Nerón arde Roma y hace culpables a los cristianos, por tanto, escribe una ley en la que los adeptos a esta religión han de ser arrestados y enviados al circo romamo. Hasta ahí perfecto, lo malo es que implementan una historia de amor entre un prefecto y una católica que no pega nada y el verdadero motivo de la película no se tiene demasiado en cuenta, solo hacia el final se ve que es lo que ocurría con estos fanáticos de Dios. Una vez más, podemos ver cuan morbosa es la humanidad, se aburren de luchas a muerte, por mucho decir que se espantan no dejan de cerrar sus ojos y cuanto más morbo mejor... no ha cambiado la humanidad desde entonces.

La historia está desarrollada bien, tiene alguna carencia y algún escollo por el camino, pero en lineas generales está bastante bien.

Buen guión, buen verbo y unas declamaciones perfectas haciendo homenaje al vocabulario elegante de antaño. La historia cuenta la vida de Juan de Austria que fue hijo bastardo de Carlos V y hermanastro de Felipe II.

Jeromín es un niño que vise soñando que combate en mil batallas y siempre sale vencedor un día se entera que sus padres no son sus padres y huye del hogar, en la travesía conoce a un noble caballero, que no puede ser padre, que lo adopta como ahijado hasta que se va descubriendo de que prosapia desciende Jeromín.

La historia está muy bien contada, no le falta emoción y energía. Jaime Blanch se entrega por completo y luce la misma imagen que en la actualidad, el resto de los personajes como el del perpetrado por Jesús Tordesillas está genial, quien se preocupa de enseñarle a ser un buen espadachín.

Por otro lado, el prólogo que incita a los niños a querer ser partícipes en las guerras y alabando todas las fechorías españolas me han parecido lamentables. No obstante, el resto de la cinta cumple muy bien. Juan de Austria formó parte en la Batalla de Lepanto, donde la liga cristiana debilitó por completo al imperio otómano.

Falso documental en el que un delincuente que arrea una tunda a una emigrante en un cajero es enviado al Sahara para conocer a las personas que viven ahí y empatice con ellos y deje de lado su racismo y materialismo, en el viaje, mientras conoce todos los valores que hay ahí tiene conexiones vía internet con su hermana y sus colegas del barrio que siguen sin abrir los ojos. El falso documental conmueve, nos hace ver que el mundo occidental da auténtica pena, que somos unos malditos consumistas sin valores, ahí con lo que tienen son felices y abren las puertas al extranjero con amabilidad, no como aquí.

Una birria, una especie de road movie que transcurre en una autopista donde un delincuente rapta a su rehén y mientrás la peli les persigue ellos van conociéndose hasta tal punto que se lo montán con el conche en marcha... El desarrollo no tiene nada de gracia, el impresentable Charlie Sheen dando muestras de su mala ejecución y la muchacha pues nada, parece que quieren incluir algo de comedia absurda en esta sencilla trama pero no termina de cuajar, es sosa y poco emocionante.

Esta no está tan mal. Cuando el César manda hacer algo con convicción es cuando mola más. Aquí una pareja enamorada gala es secuestrada para formar parte en el circo romano para dar un buen espectáculo al emperador. La pareja gala se cerciora de ello e intenta poner remedio, no obstante tampoco es que brille del todo, tiene varios tramos que no rezuman chispa y se enredan con tonterías. Le faltó apretar mejor las tuercas para ser mejor.

Parece que la saga ya no levanta el vuelo porque ahora esta aventura que sucede en América tampoco me ha gustado mucho. La historia comienza de un modo que parece ir con los ítalos pero cuando estos lo envían al fin del mundo, las américas, la historia da un vuelco absurdo en el que hay mucha música y tontería que no aporta gran cosa, además de un final nada memorable.


2000.

