Diablo es para mi uno de los mejores juegos de rol que se han hecho, aunque la secuela lo supere por completo.
En el juego se nos dará la opción de elegir entre tres personajes: Un guerrero, el mago y una arquera. Naturalmente cada uno tendrá sus pros y sus contras y el jugador deberá elegir uno según sus gustos.
Nada más empezar nos encontraremos en un pueblo y tendremos una gran variedad de personajes con los que hablar. El más especial de todos ellos es ese viejo borracho que se encuentra sentado cerca de una de las casas. Vale la pena hablar con el cada vez que consigamos reunir información escencial del juego o cuando empezamos una misión secundaria, ya que nos hará reir con sus locas ocurrencias.
Es verdad que toda nuestra aventura ocurrirá en los sótanos de la iglesia, pero eso no es malo, ya que cada sótano es diferente a los demás y conforme avanzamos cambiará de aspecto, como si estuviésemos en un lugar distinto, y para facilitar las cosas, cada X sotanos pasados, nos aparecerá un atajo entre el sótano que nos encontremos y el pueblo, evitando hacer un largo recorrido.
También es cierto que el personaje no puede correr, pero eso en verdad no importa, no hay mucha necesidad de que el personaje corra, además de que da gusto pasearse así por las mazmorras mientras se mata a los monstruos.
A lo largo del juego nos encontraremos con algún que otro jefazo, la mayoría de los cuales forman parte de nuestras misiones secundarias, y que junto a la atmósfera malsana del juego, forman parte del terror del juego. Solo hay que encontrarse con el Carnicero, el primer jefe de este tipo con el que te encuentras, para saber lo que es el verdadero terror.
El escenario final es un autentico desafío, y obligará a muchos a emplear su inteligencia para deshacerse de todos los monstruos y enfrentarse a el temido Diablo al cual, a base de emplear el teletrasportador para buscar pociones en el pueblo y luego volver para enfrentarse con él, acabaremos derrotándolo para encontrarnos con un digno final.
Es posible que haya exagerado a la hora de ponerle la nota, pero para alguien como yo al que le encanta este tipo de juego se considera injusto ponerle menos nota, y aun más sabiendo que la mayor parte de los juegos de rol han recibido influencia de este clásico.
Recomendado para todo amante del rol.
Este juego marcó un hito en los arcades roleros de principios de los 90. Sus gráficos eran espectaculares y sus videos también. La trama estaba bien ambientada y conseguía enganchar, sin embargo no culminó su trabajo hasta que llegó el Diablo 2 ...
Un juego que me tuvo mucho tiempo delante de la pantalla del ordenador. Realmente te metes en la historia, sin olvidar esos lugares oscuros por los que vas pasando.
Un juego que enganchaba bastante, pese a ser bastante lineal, y muyyyyyyyy lento por no darte la posibilidad de correr (supongo que decían que daba para muchas horas de juego, claro, porque era lento, coñe xD). Lleno de acción, montones de enemigos, magia, etc.
Aunque los graficos son bastante mediocres (el juego tambien es viejo), y solo puedes escojer tres personajes, con los que ni siquiera puedes correr que has de ir todo el rato andando, ademas de que, la partida toda es dentro de una iglesia y bajando niveles (la hostia de sotanos que se gasta la iglesia). Pero en fin, hay momento que incluso aterroriza por los personajes que aparecen tan fuertes que de un galletazo te arrancan casi toda la vida y tu (yo por lo menos), a gastar pociones. En fin, para mi un gran juego, pero el siguiente es 1000 veces mejor. - By Black Metal -
Críticas: 6
crowbrandon
10
Diablo 1 marcó a toda una generación y también innovó con su sistema de juego Online.
Los desarrolladores de este primer DIABLO se inspiraron en los míticos juegos de rol occidentales de ¨Calabozos y dragones¨ su estética gótica de espada y brujería lo diferenciaría de la gran cantidad de JRPGs que abundaron a mediados de los noventas. Hicieron buen uso de gráficos prerenderizados (a mi gusto han envejecido como el mejor vino) y contaron con una espectacular banda sonora a cargo de Maat Uelmen, que conseguía reforzar la ambientación solitaria, laberíntica y siniestra que aún hoy en día sumerge al jugador de lleno en aquellas oscuras mazmorras donde habita el mismísimo DIABLO.
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