Calco descarado a mad max 2, pero a la italiana, le cambiaron el combustible por el agua, pero después es casi igual. De todas las películas influenciadas por mad max, esta es la que mas trata de copiarla en amplios sentidos. Aunque cae en gracia después de todo, el hecho de su bajisimo presupuesto tiene sus momentos.
ideal para los completistas del cine post apocaliptico.
No viene mal ver algo de esta índole de ves en cuando.
Es realmente acojonante , de esas películas irrepetibles que se rodaron en almeria (no todo iba a ser spageti gwesternssss) en los míticos años 80´s. Que más da que sea una copia (mala no , malísima) de mad max 2 ???? esto es para disfrutar a las tantas de la mañana arto to perdio de las risas. . . Vaya tela que cutrerio italo-español. . . Y la música??? es realmente entrañable, con un deje ¨tristón¨ que le viene al pelo a la historia. Momentos a resaltar¿¿¿¿ pues todo. . . Pero lo más bizarro es cuando al principio se cae uno con un casco y da en una piedra y se supone que se muere ¡¡ con el casco puesto ¡¡ y la oxtia que se da no es para tanto. . . O cuando alien se encuentra con thrash y se dan de oxtias y luego la besa efusivamente sin venir a cuento. . . En fin , irrepetiblemente cutre. . . .
Es una película simplemente sublime, entrañable, cutre a más no poder, con una imagen propia de la época en la que se rodó y que ya jamás podremos disfrutar...en fín, un deleite para los que nos gusta el cine basura y bizarro (bizarrismo es lo que hay de sobra aquí)...de ahí que le dé la máxima puntuación.
La historia recuerda a la de los dibujos de Marco, pero cambia a Marco por un niño llamado Tommy (con brazo bio-mecánico incluido), al mono amelio por un hámster llamado yo-yo, y que este busca a su padre en vez de la madre (como curiosidad, en la película ¨actúa¨ el padre verdadero de Tommy (interpretado por Luca Venantini), es el papel de John y lo hace Venantino Venantini.
Mención especial merece la música, de verdad, es muy de aquella época del cine cutre, muy especial, incluso triste diria yo, inconfundible e inolvidable...y la imagen e iluminación en general, con los rayos de sol de Almeria siempre presentes (se rodó en el desierto de Almeria), y con cosas tan cutres como la vestimenta, las motos, coches y camiones de esos años, fx muy pero que muy cutres...en fin, un placer máximo para los amantes de lo cutre.
El actor que hace de Crazy Bull (Fernando Bilbao) es uno de los habituales del spageti western y del fantaterror de aquellos años, un mito vamos....
La 1º vez que la ví fué siendo un niño, un jueves por la noche la dieron en tve1 y era el mismo dia de la fiesta de despedida del curso escolar. Por eso es tan entrañable para mí. La 2º vez fué por a3 un sábado por la noche, la ví al regresar de un concierto en la plaza de toros de mi pueblo y la última anoche, noche de Halloween, después de venir de salir por ahí to arto cerveza y la ví con más whisky...diversión asegurada.
No hace falta decir que imita a Mad-max 2 de forma descarada y a Marco ¡¡
Con frases míticas como la que le dice Papillón a Alien (curioso que le pusieran este nombre al personaje-copia del loco Max): ¨Yo no tengo amigos...ni agua que darte ¡¡ ¨
Siempre me quedará la duda de si al final, cuando explota la central térmica de los mutantes y empieza a llover solucionando así la excased de agua, Alien llora realmente o es, como él dice, la lluvia que le cae en la cara...un tipo duro si señor ¡¡ (atención al camión que está detras de ellos 3 en ese momento, como se le cierra la puerta sola sin que nadie la empuje).
Imprescindible para los maniacos-bizarros-cinéfilos.
Despues de que Mad Max 2 se estrenase,muchos directores explotaron este tipo de genero al maximo.
Y esto es lo que ha ocurrido.
