Me gustó un poquito más que la anterior, aunque de trama similar, están los siquicos que van a estudiar unos fenómenos paranormales en un hotel abandonado, esa locación me resultó interesante pero siempre lo mejor es como el director logra mantener el interés en la trama con lo que los muñecos harán o sus matanzas, buenos efectos y de los noventas, secuela digna.
Esta secuela se reivindico un poco con respecto a lo que vi de la aburrida primera parte, tiene mas muertes que la anterior, profundizan un poco en el origen de Toulon, por momentos se hace algo lenta, aun así para ver una vez y pasar el rato esta bien.
Puppet Master II una secuela magnifica con tintes de reboot, aunque tiene sus puntos flojos, cosa que no se le puede negar, pues la ambientación es practicamente la misma que la primera, la historia no es que sea demasiado original y por lo general aporta más bien poco a esta saga...
Pero por los puntos fuertes tenemos un film que se hace disfrutar, contiene más acción, mas muertes, también es un punto a favor que no todo sea victoria para los muñequitos, pues algunos acaban siendo sacrificados, la vieja gorda también es un puntazo, siempre es bueno ver a las ¨victimas¨ dando batalla, la verdad que se hace más ameno, y como punto principal de este film diríamos que es el nuevo fichaje, esa especie de robot nazi con flama infinita xD, supongo que eso funcionará con gas o....bueno otros sacan sandijuelas de la boca que parecen vivir cientos de años...así que a los guinistas tampoco es que les paguen para pensar xD.
Luego repetimos el final de la primera, los muñecotes se rebelan y acaban matando de forma ultra violenta a su segundo amo para que no le pidan la hoja de reclamaciones xD.
Coño, estos muñecos son unos verdaderos hijos de puta, que matan a diestro y siniestro sin un punto de resentimiento pero luego no sé como se la apañan que acaban pareciendo que son los verdaderos heroes de la película xd.
En todo caso es una secuela muy entretenida que en ciertos aspectos supera a su antecesora.
8/10
Correcta secuela del clásico de serie B “Puppet Master” (1989) de Charles Band y David Schmoeller, a cargo de David Allen.
Los muñecos del fallecido André Toulón resucitan a su creador, ante la inminente falta del verdoso líquido que les da vida, permitiendo a la vez que el maestro de las marionetas regrese de la muerte para vengarse de sus enemigos.
Tras el inesperado éxito del film de culto “Puppet Master” (1989), el legendario productor y director Charles Band decide rápidamente aprovechar dicho éxito para llevar a cabo una secuela directa, que a la postre, junto a otros films destacados como “The Pit and the Pendulum” (1991) de Stuart Gordon, “Dollman” (1991) de Albert Pyun y “Subspecies” (1991) de Ted Nicolaou, funcionaría como perno de anclaje para terminar de establecer Full Moon Productions, la nueva productora del padre del cine estadounidense casposo de los 80s, heredera de Empire Pictures, que tantas horas de entretención y surrealismo nos regaló en nuestra infancia.
Sin embargo, Band, que poco a poco redireccionaría el formato de los films de Full Moon Productions hacia el cine y dejar de lado un tanto el formato de video casero, se tomaría las cosas con calma y básicamente apostaría a la segura al proponer que “Puppet Master II” (1990), en la práctica, continuara con el esquema narrativo y visual de su precuela, retomando el leitmotiv inicial para presentar una historia un tanto más desarrollada, a cargo de David Pabian, y apostando por una notable mejora en los efectos especiales del film, por lo que a nadie le extrañará que Band escoja como director al destacado efectista especial David Allen, uno de los grandes colaboradores en las producciones de Charles Band como “Ghoulies” (1987) de Albert Band, “Dolls” (1987) de Stuart Gordon y, por supuesto, la propia “Puppet Master” (1989) de David Schmoeller.
