Es 1868 y la guerra acabó hace tres años. Una mina abandonada está siendo transformada en una fortaleza militar por un alcalde corrupto y una banda de sanguinarios. Cuando un US Marshal llega al pueblo y descubre que su hermano ha sido asesinado, buscará al asesino aunque esto le cueste la vida.
-Nuevo western que se estrenó en España hace tres meses por el mercado doméstico, una película que está protagonizada por Stephen Lang, Jamie-Lynn Sigler y Jackson Rathbone (“Crepúsculo”) como más conocidos. Un western simplón, que recoge todos los clichés del género, donde un sheriff imparte justicia a los que mataron a su hermano reverendo, a partir de ahí ya sabéis lo que irá pasando, se irá quitando uno por uno hasta llegar al jefe de la cabecilla, siendo pues una película que a medida que pasan los minutos se te va olvidando, debido a un guion y a unas actuaciones que prácticamente no te dicen nada, aunque Jackson quiere intentar ser un John Wayne o un Clint Eastwood no puede por ese guion tan simplón que tiene, notándose mucho que es una película de serie B, algo que no entiendo cómo Stephen Lang se mete aquí, su papel es bastante mínimo, con unas escenas de acción también discretas, simplonas, con una musiquita durante casi toda la película de fondo que no ayuda, además de una escena final con una cruz que es capaz de atravesar al enemigo todo el pecho estando a 3 metros arriba (menuda velocidad que corre en 1 segundo de caída); siendo pues una película western deficiente, siendo todo tan simplón y conteniendo todos los clichés del género que la verdad te termina por pesar en los minutos finales, es una clásica película de serie B western que no se la recomiendo ni a los fans del género porque aunque entretiene y se puede ver, los actores quieren hacer algo más pero el guion se lo impide, olvidándote de ella incluso una hora después de verla. Nota más justa: 3,5.
joseone
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Es 1868 y la guerra acabó hace tres años. Una mina abandonada está siendo transformada en una fortaleza militar por un alcalde corrupto y una banda de sanguinarios. Cuando un US Marshal llega al pueblo y descubre que su hermano ha sido asesinado, buscará al asesino aunque esto le cueste la vida.
-Nuevo western que se estrenó en España hace tres meses por el mercado doméstico, una película que está protagonizada por Stephen Lang, Jamie-Lynn Sigler y Jackson Rathbone (“Crepúsculo”) como más conocidos. Un western simplón, que recoge todos los clichés del género, donde un sheriff imparte justicia a los que mataron a su hermano reverendo, a partir de ahí ya sabéis lo que irá pasando, se irá quitando uno por uno hasta llegar al jefe de la cabecilla, siendo pues una película que a medida que pasan los minutos se te va olvidando, debido a un guion y a unas actuaciones que prácticamente no te dicen nada, aunque Jackson quiere intentar ser un John Wayne o un Clint Eastwood no puede por ese guion tan simplón que tiene, notándose mucho que es una película de serie B, algo que no entiendo cómo Stephen Lang se mete aquí, su papel es bastante mínimo, con unas escenas de acción también discretas, simplonas, con una musiquita durante casi toda la película de fondo que no ayuda, además de una escena final con una cruz que es capaz de atravesar al enemigo todo el pecho estando a 3 metros arriba (menuda velocidad que corre en 1 segundo de caída); siendo pues una película western deficiente, siendo todo tan simplón y conteniendo todos los clichés del género que la verdad te termina por pesar en los minutos finales, es una clásica película de serie B western que no se la recomiendo ni a los fans del género porque aunque entretiene y se puede ver, los actores quieren hacer algo más pero el guion se lo impide, olvidándote de ella incluso una hora después de verla. Nota más justa: 3,5.
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