de la familia del científico por parte de las fuerzas revolucionarias.
Incluso James Whale llegó a escribir su propio tratamiento: otro científico se hace invisible para ocultar su cuerpo desfigurado pero se vuelve loco y mata y mata.
Con el tiempo, los varios guionistas que se sucedieron empezaron a coger la novela original de H.G. Wells como referencia y el dramaturgo inglés R.C. Sheriff redactó el guion definitivo.
Dwight Frye tiene una breve aparición en esta película. Es difícil reconocerlo sin hacer caras de poseído o llevando una joroba: es el periodista extremadamente preocupado con gafas que interroga al jefe de la investigación e intenta darle algún consejo [vendo que para mí no tengo, eh].
Los primeros tratamientos de guion de la película estaban más basados en una novela reciente llamada ¨The Murderer Invisible¨ que en la obra de H.G. Wells: El preliminar, para ser dirigido por Robert Florey, corrió a cargo de Garret Ford, guionista del Drácula de Browning y el Frankenstein de Whale: en él, un inventor neoyorquino logra una fórmula de invisibilidad y se convierte en un temible terrorista, destruyendo la estación Grand Central e intentando soltar a un ejército de ratas invisibles infectadas de peste bubónica. Es delatado por la chica de la película y gaseado justo a tiempo junto a loh mardito roedore por la policía.
Según John P. Fulton, las escenas en terciopelo negro fueron hechas indistintamente por Rains o un equipo de dobles.
Uno de estos dobles sufrió un desmayo debido al calor combinado del verano californiano, los focos y el terciopelo, sumado a un problema con la ventilación (un tubo que subía por un pantalón) del casco negro que debían llevar: casi se asfixió el pobre.
Por otro lado, dicho casco aislaba mucho a quiénquiera que lo llevaba puesto: veían poco - debió ser un problemón para Claude Rains, que era ciego de un ojo - y oían menos (el sistema de ventilación de marras era ruidoso): Fulton decía que sus instrucciones gritadas a pleno pulmón llegaban a Rains o al doble de turno como un murmuro casi ininteligible. Resultado: se necesitaban como 20 tomas para hacer un mínimo movimiento correcto.
Entre los extras con diálogo de esta película podemos ver a Walter Brennan como un señor al que Griffin le roba la bici y a un muy joven y caracterizado John Carradine como un señor larguirucho que lee el periódico y comenta las noticias con otro ciudadano.
El actor original para el papel de Kemp era el notable Chester Morris, que ya había hecho sus pinitos comp actor principal. El trabajar con un cabeza de cartel relativamente desconocido como Claude Rains y el hecho de que encontrara que Kemp era un personajillo vulgar y repelente hizo que se apeara del proyecto.
William Harrigan, que venía de trabajar con Rains en Brodway, fue incorporado a última hora.
Según el historiador Rudy Behlmer, el mánager de H.G. Wells ya iba ofreciendo los derechos cinematográficos de la novela a diversos estudios en los años 20. Parece que la Metro se interesó en 1931, pero abandonó la idea enseguida por considerarla demasiado compleja técnicamente. Universal aceptó hacer la adaptación a finales de ese mismo año.
El guion final contó con la aprobación personal de Wells.
Durante el discurso en que Jack Griffin anuncia a Flora su voluntad de conquistar el mundo, Claude Rains imitó las poses y gestos - actualmente francamente cómicos, pero en la época impresionaban - de Benito Mussolini en sus alocuciones.
James Whale tenía que hacer esfuerzos tremendos para aguantarse la risa cuando veía a Una OConnor en pleno paroxismo histérico. Le encantaban sus rutinas cómicas como señora clueca.
Gloria Stuart y Claude Rains no hicieron buenas migas durante el rodaje. La actriz se quejaba de que Rains chupaba mucha cámara y anulaba cualquier intento de Stuart de destacar mínimamente. Presuntamente James Whale coincidió con ella y regañó a Rains, recordándole que no estaba trabajando solo y que tenía que compartir las escenas con su compañera.
Claude Rains, que no tenía experiencia en el cine sonoro, fue elegido por James Whale tras verlo en un desastroso cásting - probablemente el primero que hacía Rains con sonido - que hizo para la peli de RKO ¨Doble sacrificio¨. Whale se partió de risa con dicha prueba de pantalla, pero valoró la voz, expresividad y experiencia en Broadway de su compatriota, pidiéndolo casi a última hora a una Universal casi desesperada por encontrar a su actor principal.
Claude Rains no era ni la segunda opción para el papel de Jack Griffin. Colin Clive, el Dr. Victor Frankenstein de la Universal en persona, fue seriamente considerado, pero éste prefirió volverse por un tiempo a Inglaterra a descansar un poco.
11 años después de escribirla, amplio una de las curiosidades que he puesto:
La hija de Claude Rains, Jessica (que sigue viva a sus 84 años a fecha de escribir esto) contaba que en 1950, en el pueblo de Pennsylvania donde vivían, reestrenaron ¨El hombre invisible¨ y él se la llevó a ver la peli. Era un día muy frío, y Rains iba tapado hasta las cejas (ya os imaginaréis de que va la cosa si habéis visto la película). Al llegar a la taquilla con aquel aspecto y decir con su vozarrón ¨Dos tiquets, por favor¨, el taquillero, un tipo perspicaz, se puso como loco: ¨Aaaaaah! El Sr. Rains! Es el Sr. Rains!¨. El tímido Rains tuvo que insistir para pagar porque el hombre quería dejarlo entrar gratis.
Durante el pase, el hombre no callaba contando a su nena las anécdotas del rodaje de la manera más teatral, y a ratos sin contenerse, lo que, en lugar de cabrearlos, despertó el interés de los otros espectadores, que acabaron por ignorar la película y escucharlo a él.
- Los planos de total invisibilidad se realizaron mediante cables.
- Las escenas en la que Griffin aparece parcialmente vestido y con el resto del cuerpo invisible se realizaron de la siguiente manera. Por un lado se filmaban los planos del resto de personajes que aparecían en la escena. Después se rodaban los del protagonistas en un plató con las paredes y suelos recubiertos de terciopelo negro para que no hubiese ningún reflejo de luz. Rains llevaba mallas, guantes y un cubre cabezas oscuros, sobre los que se ponía la ropa consiguiendo el efecto de unas prendas que se movían sin que pareciera existir de ella nadie. Una vez rodada la escena, los distintos personajes quedaban unidos en el plano mediante sobreimpresiones.
- Una vez impresionada la película Fulton retocaba a mano cada plano antes de ir a la sala de montaje. Fulton retocó 64.000 imágenes..
El rodaje de la película fue realizado entre junio y agosto de 1932,y tuvo lugar en los estudios de Universal Pictures en Los Ángeles.
El éxito de la película inauguró una franquicia de escasa calidad y breve alcance cuyo primer capitulo fue The Invisible Man Returns (Joe May, 1940)!!
La película está basada según la novela de H.G. Wells, a quien no le gusto la película ya que el director James Whale salpimentó la adaptación con abundantes dosis de humor negro!!
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bigladiesman
Para acabar con tema de los guiones, R.C. Sheriff dejó escrito en su autobiografía que había llegado a leer un guion para la película donde el hombre invisible era un marciano, avanzadilla de una invasión de alienígenas transparentes.
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