Podía haber dado más de sí, pues la idea de llevar la poción mágica que se extravía la legión en Betraña para combatirlos no estaba nada mal, ahora bien, se nota que los dibujos son galos y el humor y desarrollo que estilan no termina de cuajarme del todo, se estancan en tonterías y no terminan de darle el punch necesario. Algún puntillo y poco más. Lo mejor es como se extravía el barril en la niebla.

Basada en hechos reales. Bastante recordada, esta odisea del equipo de rugby de Chile que tuvo un accidente aéreo y permaneció perdido durante 70 años hasta que los supervivientes encontraron el valle que les conducía al contacto con la humanidad.

Lo que vivieron en la cubierta de la avioneta y sus aledaños fue duro. Tuvieron que recurrir a comer carne humana, vieron morir a los malheridos como caer moscas de tal modo que ya daban las muertes por hecho y no les sorprendía, lo que deja claro la película es como se aprecia lo aparentemente insignificante, ahí queda el caso del comic que encuentran uno y le dan más valor que a mil que tienen en su vida diaria. Las secuencias del canibalismo están muy bien y el desarrollo no se hace nada pesado.

Reverenda castañuela. Cinta de mamporros protagonizada por el luchador de la WWC, Hulk Hogan que comienza mal y termina peor. La cinta no contiene una historia sustanciosa y va desarrollándose sin garbo ni magnetismo. La cuestión es que los Hi man que aparecen por ahí se pelean por tonterías, estás no son nada espectaculares y las interpretaciones no son nada memorables. Da igual lo que exhibe por la pantalla porque no tiene un hilo argumental definido.

Iba esperanzado de ver una película interesante sobre los líos en la corte del rey Enrique VIII pues, es más que sabida cuan estresante y cruenta fue su vida de alcoba pero... lo que se presenta en esta cinta es bastante insípido puesto que, se cuentan las relaciones de manera atropellada y sin profundizar en nada, todo queda desdibujado ya que da la impresión de estar hecha a trote y moche, por otro lado, Charles Laughton personifica a un rey histriónico y caricaturesco lejos de parecer serio y real, solo verlo roer el pollo y acto seguido visualizar su sonrisa de Burusoiltxo me ha producido vergüenza ajena...Ahora bien, su imagen perfecta.

En definitiva, me la vendieron bien en DÍAS DE CINE y ha terminado pareciéndome un monumental cropolito.

Aburrida cinta sobre la madre de Jesús. Poco tengo que decir al respecto pues no me ha gustado en ninguno de los aspectos. El desarrollo no es nada bueno, ni es ligero ni profundo, los actores hacen lo que pueden pero no cunden y algunos hechos se lo pasan por ahí. No soy católico, pero como aparece Ángela Molina pues la vi, pero apenas sale con lo cual peor todavía. Una producción hispanoitalianaisraelí que carece de magia en todos los aspectos.

Normal que en su momento se haya llevado premios, si toca un tema de lo más delicado y posee un desarrollo de lo más interesante, los giros son estupendos y no se puede dar nada por sentado. La cuestión aquí es un matrimonio japonés que ¨raptan¨ a dos niños a los que quieren pero también les deja robar pues viven en la pobreza, un día sucede algo y el rumbo de la vida de la familia se ve abocada a un final poco feliz pero de modo inteligente pensando en el bien de los niños.

Pues es la segunda vez que la veo y es la vez que más me ha gustado, en una primera instancia no me llegó de convencer del todo, obviamente, porque no me enteré porque el trío protagonista se introducía en la cruz roja. La cuestión es que entran en dicha asociación para poder ver el football ¨in situ¨, para poder hacerlo han de pasar por el ejército que les someten a varias pruebas de las que no salen muy bien parados, mas también incluyen líos amorosos. La historia está bien desarrollada y posee buenos momentos de humor. El que más sobresale es Manolo Gómez Bur.