David Allen, que había iniciado su carrera de la mano de Charles Band además para luego participar en films de “otro presupuesto” como “Ghostbusters II (1989) de Ivan Reitman y “Honey, I shrunk the kids” (1989) de Joe Johnston, no sólo destacaba por su indiscutido talento en el stop motion, sino por ser heredero natural de maestros de esta técnica como Willis O’Brien (“The Lost World”, 1925; “King Kong”, 1933) y Ray Harryhausen (“The beast from the 20,000 phantoms”, 1954; “Jason and the argonauts”, 1963) y, por tanto, con una visión mucho más acabada de lo que es la artesanía visual de los efectos especiales, que siempre deben estar al servicio del film y no al revés, como lamentablemente hoy presenciamos una y otra vez en las grandes producciones de Hollywood, en el abuso del CGI.
Por lo mismo, a pesar de que Band incide notoriamente más en el guión, el aporte de Allen en la confección visual de “Puppet Master II” (1991) resulta decisivo para reforzar el encanto y eficacia del film, haciendo que esta secuela resulte mucho mejor acabada que la legendaria y pionera “Puppet Master” (1989) de David Schmoeller. En ese sentido, la escena inicial es, prácticamente, una declaración de principios de Allen, con las marionetas reunidas en un nebulosa y lluviosa noche en el cementerio ubicado detrás de Bodega Bay Inn (lugar en donde ocurrieron los hechos de la precuela), resucitando a André Toulon para que éste retome su venganza y fabrique más del brebaje que permite que estas criaturas puedan moverse.
Y hablando del marionetista francés, no puedo dejar de mencionar el aporte de Allen para caracterizar a Toulon, en un verdadero homenaje a los mad doctors de las películas de Universal Pictures de los 40s y 50s y otros personajes atormentados de películas como “L’orribile segreto del Dr. Hitchcock” (1962) de Riccardo Freda y el díptico de “The Abominable Dr. Phibes” (1971) y “Dr. Phibes Rises Again” (1972) de Robert Fuest. De hecho, su caracterización evidentemente evoca al personaje de Jack Griffin de “The Invisible Man” (1933) de James Whale, con increíble maquillaje del legendario Jack Pierce, y al mencionado personaje de Anton Phibes del díptico “Dr. Phibes” (1971-1972) de Robert Fuest, con maquillaje de Trevor Crole-Rees.
Por supuesto, el resultado es el personaje definitivamente más interesante del film (tampoco se puede decir que abunden personajes destacables) que, por un lado, refleja la megalomanía del hombre de ciencias (Toulon no es esencialmente un científico, pero al tratar con fuerzas arcanas de la vida y la muerte juega un rol de alquimista o nigromante) que experimenta con la creación de la vida y, por otro, el sujeto dañado psicológica y emocionalmente por la pérdida de un ser querido, en este caso, su esposa.
Es precisamente este último elemento narrativo en que la película muestra, además, un halo a tragedia romántica el que definitivamente le juega bien, porque establecerá uno de los principios dogmáticos más importantes de la franquicia, que es la búsqueda incansable de Toulon de transferir el espíritu de su difunta esposa inicialmente a un muñeco (y luego a un cuerpo humano, aunque en este film no lo tiene pensado del todo de esta manera) hipotecando en ello todos sus esfuerzos y, al mismo tiempo, la poca cordura que le queda. Los flashbacks que Toulon tiene durante el relato dan cuenta de ella y de paso sirven de explicación para comprender cómo fue que el marionetista se hace con la fórmula para dar vida a los muñecos, en Egipto.
Este aspecto narrativo, el de la construcción del personaje ancla de la que se transformará en el futuro en una franquicia muy longeva (con 14 entregas hasta la fecha entre películas y crossovers) André Toulon, constrastará, sin embargo, con el resto de los personajes, que resultan prácticamente anecdóticos al leitmotiv, y en donde surge la pregunta de por qué Band insiste con el grupo de parasicólogos que intentan investigar los sucesos de Bay Inn, sin proponer ningún otro elemento narrativo adicional asociado a los personajes. En ese sentido, el espectador tiene toda la razón para sentir que el film se muestre a sí mismo como una reformulación de la precuela. De cualquier forma, “Puppet Master II” (1991) no deja de tener una correcta consecución de escenas, aunque no esté exenta de errores de lógica, siendo uno de los más emblemáticos el de la lápida de Toulon, en la que figura 1941 como fecha de su muerte, cuando en la precuela se narra explícitamente el suicidio de Toulon en 1939.
