Otra memorable pelicula de la época de oro del cine mexicano la cual pese a sus años aun sigue conservando su notable ambientación sobrenatural algo muy común en las peliculas del maestro taboada ya que crear ambientaciones inquietantes era su sello particular , la historia es la clásica de fantasmas vengativos con una declaración final que no sorprende para nada debido a que se torna previsible el motivo por el cual la mujer fantasma empieza a atacar a cada una de las amigas de su heredera , la película tiene un lugar bien ganado dentro del cine de terror de habla hispana y es otra de las que sobresale de la filmografía de carlos enrique Taboada
Clásico de horror mexicano que tiene una trama muy interesante y quizás por ser de los setentas su ritmo y actuaciones no se destacan en gran forma, pero en cuanto a ambientación de esa tétrica casa y el clímax de terror están muy logrados, el gato Becker gran aporte para provocar miedo, cuatro chicas en una mansión heredada y la supuesta tía fallecida pululando por ahí, buena banda sonora y mejor final.
Destacable film de suspenso de Carlos Enrique Taboada (“Hasta el Viento Tiene Miedo”, 1968)
Ofelia hereda el viejo y enorme caserón de su tía Susana, recientemente fallecida, con la única condición de cuidar a Becker, su gato negro. Sin embargo, luego de que Ofelia se mude con tres de sus mejores amigas y el gato aparezca muerto, una serie de extraños y espantosos hechos comenzarán a suceder.
Tras el éxito del impactante thriller “Rapiña” (1973) protagonizado por Ignacio López Tarso y Germán Robles, el “Duque del Terror Mexicano” Carlos Enrique Taboada reincursionó en el género de terror gótico con “Más Negro que la Noche” (1975), una nueva propuesta sobrenatural que tiene como eje central, al igual que sus dos clásicos de terror anteriores, “Hasta el Viento Tiene Miedo” (1968) y “El Libro de Piedra” (1969) con la estudiante adolescente suicida y el hijo de un brujo medieval respectivamente, la despiadada e implacable venganza de un espíritu atormentado desde el más allá. Así, con la experiencia y certeza de dominar el suspenso y del terror gótico como ninguno en México y América Latina, en el mencionado film Taboada tendrá la libertad para explorar el género sobrenatural y recurrir e incluir otros elementos narrativos que resultan fundamentales para el éxito del relato, como por ejemplo la perspectiva del espíritu vengativo y la importancia de animales y seres inanimados en la maldición.
De esta forma, en primer lugar, el director de “La Recta Final” (1964) abordará esta vez la venganza a partir de un hecho escabroso que afecta al espíritu después de su muerte y no antes de ella. A diferencia del vehículo narrativo de “Hasta el Viento Tiene Miedo” (1968) con la estudiante atormentada por la directora del internado y de “El Libro de Piedra” (1969) con el niño utilizado por su padre brujo para conjurar su regreso, que suponen espíritus que no logran transcender por haber muerto llenos de odio o resentimiento, en “Más Negro que la Noche” (1975) Taboada aborda específicamente que tal trascendencia queda suspendida por una suerte de obsesiva y estricta vigilancia de la anciana, cuyo amor y dependencia emocional por su gato Becker no le permite descansar en paz. En consecuencia, la imprudencia y mala voluntad de las nuevas habitantes de la vieja casona respecto a la simple, aunque extraña condición, servirá de pretexto narrativo para desencadenar la desgracia y el horror.
En segundo lugar, encontramos la magistral utilización que Taboada hace de elementos narrativos aparentemente secundarios, pero que en realidad juegan un papel fundamental en la trama, como Becker, el gato negro de la tía Susana, y la vieja casona. Respecto a Becker, Taboada deja claro desde un principio que el felino no es un mero aditivo narrativo a la trama, sino un personaje protagónico perfectamente ambiguo, vivo o muerto y estando o no estando en escena, al igual que el personaje de la tía Susana. De hecho, Taboada juega con la supuesta naturaleza maligna del gato que se sustenta en su color negro y que responde evidentemente a su naturaleza salvaje (el ataque al canario), una evidente referencia perversa a la superstición folclórica desde tiempos medievales sobre los gatos negros, que el director contrapone en plena década de los 70s, sindicada por las protagonistas, paradójicamente, como una época moderna.