Film que retrata la crisis económica. Aquí aparecen unos jóvenes que viendo como sus negocios no prosperan van de terrado en terrado tratando el tema. Unos tienen carreras, otro vive encantado con su despacho de abpgados hasta que cierra su empresa, otro sin estudios tiene planeado abrir una empresa... la peli hace crítica a los estudios y a la imposición que ha ipuesto la sociedad de que sin estudios no eres nadie, cuando gente con dichas credenciales tampoco logran trabajo...es demencial. La peli hace muy buena crítica y aparece Alain Hernández que es el mejor actor catalán.

La primera versión fue de Alfred Hitchcock. Cuenta la historia de dos amantes homosexuales que creían en la filosofía de Nietzsche y en su concepto del superhombre. Uno de ellos hizo creer al otro este poder mientrás estaban obsesionados con hacer temeridades, un día mataron a un niño de 14 años. La segunda mitad trata sobre el juicio en la que su abogado de defensa aludía su homosexualidad como una patología y así bajarles la pena... La peli posee un argumento interesante pero, creo está llevada de un modo que no logra enganchar... es bastante fría y es imposible penetrar en la meten de los asesinos pues no hacen mucha incisión en ello.

Decían que el remake era mejor que la original, pues menos mal, porque a mi me ha parecido igual de mala que la primera. Ahora bien, sabiendo de que va el rollo y la poca gracia que poseen los actores que aquí se presencian pues ya se sabe desde un inicio que la cosa no va a desplegar las alas para volar alto, en ningún momento engancha y ver las caras de Diane Kruger(que poca chispa, por dios) y Josh Harnet(vaya cada de lelo...) no crean interés. Aburrida y excesivamente larga.

Una de destape rodada en Lesbos donde las mujeres se despelotan gratuitamente en todo momento de la película, las relaciones con los hombres son de lo más chabacanos, no sé como la gente viajaba a Perpigan para ver tamaño coprolito... Las escenas de sexo no dicen absolutamente nada, están hechas a trote y moche porque lo que interesa es enseñar carnaza femenina, el momento en el que un tío amasa los pechos como si fuesen panecillos o se pone a lamer la harina echada en el bosquecillo... mamma mía, o aquella en la que una mujer aparece forrada de sellos.... cosas que ya no se ven hoy, que dentro de su hortería tiene su gracia, ahora bien, la cinta como ya dije es un auténtico coprolito sin hilo argumental.

No está mal. SI en ENTRE DOS AGUAS, el niño sale de la cárcel en su primera parte cuenta las andanzas del niño amante de Camarón que quiere ganarse la vida sin hacer nada y la relación que tiene con su hermano y el inicio de sus tonteos con las niñas. Está contada de un modo natural y parece que todo nace improvisadamente, no encanta pero tampoco aburre. Y lo referente a la japonesa no me ha sugerido nada.

Ryo igual siempre, más salido que el pico de una plancha y su compañera Kaori propinándole unos martillazos impresionantes. En esta ocasión son contratados por un candidato a la presidencia para proteger a su hija que trabaja como un agente secreto, el damnificado tiene un pasado dramático y la cinta intercala presente con pasado. Aquí el giro no es tan bruto y no clama al cielo, aunque lo de el muñeco que no se ha movido de lugar durante 18 años es para flipar. No obstante el humor y el buen ritmo ahí están.

Los detectives privados Ryo y Kaori que viven en la clandestinidad, son contratados por una presentadora de televisión para que trabajen como su guardaspaldas ya que el presidente de dicha tv, ha sido asesinado, sin embargo, la cuestión da un giro cuando el mandamás juega con el control de la televisión y lo hace artifice de lo ocurrido siguiéndole con las cámaras. Luego hacia el final surge un giro en la que vierten todo sin haber dado pistas antes de una manera tan surrealista y exagerada que produce la ambivalencia de vergüenza y risa.