Volviendo con el apartado técnico de “Puppet Master II” (1991), como señalé, el film regala una mayor variedad de escenas de interacción de los muñecos con el resto de los personajes, con una técnica de stop motion evidentemente mejorada. Las escenas de ataque y asesinato, concretamente, están mejor rodadas y entre las cuales cabe destacar la ya mencionada escena de la resurrección de Toulon, el doble ataque de Blade a Lance y Wanda, el ataque de Pinhead a Michael y el espantoso asesinato de la pareja de campesinos Matthew y Martha, a manos de Leech Woman y Torch. Por supuesto, también vale la pena citar el clímax en el que las marionetas se vuelcan contra Toulon una vez que se dan cuenta de que han sido utilizados para un fin más personalista de parte del marionetista francés, todas escenas realizadas por los técnicos de las compañías de efectos especiales Modus EFX y la del propio director, “David Allen Productions”.
Lo que nos lleva, por supuesto, a hablar sobre los verdaderos protagonistas del film y de la franquicia, las marionetas. Repiten en el selecto grupo original el líder Blade, de rostro cadavérico equipado con un gancho y una corta pluma en lugar de manos; Jester, con aspecto de arlequín medieval y que puede girar su rostro como si fuera una tombola; Pinhead y su diminuta cabeza en forma de pico, pero provisto de cuerpo desproporcionadamente grande; Tunneler y su mortífero taladro en la cabeza; y Leech Woman, la “sexy” marioneta con forma de femme fatale de cuya boca salen monstruosas sanguijuelas. Sin embargo, Toulon incluirá el implacable Torch, muñeco que combina de cierta forma las apariencias de Adolf Hitler y Darth Vader, provisto de un mortal lanzallamas en la boca, con el que suele achicharrar a sus desafortunadas víctimas, y que demuestra en su estreno estar a la altura de los otros muñecos del grupo original.
El reparto “humano”, como ya señalé, no resulta nada realmente destacable, en donde encontramos a Steve Welles (“Los Locos Addams”, 1991) quien interpreta a un André Toulon completamente cubierto de vendajes; Elizabeth Maclellan, en tanto, encarna a Carolyn Bramwell y también en los flashbacks a Elsa Toulon, esposa del demente maestro de marionetas; Nita Talbot (“Hogan’s Heroes”, 1967-1968; “Amitiyville: it’s about time”, 1992) personifica a Camille Kenney y Collin Bernsen a su hijo, Michael, que termina teniendo una relación de pareja con Carolyn.
Como no podía ser de otra manera, encontramos a cargo de la partitura de “Puppet Master II” (1991) a Richard Band, hermano de Charles y encargado de prácticamente todas las bandas sonoras de sus películas. Retomando las melodías de la precuela, que también fueron compuestas por él, Richard Band experimenta las posibilidades de los sintetizadores, instrumento emblemático en su prolífica carrera.
En resumen, una segunda entrega que a pesar de ser en la práctica una reformulación de la premisa anterior, gana puntos en especial en el apartado técnico, destacando sus mejores efectos especiales y su lograda atmósfera a medio cruce entre tragedia romántica y película de horror.