En tercer lugar, el futuro director de “La Guerra Santa” (1977) se da el tiempo para construir una sensación incómoda y sobrenatural sobre la relación que la anciana sostiene son su gato, incluso desde el prólogo en que se advierte el fuerte y especial vínculo que los une (la reacción de espanto de Becker cuando ella muere) y la siguiente intermitencia y comportamiento del felino tras su muerte y la llegada de Ofelia y sus amigas. Una relación que trasciende la mismísima muerte y que sólo parece comprender el felino y la veterana ama de llaves, Sofía, espléndidamente interpretada por la cubana Alicia Palacios (“El Batallón de las Sombras”, 1955). Como personaje bisagra que pone la necesaria cuota de cordura y sensatez entre las nuevas habitantes, Sofía asume la presencia y la consecuente e implacable maldición de su ex señora como un hecho inevitable, luego de haber intentado asimilarlo como una señal de superstición y/o sugestión.
En cuarto lugar, al igual como lo haría con el internado de “Hasta el Viento Tiene Miedo” (1968), Taboada dará gran importancia al inmueble en donde ocurren los extraños y escabrosos sucesos, convirtiendo la vieja casona de la tía Susana en un personaje más. Lúgubre, anticuado, sobrecargado y un tanto hostil, el antiguo caserón con sus pasillos, salas, ornamentos, mobiliario, ventanales, escaleras y sótanos replica el carácter y el espíritu de la anciana y se convierte, por tanto, en una representación y extensión suya como vengadora y verduga. La secuencia de Pilar en el sótano siendo acosada por la tía Susana recuerda por su gran clima claustrofóbico y paranoico la secuencia de Mariana Ruvalcaba siendo perseguida por Hugo en “El Libro de Piedra” (1969). Sin embargo, Taboada también utilizará otros escenarios cerrados para dar entender el carácter vengativo implacable e incansable que persigue a las chicas, como la biblioteca en la que el espíritu de la anciana cobrará su primera víctima.
Y, en quinto lugar, advertimos algunos elementos narrativos que dan cuenta que este cuento gótico es también un drama juvenil, como lo que fue, de hecho, “Hasta el Viento Tiene Miedo” (1968) que aborda además la problemática del suicidio juvenil. En “Más Negro que la Noche” (1975) Taboada da cuenta de una subtrama feminista en donde cuatro mujeres controlan y deciden qué hacer con sus vidas en desmedro de sus parejas, que en honor a la verdad son personajes bastante secundarios y de mero relleno, y que tienen sus propios intereses. Siendo, en la práctica, la trama también una lucha ideológica y generacional entre mujeres, la tía Susana y Sofía vs. Ofelia y sus amigas, no es de extrañar que sea así y que dicha lucha se refleje en la antipatía de la tía Susana hacia su sobrina Ofelia desde la infancia, en la percepción antagónica que tienen las jóvenes respecto a Sofia y el desprecio hacia el cumplimiento de las normas reflejado en el gato, cuando se trata de sólo son invitadas por la heredera a vivir en el caserón.
A la gran interpretación de Alicia Palacios como Sofía, debemos dar cuenta de un reparto juvenil femenino competente y sólido, entre las cuales encontramos a Claudia Islas (“El Secuestro”, 1974) como Ofelia, la sobrina que hereda el viejo caserón y que prepara su boda; Helena Rojo (“Aguirre, la ira de Dios”, 1972) como Pilar, la mayor del grupo, separada de su ex marido con el que mantiene un juego inflexivo; Susana Dosamantes (“Río Lobo”, 1970) como Aurora, la malhumorada bibliotecaria que odia a los gatos y que adora a su canario; y Lucía Mendez (“Los Hijos de Sánchez”, 1976) como la bella y risueña jovencita que sólo gusta de la música y la fiesta. La veterana actriz de origen ruso Tamara Garina (“El Águila Descalza”; 1969) encarnó a la tía Susana, mientras que Pedro Armendáriz Jr. y Julián Pastor (“La Virgen de la Lujuria”, 2001) a Roberto y Pedro respectivamente.
