Ficha El Fantasma del Convento

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Críticas de El Fantasma del Convento (13)




DE NIRO

  • 14 May 2023

5


Encantadora y macabra de principio a fin, misteriosa y con una trama interna facinante, deja una gran enseñanza , no dejarnos llevar por banalidades e irnos aparentemente por el camino fácil, pelicula de terror mexicana de los años treinta, sin dudas todo un clasico, los monjes con su voto de silencio meten miedo, el final es buenisimo, y no me esperaba algo asi, genial.



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mahotsukai

  • 20 Jul 2020

8



Reivindicable e interesante clásico menor de horror mexicano, dirigido por Fernando de Fuentes (“El Compadre Mendoza”, 1933).

Un trío de amigos deberá pasar la noche en un antiguo y siniestro convento de la Orden de los Frailes del Silencio, luego de perderse durante un paseo nocturno. Luego de ser recibidos por el prior, comenzarán a sucederse extraños hechos que pondrán a prueba su cordura.

Tras el éxito de la primera película de terror mexicana de la historia, el thriller sobrenatural “La Llorona” (1933) dirigida por el cubano Ramón Peón, el productor de origen peruano Jorge Pezet (“El Tigre de Yautepec”, 1933) decidió contactar al guionista de dicho film Fernando de Fuentes para su nuevo proyecto, luego de visitar el entonces Convento y Colegio del Carmen de México, hoy Museo del Carmen de México, y quedar especialmente fascinado e impresionado por las momias de los monjes de dicho ex convento. Pezet sumaría también al proyecto al guionista y director Juan Bustillo Oro, con quien coescribiría el guión y quien dirigía, casi a la par, otro film de similar inspiración ese mismo año, “Los Dos Monjes” (1934), conformando junto al film de Peón y al film que nos ocupa hoy, la trilogía clásica de horror mexicano de los 30s.

De esta forma, entre el espíritu evocador de la leyenda en “La Llorona” (1933) y el enfoque vanguardista psicológico y experimental en “Los Dos Monjes” (1934), “El Fantasma del Convento” (1934) destacará por sus rasgos más tradicionalistas a la hora de abordar el horror, siendo una película notablemente eficiente en términos de pragmatismo narrativo al recurrir al rico imaginario de fantasmas y apariciones de la época colonial, por un lado, y también del más clásico dramatismo imperante desde la época silente del cine como el conflicto amoroso y las relaciones de amistad, como lo reflejaba la obra de Joaquín Coss (“Alma de sacrificio”, 1917; “El automóvil gris”, 1919), Eduardo Urriola (“Del rancho a la capital”, 1926; “Una catástrofe en el mar”, 1927; y Guillermo “Indio” Calles (“De raza azteca”, 1921; “El indio yanqui”, 1926; “Raza de bronce”, 1927), por el otro.

Así, en el aspecto narrativo, “El Fantasma del Convento” (1934) bebe directamente de la variada tradición de leyendas coloniales protagonizadas por monjes, monjas, frailes y sacerdotes en la rica geografía de edificios religiosos como iglesias, conventos y monasterios repartidos por el país. Entre éstas destacan la leyenda de los monjes fantasmas del ex monasterio de Desiertos de Leones cerca de Toluca, que murieron en el derrumbamiento del edificio en el terremoto de 1703; la leyenda del fantasmal monje custodio de un tesoro en el ex Convento de Santo Domingo de Guzmán, actual restaurante Santo Domingo en Ciudad de México; y, por supuesto, la leyenda que termina por inspirar este relato, la del ex convento del Carmen, en el que tras los saqueos de la Revolución Mexicana (1910-1924) se encontraron restos momificados de monjes de la Orden de los Carmelitos Descalzos.

Además, si bien no está despojada del esperable y evidente componente moralista de su época, propio de una sociedad especialmente ligada a los valores más ortodoxos del Catolicismo, el guión tiene un interesante y fascinante tratamiento narrativo acerca del deseo sexual, la fidelidad y la amistad masculina, reflejado en la constante y creciente tensión sexual entre los personajes de Alfonso y Cristina y, por supuesto, el conflicto moral de Alfonso respecto a corresponder a las insistencias de Cristina u honrar su amistad con Eduardo. De esta forma, a través del simbolismo patente de la tétrica historia del monje maldito que fue condenado por su lujuria y traición de ideales, De Fuentes da cuenta de la intrínseca y tendenciosa naturaleza humana hacia “el pecado”, por un parte, y, por otra, la reprimida lucha de un hombre y una mujer por ir contra las directrices moralistas y religiosas de una sociedad demasiado persignada y castrante en términos ideológicos.