No, no, no y no... esto no es lo que me esperaba cuando me puse a verla después del tiempo que sucedió tras mi primera vez con esta secuela. La anterior de Puppet Master me había gustado por el hecho de ser una película divertida y con una interesante propuesta, y no es que esta se haga aburrida, en lo absoluto, de hecho entretiene de igual forma y se hace rápida, pero tiene mas errores que en la anterior. En esta ocasión el villano es Toulon revivido (el que se muere al inicio de la segunda), que quiere conquistar a una de las chicas protagonistas porque cree que es su esposa y ahí es cuando entran el famoso grupo de marionetas, no es una gran trama pero pasa sin problemas. Los personajes son incluso mas simples que la anterior, no se como lo consiguieron pero logran hacer que te importe menos quien vive o quien muere. El nuevo diseño de Toulon está increíble (a pesar de parecer un plagio directo de Darkman), solo eso diré. Las marionetas son los mismos que la anterior, a excepción de Torch, la nueva marioneta en el grupo que consigue lo que los otros no tenían, un diseño imponente e implica un verdadero peligro, aparte de todos es el que brinda las mejores muertes (aunque en general tampoco da miedo). Hablando de las muertes todas son x como las de la primera, solo las de Torch valen la pena porque son las mas elaboradas y las que mas trabajo tienen en FX y maquillaje. El final no me gusto en nada, ya que no brinda nada a las demás secuelas y no se cuenta nada de lo que sucedió en este ni mucho menos. En fin, regular secuela de Puppet Master que hubiese sido mejor si los aciertos de la primera se hubiesen mantenido.
digna secuela que en el tramo intermedio se hace algo lenta, cabe destacar la aparicion de torch la marioneta lanza fuego! el resto de los muñecos son los mismos pero esta vez resucitan a Toulon! en esta parte explica un poco mas del origen pero no del todo ya que eso se vera mas a fondo en la tercera parte. Es muy buena pero no la recomiendo a personas q no hayan visionado o gustado de su primera parte, el personaje de Toulon esta algo desabrido pero cumple, las actuaciones estan correctas hasta ahi. es una digna secuela y nada mas, a mi gusto la tercera es mucho mejor. Pero si te gusto la primera obligadamente tenes q ver esta. a mi me a gustado.
A mí, en su conjunto, no me ha gustado. Es cierto que tiene su encanto. Y que tiene sus buenos momentos. Los muñecos son de largo lo mejor de todo: ¨Cabeza de cerilla¨, ¨Cabeza de taladro¨, ¨Cara de cadáver¨. El muñeco ese que parece llevar un casco de ¨Star Wars¨, pero que es el más cabrón de todos. Los asesinatos, simplemente cumplen. La momia con anteojos; entre el par de monólogos que se suelta y lo pedante que resulta... Menos mal que en su tramo final por lo menos cumple. Es super lenta en muchísimos momentos. Para mí, curiosamente sus mejores momentos son, como empieza (Su prólogo está guapísimo) y como acaba.
Realmente una secuela muy digna de aquella gran primera parte. Una segunda entrega bastante mas sangrienta que la original, más ridícula y por ende más graciosa, tiene mejores efectos especiales y una historia sencilla pero entretenida. Hay que reconocer que las actuaciones son horribles. En fin, una secuela que superó a su antecesora. Recomendable!
creo que este tipo de historias se benefician mas de elementos menos convencionales para dotar al asunto con una atmosfera mas insana.
digo esto, sobretodo, por los personajes protagonistas, que son bastante rudimentarios, con rudimentario romance incluido. mas interes puede tener el cabroncete de turno pero tampoco me parece la leche.
tampoco el argumento deja de ser rudimentario. esto no tiene por que ser malo si la cosa tiene chispa. pero en este caso no me lo parece.
destacaria algun muñeco de aspecto impactante y poco mas.
en fin, que esta es, solo, mi rudimentaria opinion.
Muy buen segunda parte, e inovadora en el tema de juguetes asesinos y poseídos, viendo las buenas opciones de donde sacaron para una nueva parte, esta es muy convincente.
La nueva marioneta es de lo mejor y sumamente recordable, sé que en la mayoría de películas de terror uno termina simpatizando más con el asesino que con los protagonistas, pero creo que aquí hay un verdadero problema, ya que lo más destacable de estos son sus muertes, porque de ahí no recuerdo ni sus nombre, son personajes que ni siquiera hicieron el intento de desarrollarlos un poquito.
Como en todas las películas las marionetas se roban el show, siempre tan cárismaticas como siempre.
Las actuaciones sigun igua de malas, pero de forma leve la sangre y las muertes son más gráficas.
en lo personal me gusto un poco mas que la primera por varias razones la primera es que es menos aburrida en segunda es que salen mas los muñecos y en tercera es que hay mejores muertes pero sobre todo es por la aparición del nuevo muñeco torch definitivamente es el mas peligroso de todos y gran idea de revivir a toulon en cuanto las actuaciones y efectos es prácticamente igual que la primera si excepción
Las marionetas retornan forzadamente.