Para Becker, Taboada demandó al productor Alberto A. Ferrer conseguir un gato negro que no sólo fuera carismático, sino que tuviera cierta empatía con los actores. El felino escogido convenció al director porque saltaba a los brazos y se acurrucaba con facilidad cuando simpatizaba con alguien, por lo que ni fue difícil que la actriz Tamara Garina pudiera interactuar con él. Aun así, Taboada intentó hipnotizar al minino para grabar con más facilidad las escenas en las que intervenía, pero finalmente fracasó en sus intentos.
La banda sonora estuvo a cargo de Raúl Lavista (“El Ángel Exterminador”, 1962) quien trabajó preferente en dos tonos el score, un sinfonismo clásico para las secuencias de suspenso y terror, y el acostumbrado toque jazzístico que estaba tan de moda en los 70s para las escenas en que presenta a los personajes femeninos protagonistas y sus “particulares” caracteres.
“Más Negro que la Noche” (1975) se filmó entre el 26 de agosto y el 5 de octubre de 1974 en Coyoacán, El Pedregal de San Ángel y Tlalpan en Ciudad de México, así como en los Estudios Churubusco en la capital mexicana, siendo estrenada para la Navidad de 1975. Se convirtió en un éxito y un clásico de obligada visión para los amantes del terror y suspenso latinoamericanos.
En resumen, un logrado, claustrofóbico y siniestro cuento gótico de fantasmas vengativos de la vieja escuela que brilla con luces propias gracias a una sólida cuota de suspenso, misterio y terror.
https://cineramica.blogspot.com/
Gatos negros, casas viejas que guardan fantasmales secretos y el buen terror de serie B mexicano.
Carlos Enrique Taboada es un nombre imprescindible en la historia del cine de terror mexicano y sus películas “Hasta el viento tiene miedo”, “El libro de piedra”, “Más negro que la noche” y la ochentera “Veneno para las hadas”, son clásicos por derecho propio.
“Más negro que la noche” viene a ser la tercera película de la tetralogía del terror de Taboada; tiene una fuerte influencia del gótico y se enmarca dentro del género de “casas encantadas”, más elementos fantasmagóricos y sobre naturales con reminiscencias a la tradición y la superstición del terror mexicano.
Comienza de manera sólida, siguiendo luego una línea naif típicamente de serie B setentera, que sin mostrar mucho logra un buen resultado, de tono sobrio y efectivo. Tiene un inolvidable reparto femenino: Claudia Islas, Susana Dosamantes, Helena Rojo y Lucía Méndez, que más allá de sus falencias como actrices ponen un punto encantador…más el rol importante del gatito Bécquer.
Buena pelicula de Taboada, aunque a decir verdad dentro de lo que hizo en el terror, esta queda un escalon mas bajo con respecto a las otras.
Cuatro amigas van a vivir a una mansion que heredo una de ellas. Su unica condicion era cuidar del gato (Becker). En vez de eso lo matan porque se comio el pajarito de una, y empieza a acehar el fantasma de la vieja.
Muy buena en ambientacion, ritmo, e inclusive musica. Todo bastante correcto. Pero las actuaciones son deprobables. Ni una se salva. La mucama que se hace la Boris karloff, la que tenia el pajaro que no tiene expresion, la que quiere volver con el marido, malisima. Y la modelo que se parece a Olivia Cooke la de Bates Motel igual, cero expresion. Se murieron dos amigas y las otras andan como si nada por la casa.
Mas alla de eso, es muy entretenida. Y maneja ciertos momentos de suspenso muy copados. La direccion como siempre impecable Taboada.
¿Y esta es una de las mejores películas de terror mexicanas? Bueno, la primera hora tiene un pase, pero lo que sigue es un despropósito tan grande que hace que ¨Más negro que la noche¨ sea una pésima baratija.
Partir de la historia más tópica del mundo funciona si se lleva bien, y en lo que respecta a la ambientación no hay nada que reprochar, pues la anticuada escenografía de la casa vieja casa viene perfectamente a juego con la sucia fotografía setentera. Todo lo que tenga que ver con los elementos que forman la mansión son un acierto: muebles, arquitectura, una desfasada criada y un gato negro son más que suficiente para el juego psicológico que perturban la mente con temibles llantos y siluetas que incomodan y consigue que den ganas de ver qué pasará después.
Vamos, que como película en general no es que fuera una maravilla pero era efectiva a pesar de estar protagonizada por esas cuatro modelos pijas.