El personaje es identico a Max Rockatansky en Mad Max 2,rudo,solitario e inexpresivo.Igual que ocurre con el chico,que se hace amigo del protagonista,el malo,Crazy bull,es el hermano gemelo de Wez y,en vez de ser combustible, es agua.Harrison consigue
un cutre mockbuster,que,a pesar de todo,tuvo su cierto exito en los cines.
Es totalmente clavada a ¨mad max 2¨,aunque funcionó bien en las taquillas. Más o menos está bien rodada y las volteretas que daban los coches eran,aunque parezca que no,espectaculares. Lo que más destaca es la extrema violencia que se desarrolla en el largometraje,aseguro,a los que les guste ver este tipo de cine (post-apocalíptico),que es muy violenta,casi ¨gore¨. Este tipo de producciones se produjo después de ¨callejón infernal¨,¨firebird 2. 015 a. D. ¨ y las taquilleras ¨mad max¨ y ¨mad max 2;el guerrero de la carretera¨,que han sido las inspiraciones para el director giuliano carnimeo. Atentos también a los seudónimos del equipo y reparto,un ejemplo es el nombre del director en italiano:giuliano carnimeo. Y en americano:jules harrison. .
Pues a mi me encantó este pedazo de mierda super cutre, es la caña lo mala que es, auténtico cine basura inigualable y con el encanto de aquella época, una copia mala de mad max, al igual que ghoulies copian gremlins, robowar a depredador y robocop, etc,,, es la ostia en vinagre para los amantes del cine malo de cojones....
quiza la xplotation italiana mas calcada de mad max,en esta ocasion en vez de combustible,lo hacen por agua,se hace bastante pesada dada la trama lentisima y aburrida que tiene en el que el escenario carece totalmente de elementos atractivos siendo siempre repetitivos.Clasica violencia de bajo presupuesto para personajes embutidos en cuero y persecuciones interminables de vehiculos futuristicos motorizados en infinitos desiertos.Atencion a la copia del calvo de la moto de mad max 2.por que no tiene desperdicio.La banda sonora es horrible.
Críticas: 8
Mad Warrior
2
Es un hecho (casi) asumido por todos el que George Miller revolucionara la industria cinematográfica con la secuela de su ópera prima, ¨Mad Max¨, la cual no sólo inició una nueva era para el cine australiano, sino que se convirtió en un éxito arrollador por su inventiva para combinar los elementos clásicos del ¨western¨ con una feroz imaginería post-nuclear sacada de un cómic y una demoledora crítica sociopolítica.
A partir de su estreno en 1.981 se generaría lo conocido como la ¨fiebre ¨Mad Max¨ ¨, fenómeno que vivió su apogeo en los 80. Las más directas imitaciones las veríamos en Filipinas (con ¨Stryker¨) o en Nueva Zelanda (con ¨Warlords of the 21st Century¨), pero sin duda fue en tierras italianas donde el gusto por la explotación del género que ¨creó¨ Miller llegó a límites insospechados; el mismo año que el veterano Enzo Castellari sentaba cátedra con su ecléctica ¨Los Nuevos Bárbaros¨, otro cineasta de extensa carrera pero menor talento, Giuliano Carnimeo, quien como buen artesano probó suerte en toda clase de géneros (aunque su especialidad fue el ¨spaghetti western¨), decidió seguir el ejemplo de sus compatriotas y aportar su granito de arena a la ficción post-apocalíptica.
Para ello se desplazaría de nuevo hasta nuestras tierras almerienses. En sus amplios desiertos de reconocibles arenas e irregulares montañas se inicia esta película, donde se nos presenta, sin darnos ningún dato salvo por el título en inglés (¨Exterminators of the Year 3.000¨), un planeta futuro devastado por la guerra en el que los hombres se matan entre sí por el recurso más codiciado: el agua. Dos tipos a bordo de un coche de policía recorren las carreteras en busca de algo que desconocemos cuando se cruzan con Alien (¿a qué venía este maldito nombre?).