Una mejor inauguración no pudo tener Full Moon en 1989, puesto que con la obra escrita por Charles Band, ¨Puppet master¨, revitalizo las viejas formulas de muñecos asesinos, como lo había hecho Tom Holland en 1988 pero Band en el mercado domestico internacional.
Dicha cinta fue un bestial éxito que estampo a la Full Moon entre las primeras filas de las productoras mas respetadas del cine de horror de serie b, cosa que la Empire no había logrado jamas. Para la Full Moon el sello que representara a la productora terminara siendo este. Es que el film de las marionetas logro algo que ninguna otra pelicula pudo lograr y allí fue cuando Charles Band se empezó a inclinar por el lado de representar el horror en paquete pequeño.
La Full Moon Features se postulaba como una productora mas fuerte y agresiva que aquel tibio intento llamado Empire, claro que las circunstancias ya eran otras por que esta segunda empresa logro tener el sustento económico de Paramount Pictures durante bastante tiempo, si mal no recuerdo hasta 1995 pero Charles Band y su legión de directores lo usaban y explotaban a tope.
En 1991 el segundo hit fuerte de Full Moon fue ¨Subespecies¨, una pelicula vampirica y simpática que supo ser un buen titulo para el mercado de los videoclubs, y este titulo apesar de contar con una trama vampirica volvía a utilizar la formula de lo pequeño metiendo unos singulares y divertidos monstruos que reafirmaban el poderío que empezaba a contar la empresa con estos bichos miniaturas.
Siguió por aquel entonces ¨Dollman¨ y otra larga serie de títulos hasta que ese mismo 1991 de forma casi exigida y obligatoria regresaron las marionetas en ¨Puppet master II¨, film que volvió a tener a Charles Band detras del guión y con la particular dirección del artesano creador del stop motion de las marionetas, David Allen.
David Allen no es director pero su amigo personal Band le encargo que tome ¨Puppet master II¨ como en 1985 lo habían hecho juntos en ¨El amo del calabozo¨, formando asi su segunda y ultima experiencia como cineasta.
Mas que efectiva segunda entrega de ¨Puppet master¨ que hasta diría que mejora mas el contenido desprolijo que la anterior había dejado entre nazis y los millones de conceptos que se usaron.
Convengamos que ¨Puppet master II¨ se va también bastante de la mano con la trama sobretodo en el final donde los despropósitos no paran de figurar en el largometraje pero es cosa normal y mas en los films de Full Moon o Empire, lo bueno de aqui es que el material resulta ser hasta mas entretenido que el de la primera sin aportar mucho a la trama original.
Eso si, hay algunos detalles que van develando mas de lo que fue la vida de Toulon y su creación de las marionetas vivientes, nada exuberante pero que sirve como para ir enganchando mas a la historia general sobre el pasado de dichos juguetes. Mientras la primera entrega intentaba manejarse con algo mas de seriedad en esta, David Allen lo hace todo de forma mas liberal y despreocupada, cosa que funcione mas, a el no le interesa la limitación que hay por que el tipo se juega todo.
Las marionetas vuelven a estar brillantes y hacer mas malignas que nunca, atención por que a las ya conocidas marionetas se les suma una nueva, Torch, el cual tiene un lanzallamas en su brazo, aunque dicha marioneta no tendrá mucha relevancia en la franquicia.
Esta segunda parte muestra ser bastante mas violenta y sangrienta que la tibieza de la primera, claro que hay que decir que las muertes son cutres y falsas pero al fin y al cabo son lo suficientemente sangrientas.
El escenario vuelve a repetirse al de la primera parte, el hotel frente al mar donde ahora un grupo de parapsicólogos (otra vez) se introducen a investigar.
¨Puppet master II¨ es una interesante secuela que pone en su lugar a la trama dándole algo mas de coherencia y apoyándose también en las aventuras de todas las marionetas mas que de la trama de los parapsicólogos (rollo que ya conocimos en la original).