Pero lo que hace que avance la historia es un completo despropósito. Quizá aquí se puede culpar sus limitaciones y el paso de los años, o en particular la espantosa actuación de las chicas a las que les asusta más la presencia de un gato que el hecho de que estén muriendo una detrás de otra. ¡Incluso se llega a la conclusión de que están destinadas a sufrir ese terrible destino y aun así a la rubia protagonista no parece importante lo más mínimo!
Uno acaba hasta las narices de tanto Becquer y fantasmas vengadores, pero más aun del pase de modelos de las cuatro señoritas.
Y por si fuera poco, el ritmo es muuuuuy lento. Podría decir perfectamente que no ocurre nada durante toda la película salvo repetir una y otra vez la misma situación hasta que finaliza, con algún que otro sobresalto en la historia (Muertes) y poco más hasta que termina. No hay sorpresas, todo lo que ocurre se ve venir de lejos y todas las escenas de ¨acción¨ están muy separadas entre sí, que, además, no son nada del otro mundo y cuyo nexo son las largas escenas soportando a las petardas de las actrices.
Supondré que Taboada intentaba llevar a cabo una película de terror psicológico centrándose en el ambiente, pero el resultado como ya digo, es muy aburrido, con escena final apresurada que deja con una sensación de ¨¿Y ya estᨠque tras casi dos horas no sienta nada bien.
Pero lo más bochornoso es el único giro ¨¨sorpresivo¨¨ de guión. El gato no murió de hambre, sino apaleado por las muchachas. Ole, anda que no se nota la diferencia a primera vista y salen con este recurso final, aunque igualmente la muerte de hambre en cuatro días y en silencia era un argumento pésimo como para creérselo.
Y como he dicho antes, todo lo malo de esta película se debe a sus últimos 40 minutos que me han dado tanto de qué hablar, o mejor dicho, criticar, porque no voy a negar que por momentos me inquietó... Pero en conjunto es una cinta inaceptable.
Película original de este director que no deja de sorprendernos, aterradora desde que comienza, tiene buen terror psicologico, buenas actuaciones, aunque algunas escenas se hacen largas, pero las escenas de horror la salvan. La actuación de la sirvienta de la difunta, la casa (el ambiente) y el gato son los que te hacen temblar, es de las mejores películas de terror mexicanas y del cine mexicano (ya que hay gente que dice que las películas mexicanas de terror no son buenas, tan solo vean películas de este director). Nota: cuando vi esta película no pude dormir esa noche.
Pues las películas de Taboada siempre destacan y son mejores para su década y tiempo, como yo las he visto ... El guión que tienen es un poco literario, metafórico y dramático.
lo dije, lo digo y lo diré, NO necesitas galones y galones de sangre para dar miedo solo necesitas un buen ambiente y buenos sustos, a mi me provoca tanta sangre y tripas asco, por eso trato de alejarme del gore.
la historia es algo original y sencilla, el fantasma de una mujer vuelve a vengarse de las chicas que matan a su fiel compañero, el gato Becker.
en cuanto a que los actores parecen culebron de televisa, no lo creo, en los 70¨s las personas lo veían normal, el que ahora las técnicas de actuación hallan mejorado es distinto.
no la voy a comparar con ninguna película moderna, por que ahora hay efectos por computadora, actores que se acoplan para verse realistas en esta época, etc.
MUY recomendable
Otra gran película de Taboada en la que el director mexicano vuelve a demostrar su maestría en el género. Una vez más su estilo elegante y sutil y su dominio de los recursos más sencillos (ruidos, sombras, iluminación...) para lograr inquietar, bastan para convertir un argumento simple y elemental en una inquietante historia de venganza de ultratumba tenebrosa y eficaz. El inteligente uso que hace del elemento sobrenatural para potenciar el grado de terror es algo que sólo está al alcance de un verdadero maestro.
