El puente que se disputan unionistas y confederados fue construido por soldados en Covarrubias. Su trabajo fue muy bueno, y Sergio Leone decidió otorgar el honor de volarlo al capitán de la guarnición. El puente debía ser volado cuando Leona dijera por walkie-talkie ¨Vai!¨.
Sin embargo, algún miembro del equipo exclamó ¨vai, vai!¨ en la misma longitud de onda. El capitán voló el puente con todas las cámaras apagadas. Leone montó en cólera y despidió en el acto al desdichado miembro del equipo, que se fue de allí en su coche. Sintiéndose culpable, el capitán se comprometió a reconstruir el puente a cuenta del Ejército a cambio de readmitir al pobre tipo. Leone aceptó el trato.
El esqueleto que Tuco encuentra en Sad Hill era de verdad: eran los huesos de cierta actriz española que dejó en su testamento que quería aparecer en películas incluso tras su muerte.
Por su buen trabajo doblando la voz de Eastwood, Enrico Maria Salerno fue seriamente considerado para el papel de Sentencia antes de decidirse por Van Cleef (Leone tenía muchas dudas porque creía que el público no aceptaría al Coronel Mortimer como villano. Si sirve de algo, a mi señor padre, que tenía 13 años, le cabreó bastante en su día, aunque la peli le encanta). Van Cleef después comentó que le dieron el papel porque se habían olvidado de matarlo en ¨La muerte tenía un precio¨.
Stephen King dice que ¨La torre oscura¨ bebe tanto de esta película como de las novelas de Tolkien.
Antes de tomar la decisión de ponerlo en el cinturón de Wallach, Leone creyó que quedaría majo si llevaba el revólver colgado del cuello con el cordel, de manera que con un movimiento del cuello, ésta volaría a su mano.
Wallach no se mostró convencido y pidió al director una demostración. Leone se colgó la pistola, movió el cuello con fuerza, ésta pasó su mano de largo y aterrizó en su lugar en la entrepierna del director.
La idea fue abandonada.
Que Tuco llevara la pistola atada con un cordel y puesta directamente en el cinturón fue una decisión de Sergio Leone cuando Eli Wallach le advirtió de que no sabía poner una pistola en la funda sin mirar si lo había hecho bien.
Unos 1500 soldados hicieron de extras en la película, ahorrando un pastón a los productores.
Eastwood lo pasó particularmente mal durante este rodaje debido a la relación horrendos puros del Rubio - Leone siendo perfeccionista: Clint, no fumador en la vida real, se hartó de mascar esos puros toma tras toma y más de una vez le fue a decir a Leone que acabara esa escena pronto, porque si no iba a vomitar allí mismo.
Clint Eastwood empezó a tener tics de divismo en preproducción, exigiendo 250.000 $, casi la sexta parte del presupuesto de 1,6 M. de dólares, y un Ferrari nuevecito para participar en la película.
A día de hoy (14 de noviembre de 2018), es la película con nota más alta en IMDb que no ha recibido nomicación alguna al Oscar (en este momento se encuentra en noveno lugar).
Lee Van Cleef sobre su negativa a abofetar a la actriz que hacía de puta a la que interroga brutalmente: ¨Tengo pocos principios en esta vida: uno de ellos es no patear a los perros, el otro es no pegar a las mujeres en las películas¨
Cuando Eli Wallach aterrizó en Madrid no pudo encontrar acomodo en ningún hotel: era temporada alta. Clint Eastwood se lo llevó con él a la casa de un amigo que tenía allí, y tuvieron que compartir cama.
Wallach se pasó el resto de su vida diciendo que podía presumir de ser el único hombre que se había acostado con Clint Eastwood.
Según Ennio Morricone, uno de los tres arreglos de la pequeña fanfarria que todos asociamos con la peli pretende representara un coyote aullando.
Orson Welles intentó convencer a Leone de que no hiciera la peli porque salvo ¨Lo que el viento se llevó¨, los films sobre la Guerra Civil americana habían sido hasta entonces veneno para la taquilla.
Eli Wallach sufrió varios accidentes durante el rodaje: casi fue decapitado por el tren en la escena en que se suelta de las manillas de Wallace, se bebió por error una botella de ácido en lugar de una de agua (por suerte lo escupió enseguida), un caballo se le desbocó y se lo llevó sin control durante un kilómetro y medio (con las manos atadas) y uno de los explosivos que debían cortar una cuerda falló y Wallach casi se asfixió.
El retorno de Lee Van Cleef no estaba previsto: Leone consideró como Sentencia a Charles Bronson y Lee Marvin - ambos estaban rodando ¨12 del patíbulo¨ en Inglaterra -, así como a Henry Fonda.
Por su lado, sí que estaba previsto que Gian Maria Volonté volviera a la trilogía como Tuco, pero Leone consideró que le faltaba vis cómica.
Leone y Wallach se comunicaban en francés, ya que ambos hablaban el idioma con fluidez.
A Clint Eastwood nunca le ha acabado de convencer la película, considerando que Rubio y Sentencia son personajes demasiado simples y que solo Tuco es un personaje redondo.
Eli Wallach llegó al rodaje cargado de ideas, y ni siquiera el perfeccionista Leone se negó a aplicarlas: a parte de improvisar varias frases, de él fue la idea de que Tuco tuviera una pistola personalizada (y de ponerle al tendero el cartel de cerrado en la boca), de que llevara cinturón y tirantes al mismo tiempo (basándose en el mismo Sergio Leone) o que Wallace le intentara reventar los ojos (Wallach había sido médico en la II G.M. y ese era un método que se usaba para despejar urgentemente a los soldados borrachos).
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bigladiesman
El perro que aparece de golpe y porrazo en Sad Hill dando un susto a Eli Wallach fue soltado por Leone sin decir nada al actor con la idea de crear un chiste.
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