Nuevamente los efectos especiales parecen progresar mas, haciendo uso sutil nuevamente del stop-motion y del arte de mover las marionetas con mucho talento o mejor dicho habilidad. La composición musical de Richard Band otra vez es la misma pero que vuelve a ser disfrutable por segunda vez, claro que ya luego de dos veces la cosa no resultara igual sino mas bien tediosa.
Sumamente entretenida y divertida, ofrecen las marionetas otra vez un espectáculo muy disfrutable de mirar.
Atención que esto apenas es el comienzo de una larga franquicia de un total de 11 entregas por lo que hay marionetas para rato. Recomendable.
Actuaciones:4.5
Música:6.5
Efectos:7.5
Muertes:6.5
Historia:4.5
Final:6.0
Mi nota para ¨Puppet master II¨ es un 6.5/10. Buena.
Lo mejor: La película mejora respecto a ritmo y en acomodar un tanto las desprolijas piezas de la primera.
Lo peor: Las interpretaciones forman de lo mas flojo del pastel por lejos aunque eso no es que importe mucho en estos productos.
aceptable secuela de puppet master, aunque no supera la primer parte, no esta mal, la trama es sencilla, la ambientacion similar a la primer parte, los muñecos hacen bien su aporte y de hecho las muertes estan muy bien, ademas tenemos a un nuevo personaje. torch, que no esta mal, aunque siempre el preferido sera blade.
dentro de las producciones de la full moon recomendaria esta saga al menos para ver lo mejorcito de esta productora, igual no quiere decir que todas las peliculas de estas marionetas sean buenas.
Segunda entrega. Después del éxito que tuvo la primera parte era obvio que habría una segunda película de esta saga. Se aprecian nuevas marionetas en esta segunda parte, lo que llama más la atención del espectador. La película cuenta con un guión interesante donde podemos ver que las marionetas reviven a su creador, Andre Toulon. Hay una buena historia y buen ambiente.
Mi puntuación es: 6 de 10 posibles, recomendable.
Tabo.
Segunda parte de la famosa saga Puppet Master, esta continua a la anterior, aunque pierde en ciertos aspectos, como toda segunda parte, se hace extensa la espera de muertes y el terror, la película se desarrolla lentamente y por lo menos a mi me aburrió por momentos, tiene algunas escenas rescatables pero nada mas.
Continua la historia, las marionetas reviven a Toulon, el que les dio vida, mientras tanto un grupo de investigadores paranormales llegan al hotel en donde ocurrieron los hechos de la primera, pronto se verán atacados por diabólicas marionetas, y uno a uno irán desapareciendo.
Como dije antes es casi lo mismo que la primera, efectos, maquillaje, las actuaciones parece que empeoraron, muertes regulares, lo que si podría destacar es la aparición de un nuevo personaje, Torch, que me gusto bastante, y el final, no se esforzaron mucho, lo mismo que la primera.
Hasta ahora esta saga no me ha impresionado para nada, no la considero resaltante, hay películas acerca de muñecos malvados mucho mejores que esta, Puppet Master es solo otra historia, en fin espero que la tercera me convenza de una vez por todas.
Si eres amante del cine de terror y te gusta explorar películas de este tipo, que consiguieron ser reconocidas no por su ganancia sino por sus seguidores, convirtiéndose al igual que muchas otras en una obra de culto, solo por curiosidad échenle un vistazo a ver que tal.
Mi puntuación 5/10
Entretenida pelicula para ser de aquella época y ten partes muy bien logradas de movimiento de marionetas.
La actuación se nota que es floja, un guión que sigue muy bien el ritmo del film y no para; los efectos especiales sobre los muñecos estan muy bien hechos, y en especial a Torch, ese es mi marioneta favorita, dejando a varias víctimas quemadas.
Me gusto la parte en el que quemaba a la gorda de la misma manera que la gorda mato a la Muner Sanguijuela, venganza.
Luego esta el destartalado Toulon, al que dan vida las marionetas para que cree mas brebaje de la vida y que las almas de las personas que controlan las marionetas sigan vivas.