En términos visuales, “El Fantasma del Convento” (1934) se muestra notoriamente influenciada, aunque de una forma tardía evidentemente, al Expresionismo Alemán, lo cual responde principalmente a la falta de interés de los primeros realizadores mexicanos en el horror antes de “La Llorona” y, claramente, después de la impronta de la versión en español de “Dracula” (1931) de Tod Browning, dirigida por George Melford. El fotógrafo estadounidense Ross Fisher (“Lightning Romance”, 1924) realiza un trabajo interesante y eficiente para sacar el mejor partido posible, y vaya qué lo logra, a las locaciones del ex Convento de Tepotzotlán, del cual por cierto se concentrará en el comedor, algunas celdas y sus pasillos. Con una evidente austeridad de medios y derechamente un obligado espíritu minimalista que, sin embargo, le viene muy bien a las escenas de suspenso, misterio y horror.

De Fuentes se da maña de crear una destacable atmósfera de horror recurriendo a un correcto uso del claroscuro, encuadres de primer plano a los rostros y un eficiente maquillaje para los actores. A pesar de sus limitados recursos técnicos, el futuro director de “¡Vámonos con Pancho Villa!” (1935) logra varias secuencias bastante sugerentes y surrealistas desde un punto de vista plástico, porque la bizarra y terrorífica secuencia en la que Alfonso se ve encerrado en la habitación tapiada del monje maldito en donde busca el libro maldito para el pacto a expensas del cadáver podrido del fraile condenado, o las escenas en el fantasmagórico comedor y, más aún, la secuencia en la que llegan a las criptas del convento y encuentran las momias. Asimismo, el trabajo de montaje del propio director refleja la importancia que le otorga a la unión de los escuadres para simbolizar la locura que rodea a los personajes.

En el reparto, encontramos a un correcto trío protagónico en Enrique del Campo (“El Huesped del Sevillano”, 1940), su esposa Marta Roel (“El Crucero de Baleares”, 1941) y Carlos Villatoro (“El Tren Fantasma”, 1927). Del Campo tiene una interesante exploración de la psique torturada de Alfonso, mientras que su pareja femenina se muestra especialmente atractiva y desafiante, algo inusual para la mujer mexicana de la época, y, finalmente, un Villatoro realmente desagradable en su papel de Eduardo, el esposo de ésta, cuya arrogancia no le permite aceptar que su mujer y su mejor amigo se atraen mutuamente. Completa el reparto Paco Martínez (“Cruz Diablo”, 1934) como el Prior del Convento y Victorio Blanco (“El Rayo del Sinaloa”, 1935) como el monje maldito.

La banda sonora estuvo a cargo de Max Urban (“Los Dos Monjes”, 1934) que tiene evidentes rasgos de la impronta sinfónica de las películas góticas que desarrollaba la Universal, pero en sus aspectos más de suspenso y misterio más que de su dramatismo romántico.

“El Fantasma del Convento” (1934) fue estrenada el 27 de junio de ese año en la Ciudad de México y el 21 de abril del año siguiente en Estados Unidos. Se le considera el primer gran clásico del horror mexicano, a pesar de “La Llorona” (1933) de Ramón Peón. En 2019, se reestrenó una versión restaurada en el Festival Internacional de Cine de Morelia a cargo del Archivo Permanencia Voluntaria de Tepoztlán y la Filmoteca de la UNAM.

En resumen, un entretenida, efectiva y reivindicable ejemplo de temprano horror mexicano que brilla con luces propias gracias a su particular enfoque narrativo que mezcla fantasía y cuestiones muy mundanas, dentro de un contexto muy sugerente de fantasmas y aparecidos.

https://cineramica.blogspot.com/



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sting

  • 28 Jun 2014

8


Pedazo de película del cine mexicano, una verdadera lección de la vieja escuela del terror, con un argumento sencillo que mantiene al espectador muy atento a lo que pueda ocurrir el convento en donde se encuentran los monjes pertenecientes a la orden del silencio, vaya que estos monjes intimidan , los personajes muy bien llevados, los planos y tomas muy influenciadas por el expresionismo alemán.

Como resultado, una joyita antiquísima que no se puede dejar de visionar.



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Miguel Arkangel

  • 20 Aug 2012

8


“El Fantasma del Convento” es un interesantísimo aporte al cine fantástico y una verdadera joya de los inicios de la edad de oro del cine mexicano, influenciada por el expresionismo alemán y que no tiene nada que envidiar al mejor cine gótico que se hacía en EEUU en esos mismos años.

Rodada sorprendentemente en 1934, tiene una estupenda locación, una muy bien lograda ambientación en ese convento antiguo, lúgubre y tenebroso, una buena utilización de las luces y las sombras, monjes fantasmales de la denominada Orden del Silencio, un triangulo amoroso ¿real o imaginario? donde la traición y los demonios interiores esperan cualquier oportunidad para salir a la luz, la trama se desarrolla de manera lenta pero en ningún momento se vuelve aburrida.