Ha sido mejor de lo que esperaba, no obstante, no me ha maravillado en demasía. La historia cuenta la reinserción de un gitano que tiene que hacer frente a los obstáculos que le brinda la vida para salir hacia adelante y poder hacerse cargo de su familia. Como no ve salida, en momentos de desesperación vuelve a pensar en el vandalismo y el tráfico de drogas. Los actores no parecen profesionales y lo hacen todo muy al natural. Se deja ver, pero peca bastante de ser redundante en frases y jergas varias.

Comedia romántica que hace hincapié en el mágico inicio de la relación y la repentina terminación de la misma. La pareja protagonista comparten perro y este se convierte en nexo de ambos, el dúo trabaja en el ámbito de la actuación y llevan su vivencia a una obra de teatro. Lo que no me ha gustado es meter la boda por convivencia que no viene a cuento y después no lo desarrollan. El resto está bien, lleva buen ritmo y se nota la química entre Michelle Jenner, que se come la pantalla, y Dani Rovira. Por cierto, critican como es debido el abandono a los animales.

Una road movie repleta de escenas de comedia. El dueño de un casino pone a prueba a varios jugadores haciéndoles creer que Silver City, dentro de una taquilla a un montón de dinero, en un inicio estos desconfían de lo dicho pero cuando uno de ellos emprende el viaje todos se vuelven locos para llegar los primeros, cada uno de ellos tiene sus vivencias, yo me he partido el ojete con la escena final de Whoopi en la que muerta de sed pasa de lo que le dice el posadero. El resto de historias tampoco está mal, pero el de la vaca por ejemplo no me ha hecho gran gracia, al igual que el tipo que se liga a la chica rubia. Se deja ver y tiene algunos puntazos.

Mario Camus llevó a la pantalla en el año 1999 la adaptación del libro homónimo de Eduardo Mendoza, cabe decir que la película es horrorosamente aburrida y que en su intento de hacerla intensa con un ritmo lento y espacios en los insípidos diálogos fracasa estrepitosamente. Comienza mal la cosa poniendo a Olivier ¨cara de terracota¨ Martínez como mayor protagonista, pues como bien indica mi apelativo, no deja de mostrar en todo el metraje su semblante de seta. Su personaje es un hombre pobre que quiere progresar en la vida y hace lo posible para salir de la pobreza, pero lo quiere lograr a toda costa y se mete en la boca de los mafiosos. La cuestión es que la película no engancha y los hilos que mueve el francés no despiertan sensaciones. Lo mejor es indudablemente Emma Suárez que con su presencia ya lo tiene ganado, y por otro lado, la intervención de Loquillo sin tupé con un pequeño papel, dijo que Camus fue el único que pudo hacerle cortar el tupe, es simpática.

Aburrida, sin momentos álgidos.

Drama histórico sucedido en el siglo XVI. Su director, Ermanno Olmi, está versado en recrear épocas pasadas y ese aspecto lo logra con creces, sin embargo el drama que acaece a la persona de Giovanni de Médici está tratada de un modo tan frío y superficial que no logra penetrar en la psique del presente. La película comienza con una frase que dice así: ¿Quien fue el primero que inventó las espantosas armas? Desde aquel momento hubo estragos y guerras y se abrió un camino más corto a la cruel muerte. ¡Aun así, el miserable no tiene la culpa! Somos nosotros los que usamos mal aquello que él nos dio para defendernos de las feroces fieras.

La epopeya de Giovanni, no fue otra que ser mercenario del ejército papal y luchar contra los lansquenetes alemanes que querían hacerse con territorios itálicos. La película es más bien contemplativa pues los movimientos son lentos, por otro lado, los diálogos no trascienden pues son escasos y poco interesantes. Ahora bien, lo que queda patente es la maestría con la que filma Olmi y la buena fotografía que posee, el resto... deja más bien indiferente, y la lástima es que teniendo Giovanni como amigo íntimo al escritor Pietro Aretino, conocido por sus poemas eróticos, no hayan optado por exprimir su personalidad. Podría haber dado más de sí, como el infortunio de Giovanni fue la primera víctima de una arma de fuego, en concreto de un falconete.