Muy entretenida con muertes algo favorables y pasables, y una cruel. Jesper muy triste. Pero el final es algo muy raro, pero impresionante sus acciones futuras.
En general muy entretenida, algunas escenas me dejan mal sabor de boca pero las siguientes algo mas favorables y algo que muestran cosas que no dijeron en la anterior (se supone). Le doy un seis, hay veces en la qe las escenas son algo un poco falsas, no son muy creíbles, pero las es esas que mas me gustaron eran las marionetas actuar, eso si: Tunneler atravesando la cabeza al chaval y luego le aplastan con una lampara, Torch quemando a la gorda, las marionetas contra Toulon, esas escenas.
Recomendable para aquellas personas que es usté las marionetas actuar.
Saludos y toda esa bazofia.
Voy a utilizar varios spoilers, asi que si no queres que te arruine, la peli tene cuidado al leer.
Continua la saga de los pequeños diablos, pero comienza a bajar el nivel. Por lo menos lo hizo con ésta segunda parte, que resulta bastante similar a la primera en cuanto a argumento, cambiando y agregando un par de cosas. Entre ellas, una nueva marioneta llamada Torch, que a mi parecer no es la gran cosa, pero no estuvo del todo mal su aparición. Tambien el hecho de que ellos reviven al titiritero que les dió la vida (para luego quitarsela al final de la peli), volviendo en una forma de cadaver andante, cosa que no me gustó para nada. Y asi como ésta, un par de cosas mas.
Acá, y como en la anterior entrega, ellos se llevan todo el protagonismo de la pelicula... pero eso les jugaria en contra ésta vez. Suena un poco raro, pero el hecho de tener tanta participacion casi desde el primer minuto le quita mucho del misterio a la cosa, haciendolos perder ese toque maligno que los caracteriza...o por lo menos asi lo veo yo. Me gustaba cómo se mantenian ocultos, generando intriga hasta su aparición, aunque a esta altura ya los conociamos perfectamente.
Las muertes estan bastante aceptables, sobre todo en la que el responsable es Tunneler... bastante angustiante los ultimos minutos de la victima en frente de sus compañeros. Las demas se dejan ver.
La recta final es lo mas flojo, y poco se entiende como reaccionan los Puppets. Floja secuela a mi entender.
Buena segunda parte de esta larga saga, aunque no es mejor que la primera. La primera me gustó bastante, pero ya se repite algo esta película, matar al mismo tipo de gente y las muertes están bien, pero en la 1 están bastante mejor. No me ha gustado que mataran a uno de mis muñecos favoritos de la 1, ya que me pareció muy bueno ese muñeco y muy original (no quiero poner spoiler porque luego pasa lo que pasa). Como ya dije antes, las muertes son buenas pero peores que la 1, y en la 1 eran algo más explícitas y en esta no tanto, algunas muertes no se ven. Andrè Toulon me recordó un poco al asesino de ¨los crímenes del museo¨ de 1933 (o al del remake ¨los crímenes del museo de cera¨ de 1953, que el asesino es prácticamente el mismo), y me ha gustado un poco que me recordara a esa película aunque no tengan mucho que ver. Un aspecto positivo es que hayan añadido al muñeco que parece un robot y que escupe fuego, me ha gustado bastante que añadan nuevos muñecos. Peor que la 1, pero no está mal la película.
Una segunda parte con tantas cosas buenas como malas. No me gustó para nada que en el argumento, se hayan repetido un grupo de Parapsicologos, metafísicos y demas personajes místicos. Me gustó eso en la primera, pero ya en la segunda me pareció un abuso argumental, pero por otra parte me gustó que hayan metido a Andre Toulon como una especie de Zombie mal conservado.
Destacar tambien lo mejor de la película, quizás lo único bueno, que son las marionetas. Aunque en esta entrega prendan fuego a Leech Woman ( la muñeca, que en la primera película de Puppet Master vomita sanguijuelas), no me gustó ya que en la 1° era mi favorita. Pero por otra parte nos presentan a otros 2 Puppet, podemos ver a Torch que es la marioneta piromaníaca con un lanzallamas en su brazo derecho. Mephisto también hace su presentación, es el que aparece en la obra de Fuasto, el títere parecido a Blade ( Blade es el que tiene brazos de cuchillo y gancho).