Dirige Fernando de Fuentes quien junto con Juan Bustillo y su “Dos Monjes”, también de 1934, y la primeriza “La Llorona” de 1931, son el estupendo génesis del cine de terror-fantástico en México.

Estamos ante un film que es una verdadera obra clásica, simplemente imprescindible.



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Gilles De Rais

  • 24 Apr 2012

10


La acabo de ver y he de reconocer que me ha dejado estupefacto esta peli.Siendo Mexicana y del año 34 del siglo pasado,y con lo buena que es,solo me queda la opcion de calificarla de obra maestra.Es una verdadera maravilla para su epoca.Como bien dice el critico anterior,hoy en dia se veria con otros ojos.Un matrimonio joven,Cristina y Eduardo,y el mejor amigo de este,Alfonso,se pierden en una noche de invierno por unos parajes desolados y frios,y encuentran a un misterioso guia acompañado de su perra,Sombra,que los conduce a pasar la noche a un monasterio,llamado el monasterio del silencio.Una vez alli empieza lo verdaderamente interesante.Lo que he dicho,una peli muy añeja,que contando esto y de la nacionalidad de la que viene,solo se puede decir maravillas de ella.Yo desde luego se la recomiendo a todo el mundo que le gusten las pelis muy antiguas,seguro no quedara defraudado



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ragman

  • 24 Jan 2012

8


peliculon de los años 30, pelicula con una excelente trama que te entretiene en todo momento, es bien llevadera, antes con pocos recursos se hacia muy buenas cosas, estoy seguro que para su epoca este filme debio aterrorizar a mas de uno, hoy por hoy hay que verla con otros ojos.
la pelicula fuciona muy bien la trama de fantasmas con un triangulo amoroso, con un final totalmente aceptable.
es una joyita altamente recomendable a quienes busquen filmes de antaño.



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ilustrador.tk

  • 2 Sep 2011

7


Terror mexicano absolutamente de la vieja escuela, que en su epoca debió haber sido bastante vanguardista.

Hay grandes influencias del cine alemán, en sus encuadres, el tipo de actuación, los primeros planos a los ojos y captando los cambios de expresión en primer plano.
Los actores están maquillados como Rodolfo valentino, para resaltar sus movimientos faciales que la poca resolución de la cámara y el blanco y negro les quitaban.

Con humildes efectos especiales, de sombras, y superposiciones, se logra un efectismo bastante logrado, cosa que es ayudada por las excelentes locaciones de monasterios, fríos y sombríos.

Tiene los típicos ribetes de cuento de terror clásico, de monjes fantasmas, ataudes, esqueletos y maldiciones.

Obra clásica recomendable para quienes gusten del terror vintage.



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bigladiesman

  • 31 Mar 2011

7


Interesante y muy conseguida a todos los niveles. Se notan las influencias americana y alemana, resultando un producto destinto, auténtico y muy recomendable.

No son necesarios los FX cuando la ambientación (fotografía y música muy buenas) está tan lograda, aunque los pocos que hay son bastante buenos (esas manos putrefactas, esas no-sombras, y me dejo lo mejor) pero esa maqueta de cartón del convento canta bastante en comparación con el resto del filme. Se les acabaría el presupuesto?

Las interpretaciones son buenas. No conozco a este grupo de actores, pero durante toda la película saben lo que hacen, y en especial los dos protagonistas masculinos hacen unas interpretaciones de lo más inquietante, un poco a lo Conrad Veidt, y la protagonista femenina borda su papel de femme-fatale.



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TANO

  • 18 Apr 2010

8


Estos clásicos mexicanos son toda una joya, del estilo de los grandes clásicos de losp años 30, muy oscuros, con buenas historias y bastante acojone, aunque con los medios propios de la época. Muy recomendable.



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aguerrero71

  • 9 Nov 2009

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Es una película mexicana muy interesante, es una joya de nuestro cine, lástima que aún no se consiga a la venta en México.



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gabrielefx

  • 26 Oct 2009

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una joya del cine mexicano, sos un groso, bye saludos



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dex blake

  • 18 Sep 2009

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creo yo que es una de las mejores peliculas mexicanas de terror, por cierto fue realizada en el ¨actualmente¨ museo de TEPOTZOTLAN en verdad que el guion es sorprendente, autenticamente una joya del cine de terror y suspenso.



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SalemSlot

  • 21 Jul 2009

6


Film de terror clásico, con una interesante historia sobrenatural a la antigua usanza, siniestra ambientación, correctas interpretaciones, una oportuna banda sonora y moraleja incluida. Es de los años 30 y mexicana. Atentos con el cine de terror mexicano (sobre todo con el antiguo) porque hay verdaderas reliquias.



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Críticas: 13


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