Buena pelicula,que nos presenta un cuento de terror que bien podria ser una leyenda urbana.Aun asi le veo unos cuantos defectos,en primer lugar,las interpretaciones dejan un poco que desear,sobre todo la de Ofelia,la chica que hereda la mansion.No quiero crear spoiler,pero en los momentos de maxima tension,como puede ser...... sale ella como si nada,con una tranquilidad pasmosa,no se,pero creo que en ese aspecto se podian haber esmerado un poco mas,por lo menos para darle mas credibilidad a la peli,pero bueno.En segundo lugar,la peli es muy lenta,demasiado,hay momentos en los que en lo que a mi concierne,estaba pensando en lo que iba a hacer mañana,se me iba por momentos el hilo,debido a su tedioso tempo.La historia,la verdad sea dicha,es muy buena.El guion hace por momentos aguas,pero la trama como he dicho promete,eso si,hay que tener paciencia viendola.He visto tantas pelis de terror,que en el momento en el que sale por primera vez el canario,ya sabia practicamente por completo de que iba la peli,punto,por punto.Detalles,que de tanto ver cine los tiene uno automatizados.En definitiva,una buena peli,demasiado larga para mi gusto,pero que merece la pena verla
El desarrollo de la historia es muy bueno, en una opinión muy personal me hubiera gustado que la fotografía fuese más oscura pues al estar tan bien iluminada la película le resta fuerza al ambiente claustrofóbico y tenebroso que pudo habérsele agregado.
a mi gusto la mejor pelicula de taboada, es increible como este filme te sumerge en su suspenso, la trama puede estar mil veces vista (una casa con un fantasma) pero aca lo que cuenta es como esta llevaba, ademas que la anciana si que mete miedo.
de lo mejor que vi en el cine mexicano de terror. recomendadisima
Muy buena película de terror mexicana, tiene muy pocos años que la vi por primera vez. Es una memorable historia. Cuenta con un buen guion, buenas actuaciones, geniales escenas de suspenso. El fantasma de la dueña que ronda la casa, si que me causo miedo. Muertes memorables y un inolvidable final.
Espectadores que la disfrutaran: Admiradores de las películas del terror clásico y de culto.
La vi pot TV cuando era niño en la sala de mi casa a solas y por poco me trauma, que magnifica pelicula del Sr. Taboada.
Una historia llena de misterio muy al estilo de las leyendas de horror, la escena en color Rojo me aterrorizo sobre todo porque no me la esperaba.
No me gustan los Gatos pero Beker se gano mi empatia, de los 4 clasicos de el Sr. Taboada es mi Favorita.
concuerdo , buena pelicula de horror mexicana , buen comienzo , buenas escenas de suspenso , el final digno , entretiene y la ves atentamente , oscura , me gusto.
conclusion : interezante pelicula.
Película de época con íconos tan estereotipados de los 70s, como es el caso de una mansión de inquietante decoración, un gato negro y una enigmática criada.
Como se acostumbra en el cine mexicano, las actuaciones son a nivel de culebrón de Televisa, absolutamente exageradas y sobreactuadas.
Esas compañeras allegadas, que tan altaneramente se creen más dueñas de casa que la dueña legal, hacen cada cosa, cada comentario, que simplemente no se explica porque no tienen roces entre ellas.
Pero a favor de esta obra es que tiene una perfecta atmósfera y muy buenas locaciones.
El final desinfla completamente lo logrado, y se asemeja a los finales de los cuentos cortos de terror.
Buena Pelicula de mis favoritas respecto al cine mexicano, esta pelicula tiene un ambiente agobiante y muy oscuro y como olvidar a mi querido Becker!!!
la pelicula esta muy chula, buen argumento, actuaciones correctas y sobre todo ese ambiente de suspense cosecha de los 70¨s.
una pelicula muy recomendable para pasar un rato estupendo.
Críticas: 29
Páginas de resultados:
TANO
9
Magnífica. Hasta ahora, la que más me ha gustado de Taboada, y eso ya es decir mucho, con los peliculones que hizo este señor.
La historia es simple, ya vista (y mil veces repetida luego), pero que resulta de lo más efectiva: una chica hereda la casa de su tia-abuela, y se va allí a vivir juntos a unas amigas. ¿La única condición? Cuidar del amado gato de su tía.
Esta es la definición de como hacer una película de puro terror psicológico que, sin necesidad de efectos especiales ni visuales, ni maquillaje, consigue dar verdadero miedo al espectador por la pura ambientación y la trama.
Yo la he disfrutado, y mucho, y me parece una lástima que sea tan desconocida siendo tan genial. La recomiendo encarecidamente.
Me gusta (0) Reportar