Lo destacable de las sagas son las muertes, lo demas es relleno quizás. Hay secuencias en esta,como en otras, que no aportan nada y cuando son romanticas hasta son molestas.
Como en su primera edición esta también tiene los típicos errores de los que se ven brazos y los hilos que mueven a las marionetas, pero es lógico, aunque ya para la segunda podrian haber pulido mas la edición.Pero bueno ya sea por época, o por presusupuesto es entendible, aunque ya empieza a cansar.
No me gusto mucho la nueva personalidad de Andre Toulon, ya que en la 1° uno puede pensar que es totalmente distinto. Algo a favor es que en esta peli, Jester (el bufon) tiene mas participación, aunque algo dramática para el.
En fin, un film regular, la saga es rara. Lo mejor son los Puppet, pero a veces los argumentos son bastante molestos, el Zombie Toulon esta muy bien,salvo su personalidad, el nuevo Puppet lanzallamas me resulto lo mas destacable,lastima lo de Leech Woman.
Es una pelicula de marionetas asesinas,las muertes y los metodos son acorde a sus limitaciones,por eso la tomo como una comedia con muertes.
Tunneler sabe como destrozar cabezas, Blade sabe como Degollar como si fuera el mejor asesino, y Pinhead siempre se carga a golpes a todos.
Críticas: 43
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ivankiller
4
“Ese sueño infernal no era el escape sin sueños que anhelaba”
Siempre es frustrante cuando una película viene con grandes escenas, ideas geniales y muestra potencial solo para colapsar y quemar su historia porque decidieron apresurarse.
La trama toma el camino que esperaba que tomara: Explorar la historia de Toulon al resucitarlo, y con él llegaron un par de conceptos interesantes listos para darnos una buena trama para acompañar la diversión que se supone una entrega de marionetas asesinas debería dar... Pero enredados con esto también vinieron conceptos ridículos que existen para ser una contraparte de la diversión. La parte de la “reencarnación” es ridícula y muy destructiva; Toulon no es un hombre delirante, sabe que no recuperará a su esposa; Está claro que no lograría mucho si tuviera éxito en el objetivo que se impone en esta cinta, haciendo que la arriesgada misión fuera inútil y francamente estúpida. A pesar de esto, la película va con todo de todos modos y cada parte de la trama gira en torno a ella. Apesta, pero supongo que es lo que obtengo por intentar tomar en serio a esta barata franquicia.
Al menos tiene sus escenas divertidas, Tuolon es un villano muy de la vieja escuela y nos dan mucho más tiempo en pantalla con los títeres. Lástima que todo lleva a una conclusión absurda que arroja todo el potencial que la franquicia pudo haber tenido por la borda, limitando no solo su antecesora sino a todas las que vendrán luego.
Y como cinta de “Explotacion” o Slasher” tampoco sirve. Hay muchos asesinatos que suceden fuera de la pantalla; si no fuesen por las tetas esto es fácil un PG-13. Es una gigante pena porque dejan en claro que los títeres prácticamente se van a matar gente mientras a la audiencia le toca ver a los aburridos personajes humanos, que encima actúan mal (Habría pagado un montón de dinero para ver al muñecco “Blade” realizarle una Excerebración a la chica de la última película). Pero me gusto el nuevo muñeco Torch y su entusiasmo en prender fuego cosas.
Puppet Master II es muy decepcionante, ya que es obvio que se hizo lo antes posible y de forma apurada para que pudieran capitalizar el éxito de su predecesor. Es aburrido cuando los títeres no están en pantalla y es triste cuando tiene éxito en hacer algo bien como los efectos o una buena actuación, ya que fueron desperdiciados en una película mal ejecutada con una historia mal pensada. Tiene suficientes cosas buenas para que valga la pena verla, pero mantén tus expectativas muy bajas.
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