Y aparece con un vehículo con panel de control, parabrisas blindado, lanzamisiles incorporado y otras virguerías cuyo origen nunca se nos revela. El comienzo nos da una clara señal de lo que vamos a encontrar además de quedar patente la poca habilidad del director para entretener al espectador, ya que durante casi diez eternos minutos asistiremos a una aburrida persecución con mal final para el protagonista para pasar a un joven llamado Tommy que vive en una especie de complejo ecologista y que decide acompañar a los civilizados moradores del lugar en una expedición para encontrar agua, que también terminará muy mal por culpa de una banda de salvajes liderada por el malvado y patético ¨Crazy Bull¨ (a quien escupen en la cara constantemente).
Tras la masacre, el chico, como estaba previsto, dará con el moribundo Alien, al que ayuda y más tarde acompaña en busca de un pozo subterráneo que, por supuesto, sólo él conoce. Este muy fortuito y poco creíble encuentro (más tarde veremos que en este amplio y árido desierto se conoce todo el mundo) dará pie a una poco creíble relación entre ambos y a una serie de giros cada vez más absurdos (siendo la culminación el momento en que han de ¨curar¨ el brazo a Tommy) saliendo a la luz un argumento que no sólo desconcierta por su extraña, tediosa e incoherente estructura, sino por su afán de plagiar casi punto por punto la de ¨Mad Max 2¨.
Ya sea en cuestiones estéticas, narrativas o a propósito de los personajes, la sombra de la obra de Miller recorre de principio a fin este despropósito donde Carnimeo (acreditado como Jules Harrison por eso de la distribución internacional) parodia y degenera aquella con mucha caradura y poca gracia ateniéndose a los manidos códigos del ¨spaghetti western¨, su gusto por la violencia gratuita y una imaginería puramente ochentera y de elementos bizarros próxima al ¨cyberpunk¨ (¨cutrepunk¨ en este caso) en la que hallamos coches con sistemas ultramodernos, miembros biomecánicos y hasta una central solar (¿qué clase de Mundo post-nuclear desolado es este?).
Mientras el accidentado guión, que firma la eminente pareja Dardano Sacchetti/Elisa Briganti, avanza con sus traspiés, la incorporación de algunos individuos que más o menos tendrán su importancia en la historia y ciertas secuencias de acción que resultan medianamente entretenidas (donde hallamos cacerías con vehículos patrios tan recordados como los camiones Pegaso), ¨El Exterminador de la Carretera¨ se acaba convirtiendo en una involuntaria comedia gracias a sus ridículos diálogos y sus situaciones que no llevan a ningún sitio.
Todo ello coronado con la chapucera y ¨molona¨ música de Detto Mariano y un final que hay que ver para creer (el cual es, a su vez, una demolición en toda regla del argumento). Con su parecido a Franco Nero, su ¨look¨ a lo Michael Knight y los ropajes de Max Rockatansky, el nada carismático Robert Iannucci da vida al protagonista, cuya ambigüedad hace difícil adivinar si se trata de un antihéroe al uso o un renegado de pocas luces, y junto a Fernando Bilbao, que es enteramente una vergonzosa fotocopia del Wez que encarnara Vernon Wells, encabezan un bastante mediocre reparto.
En él únicamente cabe destacar al simpático Alan Collins o al mítico Eduardo Fajardo, en contraposición a los irritantes y poco inspirados Luca Venantini y Alicia Moro. El público sabía que se trataba de una burda y bastarda versión de ¨Mad Max 2¨, pero poco importaba, pues era la moda de aquel entonces, por lo que ¨El Exterminador de la Carretera¨, pese a sus monumentales fallos y carencias, tuvo un cierto éxito, sobre todo en el lucrativo mercado del videoclub (donde cientos de inocentes jóvenes eran engañados por unas cintas cuyas portadas prometían ofrecer más que su contenido).
Para Giuliano Carnimeo ésta fue una de sus últimas obras, pero para el cine ¨exploitation¨ italiano sólo era el comienzo.
Aún quedaba toda una década por delante para seguir sacando jugo y provecho de la fiebre ¨madmaxiana¨...y vaya si se haría.
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