- Curt Siodmak, como alemán refugiado que era, presentó a los nazis como bufones, y son ellos y sus acciones los principales elementos de comedia de la película. Se llegó a rodar una escena en que Frank Griffin le pegaba una patada en el culo al mismo Hitler, pero se cortó por la prohibición gubernamental a este tipo de imágenes.
- Ilona Massey era una gran especialista en comedias, y una mujer muy comprometida políticamente en la vida real. De
Cuando la protagonista intenta quitar la crema de la cara de un dormido Frank Griffin para que no le vean, podemos distinguir claramente la piel del actor en su rostro aunque la cabeza y los ojos sean invisibles.
ragman
luego de el hombre invisible siguieron exprimiendo la idea, muchas veces con secuelas descaradas y poco originales, esta es original por entremezclar una trama de espionaje con la invisibilidad. pero de todas formas no salio como lo esperaba. le falta ritmo, pues decae mucho.
se deja ver, pero no es una digna... (seguir leyendo)